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Emma

Desperté con un gran ardor en mi garganta y un fuerte dolor punzante en la cien, pero ni siquiera tenía la fuerza suficiente para tocarme está. Mi seca garganta pedía agua a gritos no fue hasta un momento que entre mi desorientación y sed vi a un chico muy concentrado en su móvil, al parecer notó mi presencia y se puso pálido su cara mostraba sorpresa y felicidad a la vez, pude ver unas cuantas gotas saladas caer por sus blancas mejillas. Quería preguntartarle que hacía ahí y porque me encontraba en este lugar pero simplemente mi voz no lograba salir.

Cómo pude le pedí un poco de agua y en ese momento pareció salir de su trance, mientras corría a buscar un vaso de agua para mí, me pareció un lindo gesto de su parte además que era un chico demasiado guapo ¿qué hacía aquí? ¿Será enfermero? No lo creo no lleva el uniforme respectivo. Un momento, hospital, uniforme, enfermero... ¿Y mi madre? Donde estaba mamá. El chico se acerco a mí y me tendió el vaso con agua le di las gracias y al fin hablo.

—No sabes cómo te extrañé pequeña.-lo mire como si fuera de otro planeta.

—Yo...no sé quién eres, no te conozco.-fue lo primero que dije, ver su rostro me dio mucha tristeza al parecer mis palabras lo habían lastimado.

—Creo que debería llamar al doctor Frank.-seco una lágrima que se le escapó.—Nos vemos hermosa.-beso mi frente. Por alguna razón sentí una corriente bajar por todo mi cuerpo.

Segundos después de que aquel chico se fue llegó un hombre con su bata, podría tener más o menos la edad de mi madre, me sonrió al verme detrás de el venía otra mujer que al parecer era enfermera. Cuando el doctor llegó hasta mi lugar se veía demasiado sorprendido, al parecer todos al verme reaccionan así ¿tan jodida estuve?

—Hola Emma ¿Cómo te sientes?

—Hola doctor, tengo un dolor punzante en la cabeza y siento que mis párpados pesan.-me sentía cansada y hambrienta.

—Tranquila, ya te vamos a poner medicamentos ¿No tienes hambre?.-es como si hubiera leído mi mente.

—Un poco, toque mi estómago débilmente.

—Elen, cuando termines aquí con Emma tráele algo de comer y avísale a su madre que ya despertó.-hablo con la enfermera para luego mirarme a mí.—Te quedaras el resto del día para hacerte algunos exámenes y mañana temprano te podrás ir a descansar a casa.

—Muchas gracias doctor, está bien no se preocupe, solo quiero saber cómo llegue aquí. No  recuerdo nada, ni al chico que fue por usted.-la verdad no tenía ganas de hablar sentía que en cualquier momento volvería a cerrar mis ojos.

—Tuviste un fuerte accidente junto a tus dos mejores amigas, ellas sufrieron daños leves comparados con los tuyos.-carraspeo un poco se veía incómodo.—Estuviste en coma por 3 meses y al parecer tienes pérdida de memoria también.

Mis ojos se cristalizaron al escuchar esas palabras "estuviste en coma por 3 meses"  como podía ser posible esto, me imagino como se sintió mi madre,mi abuela y los amigos que no recuerdo. Ni siquiera recuerdo a mis "mejores amigas" las lágrimas caían por mis ojos como cataratas, estuve entre la vida y la muerte, una corta y angosta brecha nos separó por un tiempo, me siento agradecida con la vida por brindarme una segunda oportunidad que sin duda no voy a desperdiciar.

El doctor toco mi hombro y dijo que todo estaría bien y salió por la puerta, después de eso no sé en qué momento me dormí nuevamente, tal vez por tanto llorar o por los medicamentos.

.......

—Cariño... Despierta debes comer algo.-susurro una voz a mí lado se me hizo muy familiar.

Enamorada de mi mejor amigo.© [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora