𝟏 𝐜𝐫𝐨𝐢𝐬𝐬𝐚𝐧𝐭 𝐞𝐭 𝟓 𝐣𝐮𝐬 𝐝'𝐨𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞

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𝟕/𝟎𝟏/𝟐𝟎𝟏𝟗: 𝐁𝐚𝐬𝐭𝐢𝐥𝐥𝐞
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𝟏 𝐨𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞 𝐣𝐮𝐢𝐜𝐞: 𝟏'𝟎𝟎
𝟏 𝐜𝐫𝐨𝐢𝐬𝐬𝐚𝐧𝐭:𝟏'𝟎𝟎
𝟏 𝐜𝐮𝐩 𝐨𝐟 𝐜𝐨𝐟𝐟𝐞𝐞; 𝟏'𝟐𝟎
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𝐓𝐎𝐓𝐀𝐋: 𝟑'𝟐𝟎
*𝐏𝐚𝐫𝐭 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝐦𝐞𝐧𝐮, 𝐚𝐥𝐫𝐞𝐚𝐝𝐲 𝐩𝐚𝐢𝐝.*

Aquel chico estaba loco.

¿Cómo un ser humano era capaz de llevar 5 paquetes de zumo consigo?

Las personas normalmente no tomaban ni uno. Para ser las 7 de la mañana el chico y sus amigos estaban demasiado despiertos.

No quería ser un acosador pero su vista siempre iba dirigida hacia él. ¡Aquel chico de ojos gatunos era como un imán! Su sonrisa iluminaba al completo aquella nublada mañana en París. Deseaba saber tantas cosas de él...

¿Que hacía en esta gran ciudad? Seguramente estaba de turismo porque él se veía muy sonriente y despreocupado, o a lo mejor él era así de por sí. Quería saber la razón por la que el de pelo azabache tenía tantos zumos de naranja. Había visto que sus amigos cuando se sentaban con él se lo daban incluso antes de compartir alguna palabra. ¿Acaso él era un fanático del zumo de naranja?

Me quedé mirando el mío. Sinceramente no tenía muy buen sabor, estaba algo ácido y para nada se podía comparar con uno natural. Aún así era lo que incluía el menú del desayuno y dejarlo a medias le daba vergüenza. Ojalá poder acercarse a aquel chico para darle el zumo que no quería.

Y de tanto pensar en aquel chico nuestras miradas se conectaron. Oficialmente él se pensaría que soy un acosador. Bajó su rostro sonrojado y cuando volvió a levantarlo se rió con fuerza.

Mi rostro debía de ser un poema, estaba tan confundido. ¿Que le había hecho gracia a aquel chico?

De repente comenzó a lanzarme besos y guiños. Gestos que decían “te quiero”, me sentía tan confuso y avergonzado... Tenía que admitir que aquel chico me había parecido atractivo y comenzaba a tener un pequeño enamoramiento con su sonrisa, pero no esperaba que aquel chico fuera tan extrovertido como para que al darse cuenta de la excesiva atención que yo le estaba dando fuera capaz de responder ante aquello así.

Al final se levantó y se encaminó hacia mi mesa, estaba muy nervioso. Aunque también me emocionaba la actitud de aquel chico. Al verlo de pie pude apreciar lo alto que era, seguramente era unos centímetros más bajo que yo. Aquel chico era todo piernas. Piernas que se arrodillaron al lado de mi mesa.

Todo este tiempo había sido un tonto. Aquel chico estaba haciendo gestos al chico al lado mía, debía de ser su amigo.

—¿Dormiste bien Jae? Ayer estuviste sopa desde las 2 de la mañana. Fuiste súper aburrido...— La voz de aquel chico era dulce y hipnotizante. Este acariciaba la mano de su amigo con dulzura. ¡Aquel chico era un ángel!

—Dodo, sabes que estoy guardando energías para el jueves. A parte Taeyong se largó de la habitación y sinceramente solo me apetecía pasar la noche con él.— El chico de hoyuelos parecía tener un enorme enamoramiento respecto a aquel Taeyong. El puchero que se había formado delataba su desilusión respecto a que el chico se hubiera marchado.

—Tranquilo, aún nos quedan muchos días en París. La ciudad del amor estará a tu disposición...— Dijo el de pelo azabache con un guiño. Tras ello le cogió el zumo al chico sentado a su amigo y con 6 zumos en los brazos fue a las escaleras de las habitaciones.

¿Cómo iba a beber 6 zumos?

El chico que estaba sentado al lado mía se rió en voz baja.

—Te gusta mi amigo, al menos si le vas a comer con la mirada se más discreto...— Dijo el chico de hoyuelos con una gran sonrisa.

—Lo siento mucho, es que me pareció un chico muy peculiar. Perdón por ser tan indiscreto, me quedé fascinado por él.— No me quedaba otra que admitir mi crimen.

—No te preocupes, la gente no suele apreciar a Doyoung y me alegro de que tú sí. Mi nombre es Jaehyun.— Dijo el castaño tendiéndole la mano.

—Yo soy John, llámame Johnny.— El teléfono de Jaehyun sonó, tenía que irse o no llegaría a tiempo, o eso había oído en secreto...

—Hoy iremos a D'Orsay, a Doyoung le encanta Monet y Rembrandt. Si quieres conocerle el mejor sitio es allí.
Mucha suerte enamorado...—

No solo era guapo sino que también tenía buen gusto. Estaba cayendo poco a poco por aquel chico y aún no había compartido ni una sola palabra.



Buenas noches, tardes o mañanas! Debería estar estudiando pero no me servirá para nada así que vuelvo a actualizar con mi Enero en París. Los capítulos van a ser muy cortitos como este, e intentaré subir uno por día a no ser que me dé un lapso de creatividad.
¡Cuidaros mucho! Os quiero.

𝐌𝐞𝐫𝐜𝐢 𝐛𝐞𝐚𝐮𝐜𝐨𝐮𝐩, 𝐏𝐚𝐫𝐢𝐬;  𝐉𝐨𝐡𝐧𝐝𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora