capítulo15 Revelando al demonio

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Tsunade se quedó allí en shock absoluto. Ante ella estaba Naruto. El Naruto que le había dado una nueva vida, el chico que había hecho que valiera la pena volver a vivir. El niño que había muerto en el viaje de entrenamiento con Jiraiya.

Excepto que no estaba muerto. Estaba parado allí, ataviado con la armadura del Demon Dragon Rider. En una mano agarró la espada negra cubierta de runas, que ahora goteaba con la sangre de Danzo. La otra mano había recogido su casco.

A su alrededor, los ANBU con ella se sorprendieron un pozo. Aquí, antes de ellos, estaba el destructor de uno de los puestos fronterizos más grandes de Iwa, el hombre que, por sí solo, había provocado que Kumo abandonara la guerra. Descubrir que el hombre que hizo todo eso era en realidad el pelirrojo rubio que había sido el último en morir en la Academia, se quedó estupefacto.

Naruto se movió un poco, mientras Kushina agarró a Tayuya más cerca de ella. El flautista pelirrojo yacía en los brazos de Kushina, ajeno al mundo que la rodeaba debido a los sedantes que le había puesto el shinobi de Danzo.

Hubo silencio por varios momentos, antes de que Naruto finalmente se aclarara la garganta. "Entonces ... ¿Baa-chan? ¿Vas a decir algo?" Preguntó nerviosamente.

Tsunade, por puro instinto, gruñía al ser llamado así. "¡USTED ESTÁ BORDANDO BRAT!" Ella gritó, corriendo hacia él. Naruto se tensó, solo para encontrarse envuelto en un abrazo, mientras Tsunade lo abrazaba.

Kushina dejó escapar un suspiro de alivio, cuando Naruto parpadeó sorprendido. Tsunade lo abrazó fuerte, llorando. "Estúpido mocoso ... moriste ... niño estúpido y molesto", gimió ella.

Naruto sintió que sus ojos se ablandaban, mientras la abrazaba. "Lo siento baa-chan. Lo siento, te hice daño". Dijo suavemente.

El ANBU incómodamente se quedó atrás, sin saber qué hacer. Su problema se resolvió cuando Jiraiya aterrizó cerca de ellos.

"Tsunade, yo solo ... ¿qué ... qué está pasando ...?" Preguntó, confundido en cuanto a por qué Tsunade estaba abrazando a la figura blindada negra. Entonces vio la cara de Naruto, y sus ojos se ensancharon.

Tsunade miró a Jiraiya que solo estaba mirando a Naruto, con los ojos muy abiertos. Miró a su ANBU, luego a Kushina y Naruto. "Tal vez deberíamos ir a un lugar más privado para hablar de esto". Ella susurró.

Oficina de Tsunade, treinta minutos después.

Naruto se paró frente a Tsunade y Jiraiya en la oficina del Hokage. Kushina había llevado a Tayuya al hospital, mientras que Danzo se mantenía en un rollo de estasis en la persona de Kushina.

Tsunade finalmente había superado el shock y la felicidad de ver a Naruto con vida, y ahora podía ver la ira apenas contenida en sus ojos. "Naruto, aunque estoy feliz de verte, también estoy bastante ... No creo que enojada sea la palabra correcta, pero eso es lo que soy. Estoy enojada porque aparentemente has estado fuera estos cuatro años sin dejándome saber que estabas vivo. ¿Te importaría explicar por qué estás vivo y has decidido no hacerle saber a Konoha que estás bien?

Naruto respiró hondo. "Está bien ... pero es una larga historia".

Y así lo explicó. Les contó cómo Eragon lo encontró y lo cuidó hasta que recuperó la salud. Cómo había encontrado los huevos de dragón y que Onyxia había nacido para él. Explicó que se había quedado para entrenar y hacerse más fuerte para Konoha, solo para que esa meta cambiara a medida que entendía mejor el poder que tenía. Su rostro se entristeció mientras hablaba de la muerte de Eragon, luego el intento de Kyuubi de apoderarse de él.

Con ira, explicó cómo había aprendido acerca de su padre, su madre y la traición de Sarutobi. Ambos se sorprendieron cuando escucharon esto, pero mantuvieron sus preguntas para más tarde.

Jinete del dragón demonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora