¿Embarazada? / Capítulo 1

19.2K 703 114
                                    



Sakura

La noche nos envolvía mientras Sasuke me acompañaba a mi casa, la cita había sido grandiosa, llegando a mi puerta, lo miré a los ojos y sin ninguna explicación me abrazó,  sus labios se posesionaron de los míos, llevábamos unas cuantas semanas saliendo, yo había escuchado hablar de él, del famoso Sasuke Uchiha, unos de los principales capitanes que contaba el escuadrón Anbu, famoso por ser el mejor en su rango junto a Naruto Uzumaki, ambos discípulos de Kakashi, y claro, no podía dejar de lado a los dos Sannin que contribuyeron a su preparación, sin duda un dúo de temer.

Yo conocía las grandes hazañas de ese par por mi maestra y jefa Lady Tsunade, sí, la otra Sannin.

Sabía cuál era su idea al entrenarnos y al presentarnos, los 3 Sannin deseaban que nosotros, Naruto, Sasuke y yo, formáramos la nueva generación de Sannins, así que bueno, Sasuke y yo modificamos sus planes llegando más allá...

Sasuke me seguía besando a conciencia y sin soltarme, me llevó adentro de mi departamento.

- ¿Dónde está? -preguntó entre beso y beso.

- Es la primera puerta a la izquierda - gemí porque me tomó de mi trasero para dejarme claro que él ya estaba preparado.

Me dejó sobre la cama, sus manos estaban por todos lados y estrujando, yo quería más y al parecer él también, ¡era insaciable!, el juego previo me estaba matando literalmente, ¡matando!, no podía contenerme lo besé sin dejar duda del deseo que me provocaba.

- ¡Sasuke, por favor!

- Lo sé, lo sé, otro poco - Retirando toda la ropa que impedía llegar a explorar mi cuerpo con mayor detalle, su lengua caliente estudiaba mis senos, sin mostrar favoritismo les dedicó su tiempo y admiración a cada uno.

Su labios dejaron por un momento mi pecho para mirarme a los ojos y pedirme permiso ¡Ja!, como si lo necesitara para llegar ahí, y sin apartar su mirada uno de sus largos dedos se hundió en mí pero al no estar satisfecho dejó que otro viajara junto con el primero, lo vi sonreír con mi jadeo constante.

- ¿Te gusta, Sakura?

- Sí, continúa - supliqué.

Sonrío de nuevo para continuar jugando conmigo, sus manos viajaron por mi cuerpo sin dejar de lado algún rincón por explorar, pero la sensación de sus manos no se comparó al sentir su húmeda lengua haciéndome vibran con una emoción inconmensurable.

Después de un rato, lo sentí, sentí como se abría paso en mi interior, profundizando con cada empuje, bajo sus manos para levantar mis caderas y ahondar más y más, haciéndome llegar a la culminación final de nuestro encuentro.

Después de aquella cita las cosas no se enfriaron, nuestros encuentros aumentaron cada vez que podíamos vernos, el tiempo era limitado por nuestras responsabilidades tanto para él como para mí por lo que aprovechábamos cada segundo, cada minuto que podíamos estar juntos.

Sasuke

- ¿Y tú qué opina? No has dicho ni una palabra - Tocando mi nariz con su dedo.

- Soy hombre de pocas palabras - Expresé, mientras ella me miraba esperando una reacción a lo que platicaba, puesto hablaba de cada cosa que pasaba por su mente, las personas tendían a volverme loco en segundos por su incesante parloteo, pero ella no, su voz me embelesaba con cada anécdota que me contaba.

Al inicio de nuestra relación, solíamos salir a cenar, al cine, a caminar, pero esos paseos fueron disminuyendo con el tiempo, para ser sincero la prefería en la cama deleitándome de ella porque si su voz me embriagaba, sus gemidos y jadeos me llevaban al límite.

No sé desde cuando me enamoré de aquella pelirrosa, no sé si cuándo Orochimaru relataba las grandes hazañas de la alumna de Lady Tsunade o si cuando Naruto y su maestro se derretía por ella, muchas veces la vi de lejos imaginándome cosas que podrían calificarse como sucias y pervertidas.

Así que cuando la conocí ya estaba medio enamorado de Sakura y secretamente la idea de la nueva generación de Sannins no era tan descabellada, porque me dio la oportunidad de salir con ella y entrar en ella, si saben a lo que me refiero.

Después de varios días, el Hokage nos dio un descanso de 24 horas.

- ¡Por fin un día libre! - Clamé por lo bajo, lo primero que pensé fue pasar todo el día junto a esa pelirrosa ardiente que me hacía perderme, y por lo que una idea igual de loca cruzó por su mente, miré el reloj, casi estaba a punto de salir del hospital por lo que corrí directo al consultorio donde atendía a sus pacientes.

- ¿Qué me estás secuestrando? - Me preguntó incrédula cuando escuchó mi idea loca.

- Sí - Confirmé con sólo una palabra.

- No, no, mañana tengo consultas y...

La silencié con un beso, dejándola inmóvil entre su escritorio mi cuerpo, su voz en esta ocasión no la quería escuchar, era el momento para sus jadeos y gemidos que siempre entonaba cuando estaba conmigo en la intimidad.

- ¡Sasuke, aquí no!

Se resistió un poco, pero no lo suficiente para sucumbir a mis caricias, yo era feliz, por fin había encontrado a la mujer más fogosa, la tomé de la cintura, la senté en su escritorio dejándome tener un mejor acceso para sumergirme en ella.

Inicié sin perder el tiempo besando su pecho, su cuello, su rostro y mis manos recorrían su espalda, mientras mordía sus labios con ternura, pero ella tampoco perdió el tiempo cuando sentí su mano, sonreí sobre sus labios, la tomé de su cadera y marqué el ritmo al entrar en ella, deliciosa, resbaladiza, tanto que me incitaba a moverme de forma rápida y sin tenerle piedad.

Había sido un excitante encuentro, Sakura me volvía loco y sin duda esto sólo era el principio.

Entre besos y caricias me di cuenta de algo, ¡demonios! - ¡No use protección! - Esperando que dijera algo que me tranquilizará.

- Sasuke - me dijo con su aterciopelada voz, besándome nuevamente lo cual me encendió otra vez - Debo de confesarte algo importante, no sé si sea el momento, pero yo no puedo tener hijos, ¿eso te tranquiliza?

La confidencia fue como un balde de agua fría, porque lejos de hacerme sentirme aliviado, me desarmó ¿Ella no podía tener hijos? Reboto una vez y otra vez en mi mente, un motivo bastante fuerte para alejarme de ella.

- ¿Y cómo lo sabes? - Pregunté, tratando de no hacer notoria mi impaciencia por saberlo todo.

Sakura se volteó y me miró a los ojos - Un accidente, no te molesta, ¿verdad? - Con voz llena de dudas.

Fin capítulo 1 / 27012019

¿Embarazada?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora