1- Viajando al pasado

4 0 0
                                    

Cuando los primeros rayos de luz se asoman por el horizonte, crean uno de los espectáculos naturales más hermosos que el ser humano puede apreciar.

Simple y hermoso acontecimiento natural, mi último deseo es ver ese espectáculo, siempre pensé que tendría ideas más profundas con respecto al tema de la muerte, supongo que al final mi amor por las cosas simples vence la idea de grandeza que cosechaba tiempo atrás.

Tengo un pensamiento que toma control sobre mi, una pequeña espina de duda clavada en lo profundo de mi subconsciente, salgo a la terraza para pensar y despejar las ideas que tanto abundan en mi cabeza.

No sé cómo es posible pero, el cielo estrellado luce cada día más hermoso que el anterior, la luz de Luna baña mi cuerpo haciéndolo erizar de pies a cabeza.

Tomo asiento, posando mis pies sobre la pequeña mesa que reposa al centro de la isla, se que no es la solución pero ocupo pensar y acceder a mis memorias más recónditas, abro la pequeña caja que permanece oculta bajo el sillón, extrayendo de su interior un bulto de hierba y una enorme pipa.

Uno..
Dos..
Tres..
...
Doce..
Mi cuerpo se relaja mientras el humo evacúa mis pulmones, mi realidad da vueltas mientras que mi imaginación se echa a volar.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Abril 2000

-Vamos, juguemos algo divertido- ella
toma de mi mano y me arrastra al baño.

-¿A qué podemos jugar en el baño?-
Emma, se hinca frente a mi.

-Juguemos a las esposas, ¿Quieres ser
mi esposa y casarte conmigo?- saca un
anillo de princesa y lo pone en mi dedo.

-¿Ahora que, esposa mía?- ese juego
me gustaba, pero no sabía a lo que llegaría. 

-Ahora viene la luna de miel- de un solo movimiento quitó sus shorts y junto a ellos sus Panties, no entendía del todo este juego
-Te toca a ti, esposa-.

-¿También debo quitarme mi pantie?- Asiente, lentamente y con vergüenza quito mi pantalón trayendo con el mi ropa interior.

(...)

Ella está sobre mi, besándome, tengo muchas sensaciones al respecto, toca mi cuerpo de una manera rara y descontrolada, siento como toca abajo, mi mami me dijo que a una niña no la debían de tocar ahí, ya no me agrada este juego.

La puerta se abre de portazo, dejando ver a mi madre de tras, su mirada es de rabia y sorpresa,
Pero en tan solo un segundo se consume la sorpresa, dejando paso solo a la rabia.

Un golpe, otro golpe, no entendía porque, pero mamá me estaba castigando, solo estábamos jugando, ¿Por qué me golpeaba a mi?...

Todo se torna obscuro, siento que caigo en una pesadilla, no logro ver nada, solo logro escuchar una voz resonando en cada rincón de mi cabeza.

-Son solo niñas, Amber, tienen 5 años- reconocería esa voz donde fuera, la voz más hermosa del mundo, la de mi padre.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

La obscuridad desaparece en su totalidad, vuelvo a tener este hermoso cielo frente a mi, observó detenidamente el reloj, percatándome que apenas han pasado un par de minutos.

Observó la pipa, y fumo de ella una y otra vez, hasta que esta se extingue ante mis ojos, los cuales se tornan pesados, volviendo mi garganta árida.

Me encamino al interior del departamento, mi refrigerador está cargado de alcohol, su interior no conoce la comida, jamás se ha utilizado para guardar alimento, no sé qué pensar de ello, prefiero no hacerlo.

Tomo la botella de Ron junto a un cartón de cerveza, vuelvo a la terraza, sentándome y dejando todo sobre la mesa, relleno la pipa pensando en si lo que hago es correcto, pero de momento una pregunta me invade ¿Acaso importa?

La colocó entre mis labios, sintiendo como el humo se adentra en mi, pasando por cada pequeña parte de mi ser, llegando poco a poco a mis pulmones, logro mantenerlo y al final siento la liberación, como mis células van siendo alcanzadas por la cannabis.

Abro una cerveza y me concentro en beber el dulce néctar que ésta contiene en su interior, su sabor abrazador que refresca mi garganta y manda a volar mis papilas gustativas, mi cuerpo comienza a relajarse y mi mente a imaginar, a recordar...a viajar.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Agosto 2001

Ocho horas.
Cuatrocientos ochenta minutos.
Veintiocho mil ochocientos segundos.
Y yo sigo preguntándome lo mismo...

¿¡Qué cojones le hice a la vida para tener que asistir a clases!? Soy una hija responsable, mi conducta es impecable, no respondo ni hablo fuera de lugar, tengo el conocimiento suficiente para saber que el valor de pi es 13.1416 y me quieren enseñar multiplicaciones básicas...

No hay razón existente para respaldar el que yo deba estar aquí, doy una vista a mi alrededor percatándome de la diferencia que existe entre el resto de los niños y yo. Dicen que el conocimiento es poder, y a la larga el poder cambia a los individuos, ¿Algún día tendré el poder suficiente para cambiar ó tendré el necesario para cambiar al mundo?

Al final del día, solo vuelvo a casa sabiendo lo mismo que sabía al irme, no encajo en mi generación, pero me gusta estar aquí, al final, tal ves no sea tan inteligente como pensaba, como esperaba.

Aún así el crédito no me corresponde del todo, poseo este conocimiento por mis padres, no porque me lo inculcaran,  para ser sincera si esas hubieran sido sus intenciones yo no estaría aquí hoy, sería una niña más, sabiendo solo lo necesario, ignorando por completo los misterios de la vida.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Es gracioso, sin importar cuánto tiempo haya pasado la realidad es la misma... simplemente no encajo en ningún lugar.

Por más insignificante que llegue a parecer, hay algo que no encaja, poseo una maldición, abrí los ojos y ahora todo es tan claro, no fui echa para esto, para el sufrimiento sin razón, la agonía que produce la vida, el odio y el rencor que habita en tantos corazones, segando a las personas, llevándolas a cometer acciones sin perdón.

Todos lo pasan por alto, más yo nunca he podido hacerlo, esta maldición es algo de lo que solamente yo tengo conocimiento, mi maldición... mi carga.

¿Entonces?....Esto es la vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora