¡Atrapados! «30 Días de OTP» ||ErrorInk||

Día 4 (Sin editar)

¿Locura?

Era temprano en la madrugada y la casa se encontraba en una profundo quietud. El único sonido que se podía escuchar era el de una respiración suave y nada más.

En la oscuridad de la sala de estar, débiles tonos de azules y rojos se podían ver encima del sofá, junto a un brillante punto color amarillo. Las palabra error destellaba de vez en cuando delatando de manera obvia al ser vivo en el sofá.

Los ojos del esqueleto estaban clavados en la ventana, completamente absorto en sus pensamientos.

El día de ayer, él probablemente había sido drogado o algo. Bromeó, se dejó tocar, sonrió y hizo pequeños berrinches como las desagradables abominaciones que caminan por los universos. Incluso convivió de manera agradable con el payaso de colores. Tan sólo de recordarlo, le dan ganas de destruir un universo o, por lo menos, parcialmente dañarlo.

Sus ojos permanecieron en la ventana, mirando el blanco espacio fuera.

Está confirmado, él probablemente no estaba en sus cabales.

Aunque nunca lo estuvo.

Se giró en el momento en que escuchó el sonido chirriante de la escalera, y allí, vestido como siempre, estaba el protector de las AU's: Ink.

Error lo miró durante un rato, viéndolo bostezar, luego se giró otra vez y volvió a mirar por la ventana. Intentando no asesinar a su enemigo.

Ink no lo ignoró, sino que lo miró con curiosidad mientras bajaba las escaleras y caminaba hacia la cocina a buscar algo para comer. Cuando Ink desapareció de su vista, Error soltó un suspiro mientras se recostaba en el sofá. Se podían ver las palabras error agitadas a su alrededor, parecía a punto de un reinicio.

Puede tener todas las ganas de matar al pequeño payaso de colores, pero las palabras de hace cuatro días siguen frescas en su mente. Las intenciones deciden. Si asesina a la tinta el mundo se convertirá en una línea genocida, y el morirá porque no puede defenderse. Entonces quien sabe lo que pasará después pero no quiere averiguarlo, aunque ya le hayan dado la respuesta. Lo pasó realmente mal el primer día que vino a éste lugar, esa impotencia, no la quiere repetir.

Sus ojos se posaron en la puerta, y, como si lo hubiera sentido, Ink pasó por ella. Con dos tazas de café humeantes en sus manos. Al llegar frente a si, Ink le ofreció una de las tazas, él la aceptó sin decir nada.

Una pequeña sonrisa apareció en la cara de la tinta, y él fingió no notarla y empezó a beber de la taza.

Un poco demasiado dulce.

Pero no peleó, e ignoró al esqueleto que se sentó en el sofá frente a él. Sus ojos posados en la taza que estaba bebiendo. Su mente concentrada en el sonido del tik tak del reloj...

.....

....

...

..

.

¿Cuándo fue que apareció un reloj?

Error miró con los ojos casi saliendo de sus cuencas el reloj que de alguna manera había aparecido en la pared frente a él, y detrás de Ink.

Tenía un mal presentimiento.

Mirando hacia la cara de Ink, se encontró con los ojos irregulares. Un poco de pánico destellaba en ellos.

No preguntes como lo sabía, él no lo sabe.

¿̨̙̬̅ͯ͂ͬͫ́̇͘͜͟҉̶͟P̴̛̤̕͟u̢̲̣̤̬̿ͤ͌ͬ̽̍ͭ̕͢e̢̹̲͎̬͙̟̞͆ͯ҉̷̢́̀͟d̯̗̳̳̘͉̞ͫͫ̌̽͒̉̕͞ȩ̍͟͠ṣ̲̮̲ͤ̅͏̸̨͢͠͞ ̸̢̧̡̣̠̣͕̼ͤ͋ͥ̈ͯ̈̆́̀̕e̜͓̞͒͒ͭͅͅ҉͘s͛̓ͥ͌̾̀͘͘͟͜͝͝c͏̀͜ụ̵̻̞̫͒̿̋̆́̃ͫ͡҉̸́͜ć̸̛̟h̨̳̍̇ͥͥ̆̔̐͘͜ả̶̲̖̯̠͋ͯ̕r̸̡͏m̷̖̩̠͔̫̕e͜?̴̴̨̜͚̮͔̜̺͎̄ͨ͂̇̓̾͂̀̀͡ ̞̲̖͖͙̺͢