Capitulo 4 Caída del cielo

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Nunca pensé que algo así, tan impredecible como ella terminaría apareciendo en mi vida, nunca había creído en el destino y no voy a empezar a hacerlo ahora, pero se que ella a llegado por algo a mi descolocada vida y por alguna extraña razón no quiero que se vaya el día de mañana, quiero tenerla cerca porque a su lado me siento bien con lo que soy.

Y solo dos personas han conseguido eso, ella es una y la otra ya no esta.

_ ¿Sabes Daryl? _su voz hizo que volviera de mis pensamientos sobre ella que me miraba con gran ternura en sus ojos._ Me gusta estar contigo, he tenido mucha suerte de que me encontraras tu, porque no me imagino a alguien mejor.

Yo tan solo me quede callado sin saber que decir mientras sentía como mi corazón latía aceleradamente.

_ Tranquilo, no hace falta que digas nada. _me cautivo con su mirada a la vez que colocaba una de sus manos en mis piernas y yo la sonreí en respuesta._ Ahora que lo pienso no recuerdo como me llamo, tendré que pensar en algún nombre provisional.

Y enseguida se me vino uno a la cabeza.

_ Sky. _lo solté sin pensármelo dos veces._ ¿Qué te parece? ¿Te gusta? _pregunte tímidamente._

_ Si, pero ¿Por qué Sky? _pregunto con una sonriente intriga._

_ Porque Sky significa cielo y tú... _la mire._ Apareciste de la nada en mi camino como si hubieses caído del cielo, y además... _suspire con nostalgia al recordarla._ Así se llamaba la única amiga que tuve, ella desgraciadamente murió y la verdad es que me recuerdas mucho a ella, era alegre y divertida, siempre tenia una sonrisa en la cara, no se como lo conseguía pero cada vez que lo hacia lograba iluminar mi vida.

_ Debías quererla mucho. _me miro y agarro mi mano para ofrecer suaves caricias en ella con sus dedos que consiguieron reconfortarme hasta aliviar un poco mi dolor._

_ La echo mucho de menos, pero por mucho que me duela ella ya no esta. _desvié mi mirada y me levante del sofá donde ambos nos encontrábamos sentados, para alejarme de ella y hacer cualquier otra cosa que no fuera seguir con aquella conversación._

Habían pasado diez años de su muerte, pero todavía el dolor seguía allí.

_ Pensándolo mejor, no debería haberme metido en ese tema, después de todo es tu nombre y tienes que escogerlo a tu gusto hasta que recuerdes el tuyo verdadero. _ella se levanto y se acerco a mi cuando..._

La puerta de entrada se abrió, interrumpiendo nuestra conversación y de ella apareció mi hermano mayor que no parecía a ver tenido suerte aquella noche, pues no traía a ninguna chica bajo su brazo.

_ Daryl ya he vuelto. _mi hermano se quedo callado al ver a la chica a mi lado que no conocía._ ¿Quién es esta preciosidad? _suspire pesadamente mientras veía con desdén como Merle se acercaba a ella con la intención de comenzar con sus tácticas de seducción para llevársela a la cama, pero lo siento querido hermano, ella no es como las demás y no dejare que sea una más de tu lista._

_me acerque a ellos, para colocarme al lado de ella mirando a mi hermano, esperando que captara mi mirada de "ni se te ocurra"._ Ella es...

_ Sky. _me interrumpió presentándose con el nombre de mi vieja amiga y sorprendiéndome gratamente al ver que al final había decidido utilizar ese nombre en memoria de mi amiga._ Solo Sky, tu debes de ser el hermano de Daryl, encantada.

_ Merle Dixon rubita. _se presento con esa sonrisa arrogante en sus labios._ ¿No tienes apellidos? _pregunto confundido, aunque tampoco le importaba demasiado, lo sabia porque conocía a mi hermano y se que si no pregunta es porque no quiere que a la larga los demás pregunten sobre él, pero parece ser que ella le había despertado curiosidad._

_ Bueno es que... _esta vez fui yo quien la interrumpió para ayudarla._

_ No recuerda nada de su vida pasada, la encontré tirada en el camino hacia el bosque y la traje a casa. _mire a mi hermano decidido, para que supiera que lo que diría a continuación iba enserio y no aceptaría ninguna objeción._ Se quedara con nosotros hasta que se recupere y recuerde quien es.

