The girl of the night Im Nayeon x Mark Tuan

PRINCESA

 Mark- ¿Lista?- preguntó el chico al mismo tiempo que tomaba la mano de Nayeon...  

Ella asintió y Mark estiró su mano para comenzar las compras, la chica comenzó a reír sin ninguna razón, lo cual provocó que él chico sonriera de oreja a oreja, entraron a la primera tienda y la ropa inmediatamente llamó la atención de Nayeon, todo lo que la chica veía alrededor le parecía hermoso y Mark lo notó en un par de segundos, así que le preguntó...

Mark- Nayeon, ¿ves algo que te guste?-.

Nayeon- Sería mejor preguntar, si algo no me gusta, todo aquí es bellísimo-.

Mark- Bien entonces... será mejor que te pruebes algo-.

Nayeon- Pero, ¿por donde debo de empezar?, aquí hay demasiadas cosas-.

Mark- Anda elige algo, estoy seguro de que puedes escoger-.

Nayeon se acerco a mirar las prendas y comenzó a tocarlas suavemente con sus dedos, después de un par de minutos tomó un vestido corto color melón y volteó su mirada hacía el chico.

Nayeon- Creo que me probaré este- le sonrió al chico.

Mark- Muy bien, pasa al probador niña- respondió el chico mientras despeinaba el cabello de ella.

Nayeon pasó sin prisas al probador y en un par de minutos salió con el vestido puesto y descalza, la mirada de Mark se perdió en la chica, sus ojos analizaron cada detalle de la cara y el cuerpo de la joven, aunque solo pasaron unos segundos, él sintió como si hubiera tenido todo el tiempo del mundo para verla y ahí volvió a sentir lo que sintió cuando se conocieron, pero seguía sin saber bien que era esa emoción que lo invadía al estar cerca de ella.

Nayeon- Y bien Mark, ¿qué te parece?- preguntó la chica al momento que le mostraba el vestido a él.

Mark- Dios, te ves hermosa-.

Ambos se vieron entre si hasta que una chica llegó y les preguntó que si se llevarían el vestido, Nayeon no respondió, sin embargo; Mark no dudo en responder un rotundo sí.

Salieron de la tienda y visitaron un par más comprando más prendas de ropa para Nayeon y mientras caminaban por el centro de la plaza, Mark volteó hacia ella...

Mark- Nayeon, ¿te apetece comer algo?-.

Nayeon- Claro que sí, me muero de hambre- respondió risueña.

Tomaron lugar en una mesa y dejaron las compras en una silla al costado de esta, después se pararon y caminaron por los locales de comida para ver que pedirían, se decidieron por una pizza para dos, la ordenaron y volvieron a su mesa a esperar.

Mark miró detenidamente a Nayeon, notó lo hermosa que era, además, se dio cuenta que le encantaba todo de ella, sus dientes frontales que la hacían ver como una coneja, lo delgados y finos que son sus labios y el hermoso color blanco de su piel. La chica se dio cuenta de la mirada de Mark y comenzó a reír, provocando aún más fascinación por parte del chico al ver su naturalidad y su risa tan inocente.

Nayeon- Mark ¿todo bien?- preguntó la chica.

Mark- Sí todo bien- respondió saliendo del trance en el que estaba debido a la belleza de la chica.

Nayeon- Bien- dijo al momento en que sonreía de oreja a oreja sin saber el por que.

La comida que ordenaron llegó y ambos se dispusieron a comer, y al cabo de unos minutos, Nayeon comenzó a alimentar a Mark y a la inversa, ambos reían sin saber el motivo y comían con la esperanza de que ese momento no se terminara. En un poco más de veinte minutos la pizza se terminó y ambos se pararon de la mesa, tomaron sus cosas y volvieron a caminar.

El día entero fue como un sueño para Nayeon, el chico se la pasó comprándole cosas y consintiéndola sin parar, incluso le compró su helado favorito en un local de la tienda, la chica sintió algo dentro de ella, al principio creyó que se enfermaría, pero no, el sentimiento de ella no era de enfermedad, era algo que ya había sentido antes, lo sentía cuando veía a sus padres y cuando abrazaba a sus hermanas, era exactamente la misma sensación en su estómago, pero no sabía por qué la sentía estando al lado de Mark.

Mark- Nayeon, ¿está bien si nos vamos ya?, ha sido un día muy largo y creo que ambos estamos cansados-.

Nayeon- Claro Mark, muchas gracias por este día me sentí como toda una princesa-.

Mark- Nayeon... para mí tu eres una princesa-dijo mientras sus ojos brillaban al ver a la chica.

Nayeon- Mark, ¿porque eres tan lindo conmigo?-.

Ambos caminaron hacía la camioneta y el chico le abrió la puerta a Nayeon para que subiera, después él condujo hasta la casa; al llegar, la cargó y la llevo a su habitación.

Mark- Entonces, ¿ya no te dolió la pierna?- preguntó riéndose el chico...