T O G E T H E R

45.Se están gritando.

Por obvias razones, Camila había llegado primero a la casa. Dejó a los dragones en las montañas, y después de haberles agradecido y despedirse de ellos cariñosamente, bajó hasta entrar. Y se encerró en su habitación.

Estaba acostada en la cama, mirando al techo con una enorme sonrisa. Pensando en lo que recién había hecho, de lo cual se sentía muy orgullosa. Pensó en que tal vez se enojarían con ella, pero sabía lo que hacía.

Minutos después escuchó un auto llegar en frente, pestañó sintiendo su corazón comenzar a acelerarse. Oyó voces desde la sala las cuales no pudo entender en su perfección, pero si oyó cuando muchos pasos empezaron a acercarse a la habitación.

Y sin previo aviso la puerta es abierta con algo de brutalidad, ella tragó duro sentándose derecha en la cama, bajo la mirada de los que habían entrado, Richie e Eleven. Sorvió su nariz cuando vió la fija mirada del pelinegro.

-Lo que hiciste...nos llevará a la muerte-habló con neutralidad.

-No lo hará-negó al instante.

-¡SI!-gritó con fuerzas sobresaltándola.

-Yo sé lo que hago-aseguró con calma.

-No mucho-niega Eleven ganándose una mirada sorprendida de la peliblanca, la castaña apretó sus labios-Enojaste al Mind Flayer, y nos es bueno cuando el se enoja-

-Tampoco es bueno cuando yo me enojo-dijo con obviedad-Yo soy más poderosa que el, y el comenzó todo esto-señaló a su alrededor-El se lo buscó-

-Es cierto, pero derrumbar el laboratorio no estaba en el plan-habla Eleven-No lo hablaste con nosotros, lo que hiciste fue egoísta Camila. Dijiste que estábamos juntos, y te fuiste por tu cuenta-reprochó.

-Pero-

-No hay peros-la interrumpió Richie con enojo.

-¡No hay peros, pero tuve mi razones!se excusa ella parándose, retándolo con la mirada-¿Acaso nunca íbamos a utilizar a los dragones en esta guerra?-pregunta con ironía.

-No de esta forma-negó Eleven.

-¿¡Y cómo!?-grita con fingida sorpresa-¿¡Solo estarán para morder a los malditos demodogs!?-escupió.

-Si-

-¡No!-negó al instante, todos afligieron sus gargantas con miedo cuando notaron sus ojos potentemente amarillos-¿Cómo íbamos a llegar al Upside Down si no derribábamos el laboratorio?-cuestiona, y todos se quedan callados haciéndole soltar una divertida carcajada.

-Hallaríamos la manera, una discreta-planteó Richie mirándola.

-No derrumbando edificios-le siguió Eleven.

-¡Al fin, alguien que habla mi idioma!-se burló Richie señalando a la castaña con admiración, como lo había hecho la peliblanca con Wheeler. Camila frunció el ceño.

-Si tan bien se entienden ¿por qué no hallaron una manera de ser "discretos"?-preguntó entrecerrando los ojos.

-Oh, perdón, estaba muy ocupado intentando que Mike Wheeler no se robara a mi novia-respondió Richie con una sarcástica sonrisa, ella entreabrió los labios atónita. Eleven levantó los ojos para mirarlo.

-¿Qué creen que esté pasando?-murmuró Ben desde la sala, donde todos estaban reunidos sin poder escuchar la discusión que había.

-No sé, pero tengo miedo-susurra Beverly con sus cejas curvadas-Camila ha estado bajo demasiada presión...y los celos de Richie no han ayudado en nada, no sé que suceda-admite con preocupación, para luego dirigir sus ojos verdes al pasillo de la casa.