Aunque como bien he dicho antes, lo conocía y sabia que tener a una chica linda como ella viviendo bajo nuestro techo la idea le parecería estupenda.

_ Entonces no hay nada mas que hablar, me parece fantástico que se quede. _y allí lo tienes, lo que yo decía._ ¿Así que porque no vamos a celebrarlo? _dijo pasando un brazo por los hombros de nuestra nueva compañera de piso._

_ Merle. _le advertí._

_ Lo siento. _se escabullo de su agarre y se coloco a mi lado._ Pero no soy muy de fiestas y además estoy cansada, creo que me iré a descansar un poco. _me miro y sonrió tímidamente._ ¿Puedo esto...?

_ Claro, todavía debes tener algo de conmoción por el golpe, ve a mi habitación allí estarás tranquila. _me compadecí de su mirada suplicante por un poco de descanso._ Te despertare a la hora de comer.

_ Gracias. _comenzó a marcharse pero se detuvo una momento para volverme a mirar y sonreírme una ultima vez antes de desaparecer por el pasillo._

[...]

Me tumbe en la cama donde descanse la primer vez y en cuestión de segundos caí en un profundo sueño en el que Daryl Dixon aparecía y sin ser consciente una sonrisa se formo en mis labios cuando lo vi mirarme.

[...]

Cuando nos quedamos solo mi hermano y yo, él enseguida se dirigió a la nevera para coger una lata de cerveza y siguiendo su rutina diaria se sentó en el sofá para encender la televisión y matar de ese modo el tiempo hasta la hora de comer.

_ Entonces dices que la encontraste. _hablo después de pegar un trago a su cerveza._ ¿Y como es que la trajiste aquí?

_ Me recordó a alguien. _Merle ya sabia de quien hablaba, pero no quería sacar aquel tema, después de todo mi hermano nunca se preocupo de escucharme._ Además no podía dejarla allí, hubiera muerto o quien sabe que la hubiera pasado de haber sido encontrada por algún otro, este no es un buen barrio.

_ Eres demasiado bueno hermanito. _sabia que se estaba burlando de mi, pero no me importaba._

_ ¿Tu la hubieras dejado? _me interesaba la respuesta._

_ Si, pero tú habrías vuelto a por ella tras habértelo dicho, esa es la diferencia entre tu y yo Darylina, yo no me preocupo por nadie, solo por mi. _muy en el fondo sentía que mentía y que en verdad se preocupaba por mi, pero no sabia que pensar, era mi hermano, si, pero tampoco es que lo demostrara._ Solo debes pensar y vivir por ti.

_ Esa es una vida muy triste Merle. _dije y me marche hacia la cocina para ver que teníamos para comer o si tenia que salir a cazar, pero escuche los pasos de Merle siguiéndome._

_ ¿Qué quieres decir con eso? _murmuro dejando la lata sobre la encimera de la cocina mientras se apoyaba en ella con sus brazos._

_ Que al final si sigues pensando así, acabaras quedándote solo. _lo mire seriamente._ Y la soledad es peor que la muerte, tu y yo sabemos muy bien eso, después de todo siempre hemos estado solos.

_ ¿Y crees que esa chica cambiara eso? ¿Por eso la trajiste? _no tenia las respuestas de aquellas preguntas, pero..._

_ No lo se Merle, pero estoy dispuesto a descubrirlo.

Sin nada mas que decir, me fui a mi habitación e intentando no hacer mucho ruido para no despertar a Sky, me agache para coger mi ballesta que guardaba bajo la cama, pero al volver a levantarme no pude evitar observarla, realmente era muy bonita; su cabello rubio le caía en cascada sobre su rostro y la almohada, sus pestañas largas y finas lograban hacerla tener una mirada deslumbrante cuando abría los ojos y el azul de ellos había conseguido la completa admiración de mis azules, su piel pálida de muñeca, sus mejillas ligeramente sonrojadas de un color rosado precioso, sus labios eran la perfecta tentación de cualquier hombre y su cuerpo parecía que había sido hecho para ser la obra de arte de algún artista con un increíble talento.

Me quede embobado mirándola, pero volví en si cuando vi como un mechón rebelde de su pelo se deslizaba por su rostro, como acto reflejo se lo volví a colocar en su sitio a la vez que acariciaba su mejilla en el proceso y entonces me di cuenta de que aquella chica, nunca jamás seria una desconocida para mi, se había convertido, no se en que momento, en una parte de mi.

SKYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora