Capítulo 2: La morgue

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Narradora:

Rápidamente, trasladaron el cuerpo de aquella mujer, al interior de la morgue, para que fuera examinada por los médicos forenses. El análisis general, podría durar varias horas... Sin embargo, se pudo ver parte del procedimiento, cuando se encontraban preparando su cuerpo. La rubia, el peliturquesa, y el pelimorado se encontraban ahí, observando...

-¿Qué te han dicho, Joy?...- Preguntó, el moreno.

-Pues... No mucho. Pero parece que su muerte, fue una hora antes de que la encontráramos, tal vez más, o tal vez menos... Parece que tardó varios minutos en desangrarse. Además, según la forense, y por lo que se ve, a simple vista, fue herida con un objeto cortopunzante. El asesino debió de haberla matado en el baño, y luego, huyó de la escena del crimen...
Aún falta saber si la víctima opuso resistencia, aunque pueda ser que sí, ya que tenía laceraciones en su piel; Y cuál fue el motivo de su asesinato... ¡Aparte de su identidad, claro está!...- Empezó a aclarar, la rubia.

-Tal vez... ¿Podríamos revisar las cámaras de seguridad?- Sugirió, el peliturquesa.

-¡Claro, podría ser!...- Asintió la chica, llamando a más personal, para que se encargaran de aquello, por mientras.

El pelimorado estaba ajeno a aquella conversación, su vista estaba centrada en el cadáver de aquella mujer... ¡No sabía qué, ni porqué... Pero algo le intrigaba de ella!...
Nunca la había visto antes... ¿O sí?... ¿Pero porqué se le hacía tan familiar?...
¿Porqué su ''Espíritu'' la perseguía?... ¡No lo sabía!... ¡Y tampoco quería quedarse a descubrirlo!...

Uno de los forenses, levantó la manta que cubría su cabeza, dejándola al descubierto...
A pesar de no haber pasado mucho tiempo, su cuerpo se encontraba rígido... ¡Lo cuál era extraño, tanto para los forenses, como para los que no lo eran!. La mujer mantenía los ojos cerrados, con su rostro hacia arriba...
El oji-rubí examinaba sus facciones detalladamente, como queriendo adivinar de quién se trataba...

De pronto, la mujer giró la cabeza, abriendo los ojos, en dirección al pelimorado... Incluso, su boca también se abrió, como intentando decir algo...
¡Sus terroríficos ojos azules, se clavaron en el otro, de una forma espeluznante!...

El pelimorado retrocedió, dando un grito asustado, y golpeando fuertemente su espalda contra la pared, debido a la velocidad con la que lo había hecho...

El peliturquesa, al percatarse de ello, se aproximó a él rápidamente, sujetándolo por los hombros y la espalda...

-¿Bonnie, qué te pasó?, ¿Estás bien?...- Preguntó, observándolo preocupado.

El más bajo volvió a clavar su mirada en el mayor, completamente aterrado...

-¡L-La mujer... M-Muerta... S-Se movió!...- Trató de explicar, sumamente agitado.

-¡¿Qué?!... ¡Bonnie!, ¡¿Qué estás diciendo?!...- El moreno parecía, no comprender.

El menor señaló con su dedo índice, al cadáver...

-¡E-Ella... Giró el cuello, y abrió los ojos... E-Ella me miró, y... T-También abrió la boca... C-Como si quisiera decirme algo!...- Intentó calmar sus nervios, sin éxito.

El peliturquesa observó al chico, y suspiró, desviando su mirada hacia la fallecida... ¡En efecto, había movido la cabeza!...

Sin embargo, nadie más parecía asustado...

El moreno dio otro largo suspiro, regresando su mirada hacia el oji-rubí...

-¡Bonnie... Ella no te está viendo!... ¡Esa reacción se conoce como ''Rigor mortis'', y es perfectamente normal!... ¡No te asustes!- Intentó tranquilizarlo, pero no lo logró.

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