Stay with me -Bakugou KatsukiXTú

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 15

Sus puños chocaron provocando que el aire se disparara a presión, en parte, porque ella había utilizado su quirk. El hombre era bastante fuerte, pues empató el golpe de igual forma que ella, incluso más.

Abrió sus ojos con sorpresa y su corazón salió disparado cuando algo de arena fue cubriendo su brazo pegándola a él. Miró rápidamente la otra mano del sujeto que estaba formado una especie de cuchilla. Alzó su pierna y mediante una patada que impactó en el abdomen del villano, se impulsó para librarse de la arena.

Cayó un poco más alejada del villano, quien no dejaba de sonreír con diversión. Cuando aterrizó en el suelo, sintió nuevamente que la arena del piso quería atraparla por lo que saltó otra vez para no ser atrapada. Estaba en desventaja, el piso estaba cubierto por arena y por donde se pusiera, eso quería atraparla. No podía relajarse porque con cualquier descuido podría perder.

—¿Acaso solo sabes escapar? —preguntó burlándose.

Apretó sus dientes con fuerza y su rostro se sintió más ardiente por la ira. Entendió que las paredes eran su único lugar firme seguro, se apresuró a volver a impulsarse por ello y salió disparada hacia su dirección. Aunque en esta ocasión la técnica que utilizó en el inicio no le sirvió de nada.

Antes de que pudiera atacarlo, la arena subió en cantidad hasta atraparla como una manta enrollada en todo su cuerpo. Comenzó a desesperarse y sin pensarlo usó su quirk para intentar sacarse todo eso de encima, sumándole que se movía como una desquiciada.

La masa se movió bruscamente, hasta llegar a la pared más cercana y aplastarla contra ella.

—Agh —soltó ante el dolor que sintió en sus pulmones.

—Bueno, puedo confesar que estoy decepcionado —dijo con su sonrisa indiferente—. Esperaba más de ti…

—Asqueroso villano —escupió cargada de furia—, no te preocupes, haré que desees no haber dicho eso.

Poco a poco la sonrisa del sujeto comenzó a desaparecer hasta solo dejar una línea en sus labios. El ambiente comenzaba a sentirse pesado, podía sentirlo y el silencio se mantuvo por unos segundos hasta que él decidió hablar.

—Villano, ¿eh? —murmuró con una voz monótona—. Yo no soy un villano, te equivocas —comenzó a reír hasta que se detuvo para seguir hablando—. Tú lo eres.

—¿Qué? —preguntó confundida, frunciendo más el ceño— ¡tú eres el villano! ¡Has matado a mi hermana!

—Los villanos y los héroes son solo ilusión —habló ignorando los reclamos de la joven—. ¿Sabes? Todo se determina con tu suerte al nacer, dónde y con quiénes. Para ti, yo soy el malo pero para mí, tú eres la errante —explicó algo despistado.

Podría aprovechar ese momento para escapar, atacarlo y acabar con todo de una vez. Pero algo le decía que tenían que oírlo, hasta el final.

—El villano será quien esté en contra de tus objetivos e ideales y cada quien es su propio héroe —siguió sin perderla de vista—. Pues bien, yo seré mi propio héroe y todo el mundo será mi villano. Porque ellos me dieron la espalda, en ese caso, desgarraré sus pieles con mis fuerzas e ideales —su voz fue haciéndose cada vez más sombría al igual que su rostro—. Le mostraré al mundo la fuerza de un verdadero héroe.