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Recuerdo nuestras charlas, esas a las tres de la mañana mirando el techo al no poder dormir.

Una en específico, ha estado rondando mi cabeza.

¿Recuerdas la charla de almas gemelas?

La recuerdo perfectamente, pues ahí fue nuestra primera vez.

Dijiste que tú eras mi alma gemela, que estábamos destinadas.

Ja, ¿Dónde quedó eso?

Al recordarlo, no puedo evitar reírme con amargura y que las lágrimas se escapen de mis cansados ojos.

Mina, me duele pensar en nuestro final.

No quiero asimilarlo.

Hoy cumplimos seis años, te compré un regalo.

Pero tú ni te acordaste.

Ni te dignaste a llegar a casa.

¿Tanto te importa está relación?

No no.

¿Tanto te importo?

¿Cuánto te importo?

Hice algo mal, Mina.

Rompí nuestros principios.

Yo nunca reviso las cosas de los demás, al igual que no me gusta que revisen mis cosas.

Pero no pude evitarlo Mina, entiéndeme.

Tomé tu celular.

Ví todas esas personas con las cuales te mensajeabas.

Y también que estabas soltera para todos, incluso para tus amigos.

Así que les dijiste que rompimos.

¿De verdad, Mina?

¿Cómo puedes hacer eso?

Desearía poder vengarme, pero no puedo.

No soportaría siquiera pensar que puedo causarte el mínimo daño.

Aunque, dudo que sufras si me voy.

No pude dormir hoy, estuve toda la noche mirando tu celular, que habías olvidado al ir a trabajar, mientras veía como la pantalla se mojaba lentamente por mis lágrimas.

Llegaste a las 8AM, era domingo.

Entraste a la habitación y me viste ahí, las lágrimas seguían cayendo por mis mejillas hacia tu celular.

Logré ver cómo temblaste al entrar.

¿Te asusta que me dé cuenta de lo mierda que eres?

Muy tarde.

"Chaeyoungie..." No quería escucharte. "Tengo una explicación."

"No te preocupes." Mi voz salió fría, nunca salía así. Noté la preocupación en tus ojos, esa preocupación que pensé que era por cómo estaba yo, en realidad era por lo que sucedería contigo. "Yo también estoy soltera."

"¿Qué? Chae, ya hablamos de ésto."

"Juraste tu amor eterno por mí, ¿pero para los demás no existo? Nayeon piensa que terminaste conmigo, tú le dijiste eso." Mi voz comenzó a romperse. Antes mi voz estaba bien, pero las lágrimas no dejaban de caer. "Al menos, ahora es verdad, ahora sí puedes decir qué estás soltera y no sería mentira."

"No entiendo qué dices."

Simplemente me levanté y tomé mi maleta, me alegra haberme ido hace unos días con ellas y no haber desempacado.

"Mañana vendré por mis demás cosas." Susurré.

Te quedaste inmóvil, pero cuando pasé por tu lado tomaste mi muñeca.

"Chaeyoung, tenemos que hablarlo." Tu voz sonaba desesperada.

¿Por qué?

Si estás muy bien con las otras.

¿Por qué estás desesperada cuando me voy?

¿Por qué no me dejas ir?

"Ya hablamos suficiente Mina." Suspiré mientras las lágrimas llegaban a mi boca.

"Chaeyoungie, es un enojo, se te va a pasar pronto." Tomaste mis manos. "No hagas una locura por una simple emoción que se irá en unas horas o días."

"En eso tienes razón, el enojo se va." Ví como sonreíste. "Pero la desilución queda, la traición, la desconfianza."

Volviste a tu cara de desesperación, tomé tu mano y la quité de encima, largandome.

No iría donde Jackson y Mark, ya los había molestado mucho y tú irías hacia ya. Tampoco iría donde Dahyun ni donde Tzuyu, también irías a revisar por ahí.

Sólo había un lugar, al cual a ti ni se te ocurriría ir.

La casa de mis padres.

Ellos te amaban, costó mucho hacer que te amaran, de hecho, 3 años.

¿Cómo les diría ahora que ya no estás en mi vida?

Ya que tú quisiste irte a la fuerza.

Nunca podré quitar esa pregunta de mi cabeza.

¿Por qué, Mina?

¿Por qué te quisiste ir?

¿Por qué estabas conmigo siendo que no me querías?

¿Por qué me decías que me amabas cuando no?

¿Qué pasó, Mina?

¿Qué pasó con la chica que me enamoró?

Do You Still Love me? «MiChaeng»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora