You make me happy || KiriBaku

C R I M S O N R I O T.

5. Crimson Riot.

Una pequeña parte de Kirishima se sentía ligeramente culpable al poner solamente a su propio héroe favorito en vez de "héroes" en general sabiendo que todos los profesores eran profesionales bastante reconocidos. Pero tenía que admitir que ninguno de ellos le hacía sentir tan bien como lo hizo Crimson Riot desde su niñez. Incluso más en su adolescencia. Ni siquiera All Might le hizo sentir tan bien.

Crimson Riot, en cambio, fue la persona que le dio esperanza de la vida, de su particularidad, de sí mismo. Y también fue él quien le unió todavía más con Bakugo de alguna manera.

El hecho de sentir el mismo fanatismo por héroes distintos hacía que ambos pudieran pasar tardes y noches completas hablando de los que más admiraban. Contando curiosidades y cosas completamente nuevas para el otro. Aprendían juntos de una manera bastante ñoña.

Fue por eso que cuando supo de la feria que se estaría presentando en la cuidad, donde sabía habrían cosas de All Might lo tuvo todo claro. Quería ver la sonrisa de nerd que Bakugo solía poner cuando no se daba cuenta al momento de hablar del ex-héroe #1. Y no se sintió nada decepcionado por la expresión de sorpresa que le dio al momento de darle su llavero. Quizá no fue una sonrisa, pero fue suficiente como para que su corazón latiera a diez mil por hora.

Para Kirishima el simple hecho de poder conmover el corazón del rubio era un regalo suficiente como para tenerlo feliz todo el día.

Pero recibir dos regalos de su héroe favorito por parte de la persona que más le gustaba le hizo feliz toda una semana. Incluso todo el mes.

— Blasty, de verdad no tenías que comprar nada de esto.—fue lo que le dijo al momento de tener la revista de Crimson Riot y el llavero en sus manos.— ya sabes que no te di algo para recibir otra cosa a cambio.

Bakugo simplemente rodó los ojos mientras se cruzaba de brazos. Le había apartado del resto de sus amigos solamente para pasarle eso antes de irse de la feria. Ni siquiera supo en qué momento lo había comprado.

— Te iba a comprar una figurita, pero estaban agotadas, y no lo hice porque me diste algo, lo hice porque gastaste dinero en mí sabiendo que debiste gastarlo en ti, imbécil.

— Es lo mismo que decirme que sí lo compraste porque te di algo, Blasty.

— Cállate y aceptalo, mierda.

Kirishima soltó una risa al momento de escuchar el nuevo gruñido proveniente de la garganta ajena y apretó la revista contra su pecho, pensando que probablemente la masculinidad de Bakugo era igual de grande que su orgullo.

Pero el hecho de que tuviera el orgullo más alto que las notas de Yaoyorozu no era ningún impedimento para que el pelirrojo fuera igual de cariñoso que lo era con cualquier persona que le hiciera feliz.

Fue por eso que después de rezar a todos los Dioses posibles en los cuales no creía el poder salir con vida de sus siguientes acciones, se acercó a Bakugo con rapidez para que no pudiera esquivarlo, rodeando luego su cuello con fuerza para hundirlo en un abrazo para poder agradecer su gesto. Ni siquiera le importó que el cuerpo ajeno se hubiera tensado y se haya puesto en posición de ataque al momento de sentir aquella cercanía.

No le importó porque cinco segundos más tarde le correspondió el abrazo.

Bakugo completamente perplejo rodeó su cintura de manera lenta y pausada, como si lo hiciera casi de mala gana, pero Kirishima sabía perfectamente que no era así porque el rubio jamás hacía algo sin quererlo y si le estaba abrazando era porque quería hacerlo sí o sí.

Se dejó disfrutar de la cercanía por unos cuantos segundos más hasta que finalmente se separó para no incomodarle más de lo debido y posteriormente le dio una amplia sonrisa que demostraba toda la felicidad que estaba sintiendo en ese momento.

— Voy a atesorar este regalo por siempre, Katsuki.

— Tch, no es como si te hubiera dado la gran cosa, exageras, cabello de mierda.

Bakugo metió sus manos a los bolsillos antes de darse la vuelta, soltando un enojado "vámonos de aquí".

Kirishima se sentía orgulloso de sí mismo. Sabía que esos pequeños gestos que tenía el rubio hacia él no eran cosas que haría con todo el mundo. Ya sea dar un regalo o aguantar el contacto físico por más de dos segundos sin explotarle la cara.

La cercanía con Bakugo y toda la operación que tenía maquinada estaba saliendo perfectamente según sus cálculos.

"Operación enamorar masculinamente al hombre más varonil del mundo"

(Amor + halagos + All Might)^contacto fisico × confianza × Kirishima = Bakugo enamorado.

Con esa operación que hizo junto a Denki en su habitación estaba seguro de que nada podía salir mal. Tenía confianza incluso si Kaminari no entendió el signo de elevado que Bakugo les había enseñado a base de golpes tan sólo unos días atrás. Eran detalles.

Había estado haciendo todo correctamente, dándole espacio al rubio cuando sentía que era necesario y de vez en cuando se pegaba como chicle.

Bakugo le estaba aceptando.

Bakugo le estaba correspondiendo y podía notarlo perfectamente en cada acción y gesto que tenía hacia su persona.

Empezando con el hecho de que cada vez que se apegaba de sobremanera sus orejas se ponían rojas y sudaba más de lo normal haciendo explosiones que podía soportar.

Si alguna vez Kirishima odió su particularidad en esos momentos era todo muy diferente.

Agradecía a la vida y el destindo el hecho de tener una particularidad que fuera tan compatible con la persona que le gustaba. Porque aguantar a Bakugo no era tarea fácil, sobretodo si no tienes alguna clase de protección de tu lado. Y Kirishima tenía esa protección por todo el cuerpo.

Es por eso que siempre que veía al rubio alejarse de su lado le perseguía para caminar abrazado a su lado. Sabiendo que no había forma alguna de que pudiera dañarlo.

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son las 3:18am, estoy en la playa y odio la playa con toda mi maldita alma, así que si notaron algo mal en el capítulo o algo me avisan y lo arreglo porque mi humor no es el mejor pero no quería dejarlos sin capítulo.
eso, se me cuidan, byebye.