Capítulo: 10 LA FIESTA DEL NIÑO Y LA PROPUESTA DE LA YAJAIRA

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Encerrada en la casa de Carmelita ya no podía estar mas así quería salir estar un momento despejada de los problemas y relajarme pero ¿A qué fiesta podría ir? si tan solo estaba aquí en un barrio sin que nadie reconociera quien era yo, nadie me daba regalos o me pedía autógrafos pero nada de lo hiciera en este barrio me ayudaría a salir sino recuperaba mi maleta.

— ¡Karda hay una fiesta en la calle del hambre! El niño quiere que vayas—Me dijo Yajaira.

— ¿WHAT? De él lo único que quiero es mi maleta está más que dicho— Respondí asqueada.

— ¡Sabes tengo algo que decirte!, claro todo depende de ti — Yajaira respondió en modo de secreto.

— Está bien habla de una vez, no quiero tanto drama ya pareces mi mamá—Le dije fastidiada.

— El quiere una noche contigo a cambio de la maleta—Me dijo Yajaira preocupada.

— ¡Ese imbécil!, supuse que no haría nada de gratis y pediría algo pero hasta entonces no imagine eso, porque no sucederá—Afirme.

— Es la única oportunidad que tienes de recuperarla y poder marcharte de aquí —Dijo Yajaira preocupada. Lo pensé mucho y no quería acostarme con un naco de barrio seria lo último que haría en mi vida, era p*rra pero no regalada.

— ¡No lo voy hacer! —Estaba segura de lo que decía.

— ¿Entonces le digo eso? —Me preguntó.

— ¿Qué exactamente el quiere de mi? —Le pregunté pensativa.

— Cogerte que mas—Respondió

— Le haremos parecer que fue así pero no lo haré—Le dije segura.

— El es un tipo muy difícil de engañar—Me dijo muy seria

— No sabes mis límites—La miré fijamente —Mi plan consistía en drogarlo y embriagarlo para que creyera que tuvo una noche conmigo el no iba a tocarme jamás no lo permitiría pero enserio quería mis maletas todo dependía de ello.

— ¡Estás loca!, pero hay que ser muy precavidas —Respondió Yajaira. Me costó mucho poder decidirme pero me tocaba correr el riesgo.

— Te ves bien—Me animaba Yajaira.

— ¡Gracias! Pero por primera vez en mi vida no quiero lucir así—Respondí asustada.

La fiesta había comenzado parecía una ramera a punto de empezar su ronda de trabajo en la noche, no quería flaquear pero estaba llena de miedo.

— ¡Sabes que esto no es obligado! —Me dijo Yajaira para ver si me arrepentía y no cometía una locura.

— ¡Virgen tampoco soy! —Le respondí

— Jajajaja estás loca— Me golpeo el hombro.

— ¡Loca porque esto termine! —Dije desesperada.

Para entrar nos contaban con una pistola todos eran malandros y prostitutas bebidas y drogas se suponía que era la fiesta ideal, mis tacones me hacían ver insegura por la tierra que rayos pensaba al traerlos, el reggaetón me traía harta Teo calderón que asco, pero ahí estaba El Niño mi víctima, me dirigí a él.

— ¡Hola bebé—Me saludo el Niño

— ¡Hola! — Le respondí y me senté en sus piernas en realidad no sabía cómo reaccionar— Aquí estoy papi.

— ¡Oh! La chica fresa es mi perra esta noche— Detonaciones en el aire me hicieron perder el control trate de no tomar y lo hice repetir y repetir tragos hasta que lo veía muy borracho y me pidió que termináramos con esto de una vez.

— Yajaira va conmigo—Le dije asustada.

— No importa esta noche serás mía— Le puse droga en la bebida pero como las manos me temblaban se me pasó la mano con la dosis y bebió el trago, mordió el anzuelo al otro día no recordaría nada, y yo no me acostaría con él.

— ¡Espera! — Me dijo Yajaira

— ¿Qué quieres? —Le dije exaltada quería salir de ahí ahora mismo.

— ¡Yo quiero quedarme! —Señalando a el Niño.

— ¿Estás loca? —Le di una cachetada para que reaccionara.

— Seré yo quien se acueste con él, lo amo desde hace algún tiempo— Respondió apenada.

— ¿Estás segura hermana? Ese hombre da asco—Quede impactada, mis oídos no podía creerlo.

— ¡Vete! —Me dijo señalando la puerta.

Me fui y no pude creer que a ella le gustara ese hombre, de verdad que era bien z*rra, no le parecía demasiado con el Wilkerson pero ella estaba loca y cualquier cosa como esa, para ella era normal, solo me sentía más nerviosa no pude pegar el ojo en toda la noche.

La KardaWhere stories live. Discover now