PROHIBIDO✅

Capítulo LXXIV

Después de un rato el hombre vuelve a hablar...

-Señoria esto podría gustarle -dice mirando el mar-

Me acerco al borde de la embarcación y miro en la misma dirección que el lo hace... Y no puedo creer lo que veo... Simplemente es hermoso... El agua es completamente nítida, sin dificultad alguna puedo observar la vida marina, hay un sin fin de peces de colores, de distintas especies nadando libremente a toda velocidad, logro observar plantas marinas de diversos colores y variedades, formas y detalles... No sé en qué momento me e colocado de rodillas para lograr ver de más cerca las profundidades marinas mi vista logra divisar una figura algo peculiar y ...

-¿Eso es....? ¿Eso es lo que yo creo que es?- pregunto señalando al agua-

-¿El que señorita?- no pienso solo siento como mi mano toca el agua y aún dentro de ella señalo en la dirección de lo que creo es...-

- Si- afirma, es una estrella de mar-

-¿Puedo tocarla?- digo con inocencia-

-Podrias, pero está un par de metros más abajo...- después de eso no escucho nada más... Quizá este bien, quizá este mal pero tomo aire, me lanzo al agua y me interno en las profundidades de esta. El contacto es frío, pero a su vez refrescante. Nado un poco y casi al instante tengo la estrella de mar frente a mis ojos, no puedo evitar sentir miedo de tomarla en mis manos, siento mis pulmones arder y acepto que quizá eh perdido la noción del tiempo, subo rápidamente a la superficie y respiro pronfundo. Siento el agua moverse a mi lado y giro de inmediato.

El pescador está a mi lado en el agua con una amplia sonrisa y un par de lo que parecen tanques de oxígeno.

- Cambio de planes - dice y me extiende un tanque - hoy no iremos a pescar, cambiaremos de ruta por una mas marina si prefiere - dice aún sonriendo y yo asiento con una amplia sonrisa, se coloca la boquilla del tanque y se sumerge, miro a Rodríguez en busca de aprobación y él asiente -

Sigo al pescador que nada hacia las profundidades, trato de no perder de vista ningún detalle, es increíble el paisaje multicolor que se presenta ante mi gracias a la nitidez del agua cristalina y la gran variedad de especies marinas, tanto plantas como animales, es increíble y no salgo de mi asombro ni un solo segundo algo como esto es una experiencia que todo, absolutamente todo ser humano debería vivir, pienso. Pasan los minutos, quizá las horas y no logro salir de mi asombro, casa vez encontramos algo distinto y más asombrosos, incluso especies que creía inexistentes. Luego de lo que para mí fueron minutos salimos del agua para encontrarnos un Rodríguez nada más, ni nada menos que dormido. Su trabajo debe ser por mucho muy agotador, no puedo evitar sentir lástima por él.
Veo el cielo y por la ubicación del sol casi me atrevería a apostar que son las 12 medio día o quizá las 13 pm (1 pm)

Cómo si leyera mi mente comenta el pescador.

- Las 13 horas - dice y sube a la bote- ¿como la a pasado señorita? -

-- Increíble, me a encantado, muchas gracias aunque no quiero pensar que eh interrumpido su trabajo de verdad discúlpeme por eso --

-- No se preocupe señorita, mañana será otra día y ya iré a pescar, solo con ver como sus ojos se iluminaban al estar buseando me es mucho más gratificante -- sonríe ampliamente--

-- Muchas gracias no tengo como pagarselo, nunca había tenido una experiencia asi --

-- Yo se que las señoritas como usted son muy independientes, pero con todo lo que el señor Evans a ayudado a mí pueblo de verdad que no me debe nada, además de que yo también eh disfrutado del paseo -- sonríe-- ahora creo que es un buen momento para volver o el señor Evans estará preocupado --