Como quieres que te quiera | Sabilia

Capitulo 20

Ya era el primer lunes del semestre. Las fiestas habían sido normales para la nueva pareja de Sabela y Marilia, pero sus amigos se habían vuelto locos. Más específicamente la noche del uno de enero. Todxs los de nochebuena decidieron salir otra vez al mismo club. A los pocos minutos de entrar África estaba perreando a Damion; Alba y Natalia se fueron al baño y no volvieron hasta el final de la noche; Marta y María estaban gritando y besándose todo el rato; Julia y Carlos estaban como el perro y el gato; Dave estaba intentando ligarse a una chica que al final resultó ser la novia de la médico de Sabela durante esos días y la gallega y la canaria estuvieron todo el rato bailando.

Como de costumbre, Sabela y Marilia se fueron antes de la fiesta ya que todo se estaba descontrolando. Al llegar a la universidad se fueron a dormir. Sobre las seis de la mañana, Carlos llamó a Marilia.

*Conversación telefónica*

¿Marilia? ¿Estás despierta?

Hola Carlos. Si, ahora sí

A ver, es que María ha tenido
un problemilla...

A los cinco minutos las dos chicas se dirigían a la policía ya que habían detenido a María. Según Carlos, la madrileña estaba bailando con Marta y un chico empezó a mirar mal a la malagueña. La Mari pasó de él hasta que tocó el culo de la pelinegra. Ella le pegó un puñetazo que dejó inconsciente al chaval.

Al llegar a comisaría vieron a todxs lxs de la fiesta preocupados por la rubia. Estuvieron hasta las siete y media de la mañana en la sala de espera. Al final, María salió sin ninguna denuncia y se hizo amiga de un chico que también estaba en la comisaría que se llamaba Pablo.

Volviendo al presente, ya eran las dos del mediodía y Marta, María, Julia, Marilia y Sabela se sentaron juntas.

- Buah, creo que voy a dejarlo con Carlos.

- ¿Por qué? - gritaron Marilia y Marta a la vez.

- No sé... Ya no me cuida como antes y no está tan atento. Encima, está mucho con el móvil cuando estamos juntos... Mira que no soy celosa, pero esto no me da buena espina.

- Mira Juls, haz lo que tú creas. Si crees que la llama de ha apagado... No sé... Sigue tu corazón. - aconsejó Sabela.

- Que bien hablas siempre cariño - dijo Marilia mientras las dos chicas se miraban cariñosamente.

- A ver, que Julia estaba hablando, no necesitamos ñoñerias - se quejó María echándole una mirada asesina a la gallega.

- Bueno... Pues eso... Que me da mi que voy a dejarlo ya que ya no estamos tan unidos.

- Hacíais una buena pareja... - susurró Marilia aunque todas la escucharon.

Siguieron una rato más hablando hasta que tuvieron que volver a clase. Por la tarde, Marilia y Sabela se fueron al cuarto de la gallega a ver una película cualquiera para estar juntas. Por la mitad de la película, la menor se fue al baño y dejó sola a Sabela. Ella, cogió el móvil y empezó a ver las redes sociales hasta que el teléfono de su novia sonó. Tan solo por curiosidad, la chica miró de reojo la pantalla. No podía creer el nombre que había escrito en el teléfono. Joan.

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Amono' amono' todo' ebribadi. Dejadme todo lo que queráis por aquí abajo.

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