Capítulo 4

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Capítulo 4

Narrador omnisciente 

La tensión se podía cortar con un cuchillo dentro de aquella camioneta y se podía tener la convicción de que todo el mundo estaba incomodo allí pero ninguno de los chicos o Paúl quería abrir la boca por miedo a como pudiera reaccionar la morena sentada en un asiento apartando, ellos pensaban que ella sacaría un cuchillo en cualquier momento y se los clavaría en medio del entrecejo solo por la pura diversión de verlos sufrir y sentir dolor.

Liam pensaba que Kira era demasiado amargada, mal educada y fría, que su personalidad no iba nada con la apariencia que ella daba, pero ¿A quién queríamos engañar? Ella tenía toda la apariencia de una chica mala y eso él no lo podía negar. Se regañó mentalmente por estarla juzgando sin conocerla de cerca, solo había hablado con ella unos minutos, y aunque ella aparentara ser de todo menos dulce, no podía tener ya su veredicto, la conocería y luego confirmaría cuál era su opinión, igualmente, con lo que le había dicho a Paúl no tenía muchos puntos ganados con él.

Zayn la miraba entretenido por la forma en que la chica había actuado frente a ellos, ni siquiera salto al verlos, eso la hacía especial y sumamente agradable para él, quería conocerla, saber el porqué de su actitud tan ácida y rebelde, no podía negar que le gustaba eso, y estaba seguro de que muy en el fondo los demás pensaban de igual forma que él, se haría amigo de ella costara lo que costara pero ahora mismo se dormiría, tenía sueño y él nunca se negaba el placer de descansar un poco.

Paúl se mantenía callado pensando en porque había dejado que ella le hablara de esa forma en frente de los chicos, no debió dejarla, él tenía que ser una figura de autoridad en frente de ellos ¿Cómo podía llegar a serlo si su hija, a la cual nunca había visto, lo enfrentaba sin piedad alguna y lo dejaba en vergüenza frente a todo el mundo? Igualmente, no pudo evitar ver que ella era igual a su madre, tenía esa mirada y ese sarcasmo que solo ella poseía y eso le encantaba, no podía evitar mirarla y ver a su viejo amor, ese que atrapo su corazón en un pasado lejano.

Louis quería hablar con ella, quería preguntarle porque había sido tan cortante en el aeropuerto, porque ella no hablaba, quería saber si a ella le gustaba hacer bromas y en ese caso, quería saber si ella se haría su cómplice, los chicos ya no eran buenos para preparar las bromas, habían madurado demasiado, decían que las bromas eran algo del pasado y que ahora debían de actuar como los adultos que eran, aunque esa mentira ninguno se los creía.

Niall estaba intrigado por ella, por su forma de actuar, por su sarcasmo, por la diversión amarga que había visto en sus ojos en el aeropuerto a la hora de hablar con ella, realmente quería conocerla y más ahora que sabía que era latina, no era un secreto que a Horan le gustaran las latinas, igualmente, eso no era lo que le llamaba la atención, sino que, los ojos de ella lo atraparon de una manera tal que no pudo apartar la mirada de ellos, eran de un gris ceniciento muy claro, casi transparente y parecían ser como dos rendijas que te miraban tristes, porque él lo había visto, en la mirada de ella había tristeza pura, ella la quería ocultar con indiferencia que le funcionaba con todos. Menos con él. 

 Harry se preguntaba si ella era una modelo por el cuerpo que tenía y sí, la había estado mirando desde hace rato ¿Cómo no hacerlo?  ¿Cómo no mirar ese cuerpazo del que ella era dueña totalmente? Esa chica era toda una escultura, ahora entendía porque decían que las latinas eran calientes, ella era caliente y no dudaba de que los demás pensaran lo mismo que él viéndola cruzar las piernas y jugar con su cabello en lo que parecía un gesto de nerviosismo leve, lo averiguaría después ahora estaba muy ocupado viéndola. Se preguntó si sería una morena hueca de esas a las que solo les importa el dinero y tener una tarjeta de crédito llena en su bolsillo para gastar cuanto quisiesen, se preguntó si sería una de esas tantas roba famas, y, en el caso de que lo fuera, quería que intentara algo con él, aunque por las miradas que el irlandés le estaba lanzando a la chica pensando que nadie lo veía estaba comenzando a comprender que Kira solo podría llegar a ser una amiga.

La hija de Paúl Higgins, el guardaespaldas de One Direction (1D)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora