Tania viviendo con...hombres

Chocolate

Le llame a Jason diciéndole que ya estaba lista.

-Dulce-susurro cuando me vio.

-Gracias

-Estas divina-me sonroje-que inocente-se acerco y me dio un dulce beso.

-Vamos, que se nos hará tarde.

Nos subimos al auto, Jason no paraba de mirarme década vez que podía, era un encanto. Llegamos a una gran casa, era más grande que la mía definitivamente.

-No estés nerviosa

-Nunca lo estoy-sonrió burlonamente.

Honestamente si estaba algo nerviosa pero bueno. Jason toco el timbre, le abrió el mayordomo. Enseguida vi a una niñita de unos seis años corriendo para Jason.

-Jason-le grito mientras corría.

El la sostuvo en sus brazos.

-Princesa

*Narra Jason*

Tania estaba parada a un lado de mi viendo la escena que acabamos de hacer Jacky y yo. Ella se separó de mi y me hizo una señal con los ojos indicándome a Tania. Mire a Tania y luego asentí con la cabeza a Jacky.

-¿Estas hecha de dulce?-le pregunto, dulce se sonrojó.

-No linda

-¿Entonces por que Jason te dice dulce?

-Porque es muy dulce igual que tu-le conteste.

-Jason-se escucho una cuarta voz.

-Madre-sonreí falsamente, Tania lo noto-madre ella es Tania, mi novia.

Antes de que Tania hablara mi mamá ya la había visto de pies a cabeza.

-Un gusto señora.

-No me digas señora, dime Rosa.

Wow, sólo sus amigas le dicen Rosa. Creo que es un buen comienzo. Entramos al salón y bueno que Tania se asustó demasiado. Se me había olvidado el hecho de comentarle que éramos una familia numerosa. Aunque sólo tuviera una hermana, Jacky.

-Jason-soltó un suspiro.

-Esta bien, son sólo familia y algunos conocidos, no tienes que conocer a todos.

-Es demasiada gente.

-Y todos te amarán, vamos camina, no podemos ser estatuas, ya sabemos que eres hermosa y que todo el mundo te aprecia cuando te ve, pero tampoco lo tenemos que llevar al extremo de ser estatua-sonrió- vamos.

-Bueno

Sabía que Tania era algo miedosa en el aspecto de hablar pero al parecer estaba muy entretenida con unas primas y primos míos. Estaba una de mis piezas favoritas de música clásica "Bajo el mar" no como la de la sirenita si nada de eso, bueno algo parecido, pero no tanto.

-Señorita, ¿sería tan amable de concederme este baile?-todas mis primas rieron nerviosas.

-Por supuesto.

Tome a dulce de la mano y la lleve a la pista de baile, sería lindo enseñarla a bailar, pero siempre tiene algo escondido como esto, baila muy bien.

-¿Por qué le sonreíste así a tu madre?-pregunto, una larga historia.

-Créeme que no me agrada del todo, ella me hizo pasar una infancia muy difícil.

-Mmm ¿Y tu padre?

-Me dijeron que estaba en un viaje se supone que llegara más tarde.

-Bueno

Seguimos bailando hasta que se acabo la pieza. Lentamente fuimos caminando a el área de bebidas para tomar un poco de champán.