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Era una noche de invierno, estaba en el Bosque Prohibido. ¿ Por qué estaba allí? No lo sé. Simplemente, estaba allí. Me había atraído el llanto de un joven. Lo que no esperaba es que fuera él... Draco Malfoy. Al principio me quedé expectante, intentando pasar desapercibido. El llanto se hizo más fuerte. No...no sabía que hacer, ¿iba a fingir no haber visto nada o iba a acercarme a él? Pero...¿y si al acercarme me atacaba...? O peor, ¿y si me preguntaba que hacía allí?
Estaba tan absorto en mis pensamientos que no me di cuenta de que él ya me había visto.
Rápidamente, el rubio se secó las lágrimas e intentó imitar su mueca burlona de siempre. Su cara de superioridad en contraste con los restos de lágrimas era ridículamente cómica. Era la primera vez que veía a Draco tan vulnerable. Aún así, me pareció terriblemente sexi.
-¿ Qué haces aquí, Potter?- Su tono pronto volvió a ser indiferente.
Se llevó la mano rápidamente a la cinturilla del vaquero y sacó su varita en un movimiento ágil.
Se colocó en guardia, con la varita apuntando a mi cabeza. Levanté las manos en son de paz.
-¿ Por qué llorabas?- Pregunté curioso.
Por un instante creí ver sorpresa en sus ojos grises, pero pronto se apagó y se volvió enfado.
-Y a ti que te importa!- Cerraba el puño libre con ira - ¿No te enseñó tu madre a meterte donde no te llaman?- Ahora se reía con burla.
Entonces era yo el que hervía de furia.
-¡¿Como te atreves?!- grité mientras le hundía el puño en las costillas. Había querido crear impacto, pero no tanto. El Slytherin se retorcía de dolor en el suelo. Me quedé en shock sin saber que hacer. Miré mi puño atónito, tampoco había empleado tanta fuerza ¿no?
-¿Draco...?- pregunté, dudoso, tendiéndole la mano. Ni siquiera me fijé en qué le había llamado por su nombre de pila.
A duras penas se levantó y se sentó en una piedra, dándome la espalda. Me acerqué.
-Harry, por lo que más quieras, vete de una puta vez. O te juro que te mataré.
Sorprendido por su vocabulario muggles y asustado de su amenaza, volví al castillo sin mirar atrás.

Malfoy...¡TE ODIO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora