Amor Al Cuadrado

Capítulo 6

Cierro la puerta tras de mi y me dirijo a la cocina, ahí estaba él, de espaldas a mi, preparando un jugo en sobre, creo que de ¿naranja?, no megusta el jugo de naranja.

-hola-. le digo mientras tiro mi bolso al piso-. ¿también sales más temprano?-. sonrio

-pues más que tú, según veo-. dijo besando mi mejilla

-te sacaste el premio mayor, menos clases-.

-hay pizza en el comedor, ¿vamos a comer?-.

-bueno, ¿de que es el jugo?-. le pregunto despistada

-damasco, ¿porque?, ¿no te gusta?-.

-no... si, es decir que no es eso, si me gusta-. rió, levanto las cejas y siguió riendo

-vamos-. me dice señalando con la cabeza el comedor

Conversamos sobre nuestros padres, el colegio, parejas, gustos.

-¿vamos a ver una peliciula a mi cuarto?-. le pregunto mientras me paro de la mesa

-¿qué pelicula?-.

-una como la que viste ayer en el sillón, definitivamente no-. comenzó a reir y negó con la cabeza

-no te preocupes por eso, no quiero ver porno, no ando con ganas-.

-¡que asqueroso! , ibamos tan bien y tenias que joderlo-.

-¿a que te refieres con que ibamos bien?-. pregunta aún riendo

-nos estabamos comportando como gente normal-.

-pero, si yo no hice nada malo-. levantó las manos en señal de inocencia

-esta bien, sube, busca una pelicula la pones en el reproductor o buscas una por internet o ve si hay algo en la television-.

- con el desorden que tienes, no creo poder encontrar algo-. dice mirandome

-Joder!, vete de aquí, andate al cuarto de mi papá y encierrate, eres tan bipolar, eres cariñoso y luego me molestas, ya sube, sube-. le hago un gesto como si fuera un perro

-que desesperada-.

-sólo sube y déjame en paz-. se puso una mano en el corazón y la otra la levanto a la altura de su cabeza

-juro que durante esta noche me comportaré bien-. entrecerré los ojos y le hice un gesto con la mano para que subiera

-está bien, ¡pero si te pones idiota, fuera de mi dormitorio!-.

-de acuerdo-.

Estamos viendo Sherlock Holmes en mi cama y Me da mucha risa porque está el doctor Watson y bueno Yo también soy Watson.

Me reclino en su hombro y nos acomodamos...

-se siente extraño tener un "hermano"-. lo miro

-se siente extraño tener una "hermana"-. me mira, sonreimos y me empiezo a sentir incomoda

-voy a la cocina por un vaso de jugo, ¿quieres uno?-. me excuso

-bueno-.

Abro el refrigerador, saco el jugo y me pregunto, ¿y si me empieza a gustar mi hermanastro?, no es ético, pero supongo que no es tan malo como que me gustara un hermano de sangre, que por suerte no tengo.

-toma-. le entrego el jugo y se lo derramo a proposito sobre su camisa, sólo porque no quiero segir viendo una pelicula con él- lo siento, perdón, yo no queria, voy al baño por una toalla-. cuando llego lo empiezo a secar y el me mira apunto de estallar en carcajadas

-quitate-. se empieza a desabotonar la camisa y yo como pocas veces me pasa, siento mis mejillas arder, se la quita completamente y miro su torso desnudo, muy perfecto para mi gusto, quiero que me trague la tierra-. estas más roja que un tomate-. dice y yo ahora si que siento que exploto- mi cara esta aqui arriba-. dice cantarin y por alguna razón me acordé de lo que le dije a ese profesor de Matemáticas en gimnasia, quiero morir, lo miro y él con media sonrisa, una ceja levantada y mirandome me hace perder la cordura

-porfavor vistete-. le pido

-no tengo ropa-.

-busca en el cuarto de papá-.

-no es mi estilo-.

-pero es ropa, tapate y sale de aqui-.

-tu me derramaste el jugo, busca una solucion-. juro que cuando hice eso, la última posibilidad en mi cabeza era verlo desndudo de la cintura para arriba-. no querrás, que me pasee por la casa así ¿verdad?-. creeme que no me importaria en lo mas mínimo, dehecho me gustaria muchisimo

-no, claro que no-.

-entonces, ¿que hago?-. piensa rápido Amy, las camisas de papá son la única solución, fui por una y se la pasé- no me pondré esto, si quieres te la pones tú-. dijo pasando la camisa por detras de mi cuello y atrayendome como si de un perro se tratara

-no... gracias, yo estoy vestida-. estoy tan nerviosa, su cara está a centimetros de la mia y se que me esta molestando

-podrias no estarlo-. abrí los ojos de par en par, lo miré y senti ese sabor a hierro en mi boca y me di cuenta de que estaba mordiendo mi labio tan fuerte que ya sangraba...- si quieres empezamos en este momento...