YO SOY ALEX "Y esta es mi Carta"

Capítulo II "El sobre de los Dioses"

Lunes, ¿quien no odia los lunes?.

El tráfico parece rabioso, la gente va con pocas ganas al trabajo y nosotros, los alumnos, sólo nos importa muy poco lo que hagamos en clase hoy.

Dejenme hablarles de mi escuela, la querida escuela que me acogió luego de mi mudanza.
La escuela con gente maravillosa, servicial, humilde y cuidadosa que me acompaña a emprender gran parte de mi vida y juventud para guardar lindos recuerdos que añoraré el resto de mi fucking live.

Quien no haya notado el sarcasmo, debería iniciar de inmediato una sesión conmigo.

De todas maneras dejame resumirte que es la "escuela" a partir de la secundaria y sus años restantes.
Inicia tu giro argumental con 12 o 13 años, intentas ser optimista y esperas vivir tu juventud al máximo.
Te das cuenta que algunos "amigos" ya no tienen el patrón de personalidad que solían tener.
Tratas con mucho esfuerzo ser "normal" o cualquiera que fuese su concepto.
Te importa más lo que las personas piensen de vos, y temes ser juzgado.
Sigues adelante, llega la hora del receso, al fin, un buen tiempo para jugar, liberarte de las presiones e interactuar con tus semejantes.
Te das cuenta del vórtice de status en el que estas metido, el grupismo es notorio, el drama está aumentado al triple y es pareja a cualquier cosa "irrelevante" o no que pueda pasar en ese escenario del cual ahora eres parte.
Te sientes observado/a o varias veces ignorado/a.
Pero sobre todo entre tanta gente comenzas a experimentar la "soledad", cuya compañia te acompañará y seguirá gran parte de tu vida.

Y ya está, todos son falsos, todos son mierdas y terminas en un horrible circulo vicioso de "optimismo", "amistad", "no amistad", "triste" y "solo".
Te das cuenta que las personas realmente son superficiales, y eso hiere.

Para mi consuelo y supervivencia, tengo la opcion de quedarme en la sala de clases, el mejor lugar del mundo, cuando está vacío.
Puedes dormir, escuchar música, leer o incluso, hacer nada.

Nadie te verá, nadie te juzgará, a nadie le importará y sobre todo, disfrutarás de tu soledad.
Bueno, recuerden que "estar solo" y "sentirse solo" son cosas completamente distintas.

Y eso es lo que puedes hacer si no te interrumpe el molesto sonar de un monton de llaves, que anuncia la inminente llegada del encargado de disciplina.

-Es el receso hora de salir.- dice abarcando la voz por toda la sala acompañado de repetidos golpes de la llave contra la puerta-.

-Estoy leyendo un libro, por favor.

-¿Un libro electrónico desde tu teléfono?-pregunta no convencido-.

-¿Conoces Wattpad? Es una aplicación donde la gente también puede leer libros.-respondí fingiendo una sonrisa, ya sabia lo que iba a responder-.

-En mis tiempos los niños éramos más sociales, no existían estas cosas de la tecnología ni la depresión, además se dice que ahora los illuminatis te controlan desde esos aparatos, gracias a dios yo si pude disfrutar de mi adolescencia.-añade orgullosamente, aunque no escuché la mitad de lo que dijo, creo que sonaba algo como Bla Bla Bla, y odio la tecnología, Bla Bla Bla, y tengo tanta razón o algo así, igual preparo mis cosas para salir del aula, el nunca se rinde y ya escuché suficiente de sus conspiraciones...

-Ok Boomer.-respondo saliendo-.

-Ah ah ah.-dice parándome- El celular, sabes que están prohibidos.-extiende la palma de su mano lo cual le doy obligada mi aparato móvil.

Y  finalmente al salir, desde lejos lo oigo preguntarse "¿Qué es un Boomer?" Cielos, eso lo hace más Boomer.

Sé como lidiar con este tipo de situaciones, meses de experiencia y sabiduría que me ayudaron a saber que quedarme dentro del baño antes de bajar las escaleras distrae al encargado para volver a mi aula de nuevo.