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Jueves

Volví a ver al tal Jackson en la clase, pero él no podía hablarme ya que estaban los profesores y cuando intento hacerlo yo salí corriendo directo hacia mí casa.

Al llegar fui a mí cuarto, escuché gemido en la habitación de al lado así que me acerqué.

Abrí solo un poco la puerta, mí mamá estaba con otro hombre, la imagen era horrible, dejé de mirar y cerré la puerta, yendo a mí cuarto a encerrarme allí.
Dos horas más tarde mí estómago gruñía, tenía hambre, aunque no quisiera comer tenía que hacerlo, baje las escaleras la tele estaba prendida y el hombre que anteriormente había visto se encontraba en el sillón mirandola, como si fuese su propia casa. trate de dirigirme a la cocina sin que me escuchará pero él sabía que yo estaba allí.

_Detente_dijo, el se levantó estando sin remera, se dirigió a mí

_¿Qui-quien eres? ¿Que haces en mí casa?

_¿tu casa? JA pobre de vos

_Estupido, vete!_grite armado de valor

El vino hacia mí, tomándome del cuello, mí madre apenas bajaba de las escaleras gritó

_Sueltalo!_el solo me soltó, to caí en el suelo, pero hubiese preferido que me mate, antes de ver cómo golpeaba a mí madre.

Tomé un jarro que vi allí sobre el mueble y sin pensarlo lo golpeé, mí madre en el suelo al igual que el, se acercó en llanto, tratando de despertarlo y poniendo su cabeza sobre sus piernas

_MARK! ¿QUE HICISTE?_grito, a ella no le importaba que la golpeé, me gritaba y solo lo protegía a él, me hacía sentir como una basura.

Corrí a la calle empapado de lágrimas y sin saber dónde ir.
En serio quería morir en ese momento.

Yo ya tengo planificada mi marcha, no esperaré a que la muerte me pille por la espalda, prefiero morir a ser sometido a todas aquellas barbaries, no solo yo si no ver a mí madre tan destruida como ella está, no quiero verla sufrir por mí, por mí padre y mucho menos por los idiotas que ella siempre trae.

Recordé que ayer a la noche había tomado la receta que el medio la había hecho a mí madre por insomnio, yo solo la quería por que yo también lo padezco, pero si las tomaba en conjunto ahí dormir un buen rato y sin tengo suerte ni despertaría.

Fui a una farmacia donde pude conseguir aquellas pastillas, el farmacéutico solo me las dio, yo sin dinero le dije que lo anotará ya que eran urgentes.

Fui bajo un puente, donde nadie me  molestaria, había conseguido un poco de agua en  la canilla pública que se encontraba a una cuadra de la  farmacia, allí  abajo estaba oscuro así que podría  dormirme más rápido, abrí  el frasco antes de eso puse una canción en mí celular que posteriormente llevaba en mí bolsillo.

Mente suicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora