Capítulo 2

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Jimin no entendía a lo que ese niño se refería ¿Qué quería decir con ser una princesa?, el ni siquiera era lo suficientemente bonito para ser una, por lo que a la conclusión que llegó es que ese niño estaba burlándose de el, el nunca había tenido amiguitos de su edad y pensar que el primero se estaba riendo de su aspecto le hizo sentir muy triste por lo que solamente  respondió con una mueca y se fue dónde estaba su abuelita a abrazarla para que así ese niño no continuase molestando.

Por otro lado el pequeño Jungkook estaba confundido, si, muy confundido al ver como su princesa o mejor dicho príncipe  elegido había huido de el a los brazos de su abuela, eso no tenía que ser así, Jimin tendría que haberlo visto con sus ojos brillantes y darle su besito de amor pero nada de eso estaba pasando por lo que se quedo en shock unos momentos antes de ir tras su príncipe.

-¡Jimin- Jungkook se dirigió tras el

-Jungkook, ¿qué  estás haciendo con el pobre Jimin?, vino apurado a abrazar a la señora Park, ¿te estás comportando mal cielo?- habló su mamá

Jungkook miraba muy confundido la escena y luego agachó su cabecita un poco

-S-solo quería que Jimin viniera a mi fiesta mami- su vocecita tenia algo de arrepentimiento por haber  a sustado a alguien tan lindo como lo era el pequeño rubio aferrado a su abuela

La mamá de Jungkook miró muy enternecida la situación y se dirigió a Jimin

-¿Cariño?- dijo con voz suave mientras la señora Park acariciaba la cabecita de este -Jungkookie va a disculparse contigo, el no volverá  a asustarte ¿si?-

Dicho esto Jimin se giró poco a poco con algo de inseguridad pues si bien el creía que causar más molestas por su vergüenza era muy inapropiado y eso podía afectarle a su abuelita por eso decidió voltearse completamente para ver a la señora Jeon

-Y-yo no quería causar molestias- bajó su mirada nerviosa y sus mejillas se tiñeron de un color rosado suave, estaba algo asustado por que nunca había pasado algo similar

Mientras Jimin era un manojo de nervios, Jungkook estaba completamente convencido que quería a Jimin en su fiesta, su corazoncito estaba por salirse o eso era lo que el creía, no sabía como podía existir alguien tan bonito como lo era el rubio, si bien el tenia muchos amigos, hijos de los amigos de sus padres y hasta extranjeros por que si, Jungkook sabia hasta tres idiomas diferentes, aún siendo un niño su educación era una de las mejores y era muy inteligente quien le gustaba hacer sentir orgullosa a su famila, pero en ese momento no sabia ni como hablar, estaba demasiado concentrado en las pestañas de Jimin y sus cachetitos rosados, si no fuera por que estaba de pie cualquiera creía que estaba en estado vegetal, aunque si Jimin seguía siendo tan lindo el sabía que no faltaba mucho para eso

 -Jimin, perdóname si te asusté, no quería hacerte sentir mal, yo quería invitarte a mi fiesta, ¿vendrás? Dime que si porfavor- Jungkook caminaba lentamente y algo esperanzado en dirección al rubio quien estaba observándolo con un claro nerviosismo

-y-yo- pero t-tu no me conoces, m-mi abuelita dice que no acepte cosas de desconocidos- Jimin se aferro a la blusa de su abuelita mientras intentaba alejarse de alguna manera, no de Jungkook, si no de esos extraños sentimientos que tenia cerca de el

Jungkook sabía que eso pasaba por que Jimin era alguien tímido y eso hacía que se interesara más en el, la mayoría de sus amigos eran muy confiados, niños con dinero que sólo pedían algo y lo tenían, en cambio Jimin era todo lo contrario, si bien el era un niño, estaba muy consiente que la abuela de el no era alguien que tenia dinero como sus papas, sabia que el rubio no tenia contacto con gente como ellos a menudo, pero eso era lo de menos, el quería jugar con Jimin a las escondidas, quería llevarlo a comer helado y pasear por su patio de juegos, quería compartir todos sus juguetes con el y que disfrutara de lo que el hacía, por lo que necesitaba ayuda de su más grande compinche, su mamá.

Mientras la señora Jeon compartía miradas cómplice con la señora Park de lo lindos que eran sus niños esta notó la duda en los ojos de su hijo, sabia lo que debía hacer ya que  aunque ella no ayudara a Jungkook el igual lo haría, siempre había tenido esa actitud y no había mucho por decir

-Señora Park, creo que Jimin es un niño muy inteligente y educado, ¿No le gustaría que nos visitara algunas veces cuando usted nos muestre los avances del traje de Jungkookie?, parece que a mi hijo le agrada Jimin y podrían ser buenos amiguitos- dijo la señora Jeon en modo de sugerencia

-¡Oh! Pero que cosas dice señora Jeon, claro que Jimin puede venir siempre y cuando usted lo permita, el caso está en que a mi Jimin le parezca- comentó y bajo su mirada a su nieto

Jimin estaba que se desmayaba, nadie había pedido ser su amigo y mucho menos invitarlo a una fiesta, ¿por qué ese niño quería ser su amigo? El no entendía muy bien, de todas maneras el no era alguien que rechazara a las personas pero tampoco se había sentido así de raro con alguien, con un niño que apenaz conoce, no sabía que responder, estaba perdido.

¿QUÉ ME PASA? no había actualizado esta historia hace meses, soy muy irresponsable 😪 perdón.











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