Para amar debes soñar

Bella

Una vez,
Conocí a una persona,
Con su cáscara de nuez,
Muy amable y mona.

Era hermosa,
Algo bajita,
Y muy mimosa,
La cual ahora es mi mocita.

En su cara vi dos diamantes,
Un enorme rubí,
Un corazón de amantes,
En la cual me perdí.

Le gustaba luchar,
Y era amigable.
Esto no va a acabar,
Porque es muy fiable.

En la antigua Marineda,
Allí fui feliz,
Porque encontré a mi moneda,
Más allá de Valladolid.

Era responsable,
Pero aventurera,
Clavándome el sable,
De la mejor manera.

Ella es mi vida,
Ella es mi sol.
Ella es la huída,
Hacia el corazón.

Siempre me anima,
Me cuida y me besa.
Por ello mi anima,
Siente sus besos de fresa.

La deseo,
Y la protejo,
De ese becerro,
Que es un pendejo.

Pronombres, determinantes,
Sustantivos y adjetivos.
De todos los habitantes,
Estos son mis objetivos.

Escapar de la policía,
Con la gorra del agente,
De la noche al día,
Porque se que no me miente.

Ir a una fiesta,
Que sea muy loca,
Dormir una siesta,
Y besar su boca.

Sacar la nota,
Para juntarnos por fin,
Para que no esté rota,
Como el enjaulado delfín.

Lo prometido es deuda,
Le dije una vez.
Ella es mi feuda
Y sacaré su diez.

Así concluye,
Real como la mica,
Está historia que fluye,
A medida que está escrita.