Capítulo 21: No se quedará así II

3 1 0
                                    

     La pelea era después de clases en el callejón solo podían estar presente Daniel, Max, Esteban, los acompañantes de Nicolás, y obviamente él y Natalia.

Natalia estaba segura de todo ya no quería volver a lo de antes, cada golpe, cada lágrima, cada sonrisa creada a base de la imaginación para dejar tranquilos a los demás, que realmente la querían. Lo peor de todo es que no sólo fueron las noches llenas de mantas de lágrimas en sus pequeños ojos recordando todo, si no que cada golpe no había encontrado cura para su dolor psicólogo y sabía perfectamente que no sería capaz de superar cada momento lejano en ese tiempo.
- no preguntes sólo comienza que me quiero ir luego- le responde inmediatamente, ya que realmente eso es lo que más deseaba en esos momentos terminar ya de una vez lo que había comenzado.
- tal vez hoy no llegues a casa...bueno veamos vienes con tus guardianes y yo vengo con ellos-.
Nicolás realizaba maniobras para pegarle en su rostro pero Natalia no lo permitía, cada intento fallido lo colocaba más enfadado y gastaba más energías de las que creía que iba a ocupar hasta que en un momento Nat para en seco, porque divisa una sombra detrás de Nicolás y este aprovecha el momento para dar su mejor golpe y cae al suelo. El golpe no le dolió si no lo que divisó, pocos creerán, pero la silueta de su abuelo estaba ahí, ¿cómo?? ¿Por qué?? No tenía una respuesta, pero de algo estaba segura él la protegería.
Fue en ese entonces cuando Natalia supo que tenía que levantarse inmediatamente para que no fuera más agredida o intentaran agredirla y cuando ya estaba parada se dispuso a dar su mejor golpe en el estómago, ya que no quería dar un "golpe bajo" como dicen algunos.
Se dispuso a mantener una buena postura y observar al chico que la miraba con desagrado, repugnancia y enojo, después de todo era de esperarse nunca tuvieron buena comunicación y fue entonces cuando el chico reaccionó y se abalanzó contra ella y en el intento de esquivarlo no pudo y con el peso y altura que este tenía logro de nuevo tirarla al suelo.

*Natalia*

Estaba en el callejón esperando al chico y así fue como vi una silueta y pude identificar que era por el porte era Nicolás y detrás de él sus queridos amigos.

- ¿lista para comenzar? - le dice Nicolás a Natalia con una sonrisa oscura sin piedad alguna.

Realmente no tiene ni una pizca de cariño y respeto por los demás se supone que son sus amigos, pero bueno que se le puede hacer a un chico tan pesado (piensa Natalia). No son guardianes para tu información, son mis amigos y como familia, y lamento por "ellos" de tener cerca a alguien que no los respeta y no demuestra ninguna amistad real hacia ellos por parte de su querido amigo- los chicos que venían en compañía de Nicolás se miran mutuamente, porque sabían que en gran parte Nat tenía razón.

*Nicolás*

Maldición como la odio ya verá no perderé a algún chico por culpa de esta niñata, porque supuestamente tengo que respetarlos por ser mis "amigos".

___________

Inmediatamente Nicolás toma impulso y la fuerza necesaria para golpear a Natalia, pero exitosamente Nat logra esquivar su golpe y no duda en colocarse en forma para estar lista a cualquier intento que este tenga para golpearla.

*Natalia*

La misma historia como siempre se repite una y otra vez, ¿cómo será posible que no pueda defenderme como tal?? Es molesto y no puedo permitir que vuelva a ocurrir menos aun sabiendo que él está presente.

¡Vamos Nat levántate de una vez y demuestra todo lo que te has preparado! Demuestra que esas manos con sangre en los nudillos de tanto golpear árboles, esas lágrimas de rabia e impotencia y esos malestares que constantemente te pasaban y que según tú para no preocupar a tu madre solo era un simple resfriado o andabas débil por alguna cosa, ¡¡¡ya no más escusas baratas!! aprende de una vez que esto se tiene que acabar deja de ser esa niña que todos conocen por siempre estar marcada.

____________

Gemidos de dolor se oían en el callejón oscuro, sin vida y lleno de recuerdos con ira, temor, llanto, ansiedad. Entre otras cosas de las que te puedas imaginar, si has pasado alguna vez por algo similar; esperando que alguien te ayude o simplemente que de la nada alguna idea loca se te venga en mente para poder salir del suplicio, tan agobiante que te rodea con sus brazos para así nunca dejarte ir. Pero fue entonces cuando Natalia se enfocó realmente en lo que ocurría y opto por hacer todo lo que le enseño Esteban y sus entrenamientos duros para poder salir de todo este problema, ya no eran sus gemidos los que se escuchaban en el callejón, sí no los gemidos de un niño que por fin conocía el dolor que este causaba a los demás con sus golpes y juegos sin sentido que este realizaba solo para ser el chico mas genial del colegio o que todos les tengan miedo por ser uno de los más fuertes. Así fue como Natalia por fin termino la pelea saliendo ella ganadora de esta y liberada del pacto que algunos ya conocen...

Yo y mi Vida; porque la realidad duele y se amaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora