Perteneciente

capítulo3

Disculpas, ... Sacrificios y cumplidos, ... Punto de decisión y (algo demasiado horrible para escribir), ...

"Lo siento." El cambiaformas le dijo a la chica de ojos violeta para ... En realidad, nadie en el T-car podía recordar cuántas veces lo había dicho, incluido él.

"Está bien, Chico Bestia". Raven entonó, sintiéndose molesta con la repetición se disculpa. "Deja de actuar como tímido".

'Waaaa ...' El insultado emoticono comenzó a llorar.

Por el amor de Dios. Cuervo pensó con exasperación. Fue a levantarse la capucha, pero se detuvo cuando sintió que una mano enguantada acariciaba suavemente su cuello. La ira por la intrusión imperdonable floreció dentro de ella, y luego se desvaneció con la misma rapidez. Herir. Dolor. Temor. Enfado. Preocupación. Afecto. Las emociones se apoderaron de ella, pero lo que realmente sobresalió fue el temor de que realmente la lastimara. Y luego estaba la ira, que la hizo tragar. Cólera brillante e intensa que habría hecho enojarse a sí misma orgullosa. ¿Por qué ira? Se preguntó, pero, a pesar de eso, sabía una cosa con seguridad; el niño estaba a punto de romperse y llorar, y eso no podía permitirlo. Él nunca sería capaz de bajar eso si los demás lo vieran.Así que en lugar de apartarlo, ella inclinó su cuello para dejarle ver el pequeño rasguño donde los colmillos de la cobra real apenas la habían rozado.

"Ver." Ni siquiera una marca, le dijo sinceramente. Era demasiado pequeño para llamarlo un rasguño adecuado, y ni siquiera había penetrado en la piel. Para su consternación, el gesto solo lo agitaba más. "Chico bestia." Ella entonó, y tomando su mano la presionó contra su cuello. Menos de dos segundos en un trance curativo solucionó el problema, o eso esperaba ella. "Ver todo se ha ido". Ella le quitó la mano, pero todavía la agarró sin apretar.

' La marca se ha ido, pero no la memoria '. Chico Bestia sollozó silenciosamente. ' No es el conocimiento de lo que casi hice'.

Cuervo se quedó sin aliento, asustado. ¿Acaso usó telepatía? Ella se preguntó, segura de que él lo había hecho. ¿Cuándo aprendió a hacer eso?

"Chico Bestia, detente". Robin ordenó. "Y sabes que a Raven no le gusta que la toquen".

"Lo siento." El niño dijo de nuevo.

"¿A alguien le importa que me haya golpeado un elefante de siete toneladas que se mueve a cincuenta millas por hora?" Preguntó Cyborg. Estaba sentado atrás con Chico Bestia, con el brazo izquierdo ligeramente dañado. No dispuesto a arriesgarse a conducir mientras estaba lesionado, le había dado la tarea a Robin, aunque solo de mala gana. Frunció el ceño cuando su pregunta fue recibida con silencio. "Hrmph". Añadió, volviendo a juguetear con la extremidad dañada.

"Lo siento." El cambiaformas dijo, dirigiendo su disculpa ahora a los dos compañeros que había lastimado.

Raven respiró hondo, aunque ya no sentía rabia; ella simplemente no sabía qué decir.

"Chico Bestia. Detente". Robin ordenó con un suspiro propio. "Lo hice peor cuando era Red-X, ¿recuerdas?" Añadió después de una breve pausa, atenuando la dureza de su tono.

Chico Bestia suspiró de nuevo, mirando hacia abajo.

"¿Cuál fue esa nueva forma que usaste?" Raven preguntó en un tono monótono. "Utilícelo de manera regular, y el resto de nosotros quedará sin trabajo". Ella se miró en el espejo para ver cómo estaba él, esperando que algún elogio lo animara.

"Desafortunadamente por ahora fue cosa de una sola vez". Llegó la morosa respuesta. "Pensé que creo que es algo que podré repetir con más experiencia".