Spiderman: Guerra Simbionte

Prólogo

La noche es oscura y fría como ninguna, una nube cubre la luna; las calles están vacías, la ciudad duerme; pero no en el Instituto de Salud Mental de Ravencroft.

La mayoría de los pacientes dormitaban tranquilamente; los guardias hacían sus rondas con aburrimiento; pero en la celda especialmente diseñada para Cletus Cassady, este está teniendo una reveladora conversación.

- ¡Pues claro que somos igual de poderosos que antes! Lo que pasa es que no tanto como Toxin o Scorn - Respondió Cletus -

- Por supuesto Clete, pero ese es el problema - Susurró una voz dentro de su mente - Si asesinaras a los otros simbiontes y a la rata de Spiderman, serías imparable -

- Tienes razón - Respondió un Cletus pensativo - Luego de asesinarlos a ellos uno por uno, ni los Vengadores, ni los X-Men o los Cuatro Fantásticos no podrán detenerme -

- Empezaremos con mi papi Venom - volvió a susurrar la voz de su simbionte - Después por mis hermanos Scream, Riot y los otros, y por último por mi descendencia -

- No... - Negó Cletus -

- ¿Que pasa Clete? - Le preguntó su simbionte -

- Después de Venom... - Empezó el - ¡Hay que aplastar a la araña!

Una risa espeluznante brotó de el aterrorizando a todos los que estaban en el edificio, pero poco después los gritos de dolor de los que se encontraban dentro sacudió el alma de aquellos que lo oyeron.

A la mañana siguiente...

- Hola de levantarse tigre - dijo una amorosa Mary Jane a un muy cansado Peter Parker -

- Cinco minutos más... - Le respondió Peter entre bostezos - ¿Que hora es? -

- Las doce - Le respondió Mary Jane - ¡Anda levantate!

Quince minutos más tarde, Peter ya se encontraba "desayunando" un plato de cereales con MJ.

- Recuerda que hoy es tu día de descanso - Comentó MJ mientras tragaba cereal - Nada de actos superheroicos, buscar villanos, nada -