Capítulo 28

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 -Buenos días Cam- habló tranquilamente

-Hola- dije sin casi mirarlo.- Hablemos.

 Dicho esto, comenzamos a caminar derecho hacia una mesa en el parque a unas cuadras de mi casa. El se sentó frente a mi, con sus manos cruzadas al frente sobre la mesada y tragó saliva. No se si era que le incomodaba mi rostro o si le incomodaba en sí el momento, porque al menos a mí, me incomodaba toda la situación en sí. 

 -Hmmm, ¿Por dónde empiezo?

 -Por el principio.- dije seria. Este asintió pensativo y suspiró.

 - Después de la fuerte pelea que tuve con papá comencé a buscar lugar donde irme a vivir, pensando que hacer de mi vida, pero me daba mucho miedo dejarte sola. Y, sé que me odias porque así mismo te dejé, pero lo que vos no sabes, es que luego de ese día, cada tarde/noche papá salía buscarme y al salir del trabajo me daba una paliza con dos amigos de él, tapándose la cabeza con pasamontañas, y me enteré que era él, porque la tercera vez que lo hizo se lo saqué, y vi su rostro, estaba completamente ebrio. -tomó aire y dirigió su mirada hacia un costado- Yo no quería ni me dejaba que me vieses los golpes, porque me obligaba a quedarme callado y no decir nada porque sino te iba a hacer daño a vos, tanto si te decía a vos o alguien mas, o si hacia alguna denuncia, me amenazaba con dañarte y a mamá, pero mama realmente no me importaba, vos eras el tema. El día que me fui, vos no estabas en casa, habías ido al colegio, en ese momento el entró a la habitación buscándome, para decirme que si no me iba, ibas a terminar en el hospital. - Mis ojos se agrandaron rotundamente.- Temía tanto por tu vida, temía que algo te hiciera ese maniático, así que le hice caso, de la peor manera porque lo ultimo que quería era dejarte así, sin siquiera despedirme, pero sabia que era lo mejor, siendo la manera en la que venían saliendo las cosas con el. - Al escucharlo con cuidado, todo comenzaba a cerrarme y empezaba a entenderlo por completo-. Me odié, quise volver muchísimas veces, y las veces que volvía a querer verte, me decían que me fuera. - y lloré-  Días después de tu cumpleaños, pase a verte, y eso hice, te vi, entrabas con cuidado, vigilando tu alrededor. Notaba tu miedo, y sentí tanta culpa, sentí tanto rencor, pero sabia que no podía hacer nada.

Estaba estática, no podía creer lo que habia escuchado, las lagrimas recorrían mi mejilla y yo seguía tratando de comprender sus palabras. Lentamente me levanté.

-Cam por favor, lamento de verdad todo lo que pasó, no te vayas, esta vez quiero hacer las cosas bien y no quiero tenerte lejos.- lo observe detalladamente y vi su rostro súper mojado, lloraba desconsoladamente al igual que yo.- Cam, por favor, sos mi hermanita, te necesito.

Y fue todo lo que necesitaba para aceptar sus disculpas y tirármele encima. Lo abrace como nunca, y lloré, lloré como la mejor, y saben? me sentí completa.

[...]

- Hola Cam, ¿cómo estás?- escuché la voz de Calum en cuánto atendí.

- Hola amor, bien por suerte, ¿y vos?

- Yo bien, ¿dónde estas? ¿Vamos a comer?

Accedí a su oferta y lo esperé en la esquina de donde me encontraba. Fuimos hasta el McDonald's cerca de su casa y comimos charlando de lo que pasó con mi hermano.

- ¿Al final se arreglaron?

- Sí, veremos como se da todo, le pedí que me tenga paciencia, me va a costar retomar una vida ahora con mi hermano.

- Y si, es bastante entendible, ¿él supo entender eso?

- Por suerte si, accedió diciéndome que quiere tenerme cerca de nuevo, así que supongo que si entendió.

.Broken Pieces.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora