3.Un reencuentro inesperado

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Estoy de buen humor ya que iría a Hobbiton, es uno de mis lugares favoritos de la Tierra Media. Allí todo es muy tranquilo y monotóno, sus habitantes nunca han tenido que preocuparse por guerras ni muertes, viven aislados de todo eso y de las criaturas fantásticas, nunca han visto ni siquiera un dragón, solo los que existen en los libros y los que hacía Gandalf con sus fuegos artificiales en los solsticios de verano. Por ello los envidiaba, ver todas esas familias creciendo felices y sin nada de que preocuparse, ojalá yo también pudiera vivir eso. Toda mi vida ha sido luchar excepto cuando era pequeña pero nunca he sido feliz durante un largo período de tiempo, sin duda el descanso y ser feliz es algo que anhelo.

También volver a Hobbiton me trae recuerdos de cuando iba allí a visitar a mi amiga, Belladona Tuk, era una mujer muy fuerte y de gran carácter, pero también muy generosa y amable. Me llevé con ella muy bien desde que Gandalf nos presentó, desde entonces siempre que volvía de mis aventuras venía visitarla e incluso haciamos travesuras las dos juntas. Fue muy divertido pero se acabó demasiado pronto , yo tuve que cumplir mi obligación de servir a la Luz y cuando volví ella ya había muerto. Después de aquello me quedé muy destrozada era otra persona que quería mucho que se había ido y decidí ir a vivir al bosque de Bree para poder vivir tranquila hasta que la Luz me volviera a llamar. Aún así tengo muy buenos recuerdos de ella y de su querido hijo,Bilbo, era parecido a ella pero seguro que habrá cambiado mucho hace muchos años que no lo veo.

"No creo que ni se acuerde de ti tonta"-me dijo mi subconsciente.

"¿Enserio? Vaya yo que me hacía la ilusión de que era una persona que nadie olvidaría jamás porque como soy tan genial"-le dije haciendome la egocéntrica.

"JAJAJAJA, pero mirate que bien creído que te lo tienes. Lo digo porque cuando te conocio era pequeño así que ni te pienses que te va a reconocer"-me dijo con su voz de yo tengo razón siempre.

"¿Ah,sí?Pues yo creo que esta vez te equivocas, estoy segura que él todavía se acuerda de mí sobre todo porque siempre le llevaba regalos de mis viajes y le compraba las chuches que su madre no le dejaba, además de que a mí nadie me olvida"-le dije retandola.

"¿Sí? esta bién pero si yo tengo razón te estaré molestando durante todo el viaje y no me podrás silenciar. JA, ya verás que bie...-me dijo pero una vez que me cansé de escucharla la silencie. No sé si tendre tiempo de visitarlo pero si lo veo espero que Bilbo se acuerde de mí sino voy a tener que aguantarla durante todo el viaje y no tengo ganas la verdad. Sería muy curioso que Bilbo sea el hobbit del que habló Gandalf , me alegraría mucho la verdad, pero no me extrañaría porque que mejor hobbit para vivir una aventura que un descendiente de un Tuk además de que Bilbo era muy travieso y siempre quería salir de Hobbiton y ver la Tierra Media. Me acuerdo de esa carita de tristeza que me ponía cada vez que me tenía que ir a una de mis aventuras y no le dejaba venir conmigo, me lo hubiera llevado conmigo pero en mis aventuras el peligro de morir era algo constante y no quería que le pasará a él. Además de que su madre me hubiera matado si le decía que me lo llevaba conmigo.Bueno solo puedo rezar y pedir a la luz para que el hobbit afortunado sea él y al fin pueda descubrir la Tierra media que tanto quería conocer.

Durante lo que quedó de viaje no me molestó más mi subconsciente y pude relajarme y estar concentrada en el camino. Llegué casi a medianoche a Hobbiton , todas las casas estaban con las luces apagadas y me di cuenta de que ninguna de ellas llevaba la marca de Gandalf, me dijo que la dejaría para que supiera que esa es la casa del hobbit, mientras iba pasando por cada una de las casas me iba haciendo ilusiones de que la casa de Bilbo fuera la elegida. Y parece que se concedió el deseo porque cuando me di cuenta que es la unica casa en la que había luz y seguro llevaba la marca , me dirigí hacia ella muy deprisa y con ansias de ver que esa era la casa elegida. Y asi fue, llegué arriba y la puerta llevaba la marca de Gandalf, sin duda tenía ganas de gritar eufórica pero me contuve.Bajé del caballo y lo acomodé en un lugar donde estaría comodó y le deja algo de comida. Decidí que no llamaría a la puerta sino que entraría a mi más puro estilo. Entraría atravesando la casa convirtiendomé en arena, a Elina también, a través de la ventana que estaba abierta. Me concentré e hize que nuestros cuerpos desaparecieran convirtiendolos en arena, nos dejamos llevar por la fuerza del viento y atravesamos la ventana hasta llegar al suelo entonces volvimos a nuestra forma corpórea. Cuando abrí los ojos lo primero que vi fue a mi querido Bilbo con una cara de sorprendido que me hizo mucha gracia.

La misión(El Hobbit)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora