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Primer coro: Pensé que lo que teniamos era amor, me golpeó de la nada, la manera en que encajas ami lado. Jamás quise dejarlo ir. Pensé que esto no era verdadero. Si estas escuchando esto, esta canción es para ti.

Es casi alarmante lo fácil que Jinhwan se desliza en la vida de Junhoe.

Una cita en la cafetería (eso cuenta como cita?) se volvió un intercambio de mensajes (Junhoe se da cuenta que es mucho mejor en eso) lo cual progresa a cenas después de que Jinhwan sale del trabajo días más tarde. Todo es realmente casual, el ir a ese restaurante de kalguksu que tiene una mancha en la pared dirigido por una abuela sobre maternal que les daba comida extra porque "son jóvenes atractivos y el de las cejas está muy delgado"

-¿Así es como las celebridades salen con sus citas a escondidas? -Jinhwan pregunta sonriendo descaradamente mientras toma un pedazo de kimchi de los platos,

-¿Estabas esperando algo elegante? -Junhoe pregunta tragando un bocado de fideos -Realmente no hago cosas elegantes.

Jinhwan se encoge de hombros. -Tu eres la primera celebridad con la que he pasado una significante cantidad de tiempo. Y en la televisión eres un poco... - Jinhwan deja de hablar y señala el pelo de Junhoe. -Muy distante.

-Esa es una manera amable de decirlo. -Junhoe dice gentilmente.
-Normalmente la gente dice que soy "malo" o "grosero"

Jinhwan frunce el ceño dejando sus palillos abajo y acercándose, sus codos en la orilla de la mesa.
-En realidad no lo eres. Solo eres raro, es lindo.

Ahora esa es una palabra que Junhoe no suele escuchar asociada a sí mismo. -¿Yo- que?

-Eres lindo Junhoe -Jinhwan repite sentándose atrás otra vez. -¿Por qué crees que sigo hablando contigo?

-Esto podría ser un largo plan para secuestrarme y pedir un rescate.- Junhoe recoge algunos brotes de soja, masticando pensativamente. - Aunque no sé cuánto valdría.

Jinhwan se ríe. Junhoe sigue sin saber porque eso lo hace sentir raras palpitaciones en el corazón.

(Es probablemente porque te gusta, dice una pequeña voz en su cabeza. Cállate, Junhoe le dice)

-Te prometo que no voy a secuestrarte. De ser así la gente probablemente pensaría que tú me estas secuestrando.

Jinhwan tiene razón, está claro, pero Junhoe no piensa en ello mientras paga (sus largas piernas lo llevan al mostrador antes que Jinhwan) y salen del restaurante, el aire de la noche es un poco frío mientras caminan por la calle.

-Pagaré la próxima vez.
Jinhwan refunfuña, envolviendo su chaqueta con fuerza sobre sí mismo.

-¿Habrá una próxima vez?- Junhoe medio se burla, la mitad pregunta. -Además, te das cuenta de que estoy siguiendo con eso, ¿no? No se supone que los más jóvenes deben pagar?

Jinhwan suspira, mirándolo con una mirada que dice que esto no está en debate. Junhoe le permite tenerlo, hay otras batallas por las que luchar.

-Te enviaré un mensaje de texto esta noche- dice Jinhwan, cuando llegan a la entrada de la estación de metro.

-Sí.- Junhwe se muerde el labio, sin estar seguro de cómo responder.

El viento agita un poco el cabello de Jinhwan, haciéndolo lucir aún más joven de lo que ya lo hace. Es tierno, no es que a Junhoe le gusten los niños, o algo raro como eso, pero es tierno. Jinhwan es muy tierno.

De repente, Jinhwan se inclina, de puntillas un poco mientras roza sus labios contra la mejilla de Junhoe. Si no hubiera estado prestando atención, Junhoe se lo habría perdido. Pero tal como está, se queda atónito cuando Jinhwan se vuelve sobre sus talones, se despide y baja por los escalones, arrastrado por la multitud en un instante.

Maldita sea, piensa Junhoe mientras llama a un taxi, con la mejilla todavía encendida donde Jinhwan lo había besado. Lo besó Jinhwan lo besó.

Este suceso se repite en la mente de Junhoe toda la noche, manteniéndolo aturdido. Apenas se da cuenta de que el taxi se detuvo frente a su edificio, apenas recuerda haber entrado al edificio o a su apartamento, tumbarse en el sofá y mirar fijamente a la televisión apagada.

Esto significa que a Jinhwan definitivamente le gusta de esa manera, ¿verdad? Junhoe nunca tuvo mucha experiencia con eso, así que realmente no sabe. En cierto modo, hace que le duela la cabeza, por lo que trata de llevarlo al fondo de su mente mientras se pone sus pantalones comodos y lee cosas aleatorias en línea para pasar el tiempo (y evitar el análisis excesivo de los eventos de la noche).

Jinhwan le envía un mensaje de texto alrededor de las once, el teléfono de Junhoe vibra justo cuando termina de prepararse para la cama y está por irse a dormir. Se lanza de inmediato, desbloqueando su teléfono para leer el mensaje:

Kim Jinhwan: buenas noches, june-yah!

Kim Jinhwan: ... te importa si te llamo así?, en realidad, me pareció lindo.

Junhwe se sonroja violentamente, tragando espesamente al recordar que Jinhwan lo llamó "lindo" anteriormente en la noche. Su corazón está aplastando el teclado, pero su mente lo obliga a responder con calma y racionalidad.

Koo Junhoe: no, no me importa

Koo Junhoe: buenas noches hyung

(Junhoe se duerme sintiéndose extrañamente satisfecho.)

Antes de que Junhoe se dé cuenta, ha pasado otro mes en mensajes de textos, salidas y no-citas, y él y Jinhwan se han hecho aún más cercanos. Pero es ambiguo, un poco más que amigos y un poco menos que no. Ha estado carcomiendo a Junhoe constantemente, y a el no le va bien la incertidumbre.

-¿Qué somos, hyung?- Junhoe finalmente pregunta una noche, mientras lleva a Jinhwan a la estación de metro el viernes por la noche, casi un mes y medio después de que se conocieron.
-Quiero decir, ¿estamos saliendo? Porque parece que lo estamos, pero no quiero alejarte...

Jinhwan lo detiene con un dedo presionado contra sus labios, empujándolo contra un espacio entre dos edificios para que estén ocultos a la vista, con una de esas sonrisas exasperantemente encantadoras en sus labios.

-Podemos ser lo que quieras que seamos.

Junhoe traga densamente, mil veces más nervioso que nunca. Su corazón martilleando en su pecho más rápido de lo que lo había hecho la primera vez que había actuado en vivo, enfrentar a Jinhwan, parado aquí frente a él, es más angustioso que cualquier audiencia sin rostro.

- Yo quiero-, dice, envolviendo su mano en la muñeca de Jinhwan y bajando la mano del rostro del mayor. Se siente mucho más seguro de lo que parece, - que nosotros seamos algo. Es decir, me gustas mucho, hyung, y quiero decir, no sé si tienes el hábito de hablar con personas y medio salir con ellas, pero ...

Jinhwan lo calla otra vez, esta vez con sus labios. Son suaves y cálidos y un montón de otras cosas agradables, pero a Junhoe le resulta cada vez más difícil pensar. Es probable que su cerebro esté teniendo el mejor momento de su vida haciendo cortocircuito en este instante, pero realmente el no puede importarle.

this song goes out for you; junhwanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora