X: Estoy bien

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-Usted lo conocía. ¿Cómo podía hacerle daño así? ¿Cómo pudo lastimar a Jun? -Mingyu sabía lo que quería decir con eso. Porque Jun, de todas las personas, no se merecía eso. Porque Jun, como amigo, nunca sería alguien que se lo mereciera.




2013

Era tarde en la noche cuando Jun escuchó algo en su dormitorio. El resto no se había despertado, los pasos eran demasiado ligeros para que se dieran cuenta, pero Jun había sido entrenado para esas cosas. Abrió los ojos para ver a alguien cerrando silenciosamente la puerta del dormitorio, un rápido recuento de las personas que dormían a su alrededor permitiéndole saber que era Ming Ming quien había dejado el dormitorio.

Sonriendo, Junhui se levantó, evitando a sus compañeros de habitación mientras se levantaba de la litera superior. Claramente, su amigo estaba preparado para algo así, y Jun descubrió que sería muy divertido atraparlo con las manos en la mano.

Cuando llegó a la sala de estar, pudo escuchar a Ming Ming agarrando algunas cosas en la cocina, viendo la luz encendida allí. Jun levantó una ceja, abriéndose paso lo más silenciosamente posible.

- ¿Tomando un bocadillo de medianoche? - Preguntó el mayor con una sonrisa, causando que el otro se congelara en el lugar.

Seguramente Ming Ming ya sabía quién era. No solo por la voz, sino que cuando eran solo ellos dos, siempre hablaban en mandarín. Aunque no tuvo la reacción que esperaba. Pensó que su amigo lo maltrataría o tal vez le arrojara algo por instinto, pero en lugar de eso se quedó callado.

- ¿Qué estás haciendo despierto? - Ming Ming preguntó después de un momento, su voz carente de la diversión que Jun predijo.

-Te vi salir de la habitación-, explicó Jun, con una sonrisa mientras se acercaba. - ¿Cuál es tu excusa? -

Ming Ming suspiró, dándose la vuelta para finalmente enfrentarlo. Solo entonces Jun notó la bolsa de lona en sus brazos. -No se suponía que vieras esto-, admitió el más joven, y la expresión de Jun también tomó un giro serio.

-Ming, ¿qué está pasando? - Preguntó, frunciendo el ceño. Parecía que había estado poniendo comida en la bolsa, aunque ya estaba medio llena. Ciertamente no de comida, ¿qué más?

-No quería que lo supieras-. Ming Ming se echó el pelo hacia atrás, y para entonces Jun comenzó a sentirse frustrado por la falta de respuestas.

- Ming Ming. - Llamó, esperando que el otro cortara el acto.

-Me voy-. Ming Ming soltó, suspirando una vez más mientras observaba la mirada en la cara de jun. -Me voy, Junnie-.

- ¿Qué? - La boca de Jun se quedó boquiabierta, con los ojos muy abiertos. Trató de darle sentido a lo que el otro estaba diciendo, preguntándose si era solo una broma elaborada. -Esto no es divertido, Ming-.

-No se supone que lo sea, Junnie-. De nuevo con el apodo, como para suavizar el golpe, como si fuera a hacer algo mejor.

- ¿Qué quieres decir con que te vas? - Jun dio un paso atrás, sacudiendo la cabeza ligeramente. - ¿A dónde vas? -

-No lo sé. En algún lugar, en ninguna parte, yo ... -El joven se echó el pelo hacia atrás una vez más, mirando a su alrededor. -No puedo quedarme aquí-.

- ¿Qué? ¿De qué estás hablando? Ming Ming ... -Jun se humedeció los labios, cerrando y abriendo los dedos mientras trataba de comprender la situación. Esto no podría estar pasando. ¿Tal vez fue solo una pesadilla? Tal vez todavía estaba en la cama, y ​​Ming Ming todavía estaba durmiendo en la cama debajo de él. -Pensé que eras feliz aquí-.

On the Rough [Traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora