NO SOY UN ENTRENADOR POKEMON ( Portada Momentania )

primera noche

Después de salvar a los pokemones fui muy conocido en la región, a tal extremo que algunas tiendas me regalaban cosas para hacerle propaganda.

Yo vivía feliz en mi casa, tenía dinero por recompensa de los entrenadores que le robaron los pokemones, y no tenía necesidad de buscar trabajo, lo que si debes en cuando Árlin me pedía que fuéramos a buscar pokemon para luchar, al parecer quiere hacerse más fuerte, y CHISPITA no se queda atrás. Hace poco descubrí que puedo ver un supuesto nivel de mis pokemones en la pokedex

Árlin nivel 11

CHISPITA nivel 9.

Lo pasábamos en grande tratando de subir de nivel, aunque al final del día terminaba muy cansado por los viajes de las hierba al centro pokemon y de regreso a las hierbas, aunque valía la pena. A Árlin le encantaba que la llevara en mi caba mientras que CHISPITA se conformaba que le rascara la espalda y le diera masaje.

Un día de acercó un señor a mi puerta y me dijo que si podía entregar una carta al dueño de la compañía donde se crearon las pokeball, al principio dije que no porque temia que les pasara algo a mis pokemones ya que el vieje era muy largo, pero luego ellos mismo me convencieron de ir, para subir de nivel y encontrar un nuevo compañero, al final compré unas 12 posiones, 6 despertar, 7 antiveneno, 5 antiparalicis y 8 antiquemadura para partir tranquilo en el viaje ya que son unos 2 días de viaje en bicicleta, pero como no tengo el viaje será de 5 días y en el tercero hay una ciudad donde puedo comprar una bicicleta.

Nos despertamos temprano y me vestí con una chaleco negro con capucha junto con una polera azul y un pantalón deportivo negro y zapatos deportivos negros con detalles rojos ( la gente dice que parezco salido de un funeral ), guarde todas las cosas que compré en mi mochila junto con tada la comida que pude guardar.

Yo : ya estoy listo

Árlin : ya era hora

CHISPITA : ya quiero ver otra ciudad y saber que clase de pokemones y dulces hay

Yo : te gusta mucho los dulces, creo que eso te hace más tierna

Árlin : a mi igual me gusta los dulces

Yo : jajaja si quieren antes de irnos, compramos unos dulces en la tienda de aquí cerca.

Árlin CHISPITA : SII 😍😍

Después de saciar el capricho de mis pokemones nos pusimos en marcha a la ruta 47 para completar nuestra misión. Lo más latoso o cansador de todo era los entrenadores esperando un oponente para luchar y tras otro tras otro, de verdad era muy estresante, sin mencionar que sus pokemones al ser de menos nivel perdían muy rápido aunque sirve para emparejar los niveles entre Árlin y CHISPITA.

Cuando calló la noche preparé una fogata con CHISPITA mientras Árlin luchaba para armar una mini carpa de campamento para pokemones

Yo : te ayudo ?

Árlin : yo puedo sola, tú solo preocupa que el fuego no se apage mientras dormimos, me da miedo la oscuridad.

Lo último casi no logré escucharlo, lo que me pareció tierno y le sonríe, a lo que ella aparta su rostro

Yo : como vas CHISPITA ?

CHISPITA : esta listo, solo necesita más leña para la noche

Yo : tranquilas, yo voy a ir a buscar a lo que ustedes terminan de armar su casa

Me alejé un poco del lugar para buscar combustible para el fuego.
Cuando ya tenía toda la leña que creo que usaremos era hora de volver, pero escuche una voz muy cerca de mi

?: ¿está todo listo ?

2: si, solo tenemos que esperar a ese mensajero

?: ¿porque el jefe quiere esa carta ?

2?: no nos pagan para hacer preguntas. Aunque esas preguntas no me dejar dormir por la noche

?: somos dos

?, 2?: jajajajajajaja

Regrese lo más rápido que pude y todo lo que puede ver era el fuego, mi mochila recargada en un árbol , y la carpa ya lista pero vacía. Un frío recorre mi cuerpo mientras mira todo el lugar, solo viendo penumbras, y ningún ruido aparte del viento.

Yo : ÁRLIN, CHISPITA. ÁARRLIIINNN, CHISSPIITAAAAA

no hubo respuesta, incluso el viento paró de soplar, y el fuego comenzó a extinguirse, coloqué la leña que traje, pero este no se avivaba, como si no quisiera esixtir más. Cuando se consumió estaba solo junto a la oscuridad, lo que busco mi mochila para sacar mi linterna.

Yo : MIERDA LA LINTERNA NO ESTA. ÁRLINN, CHISPITAAA

Busque sus pokeball por si los encontraba debilitados, se que no les gusta pero si están mal va ser el único modo de salvarlos, pero por más que corría no lograba encontrarlos, y sentía que el bosque se hacía más espeso y las sombras mas oscuras, incluso la luz de la luna se iba apagando, mi corazón se aceleraba, no quería estar hay, no quería correr más pero debía buscarlas, no quería estar solo, todo lo que podía hacer era correr más y más mientras gritaba sus nombres.

Cuando las penumbras me alcanzaron no podía ver nada, por lo que tropiezo con una raíz de un árbol, o eso quiero creer, con la caída, rode por una cuesta hasta llegar a un claro de luna, era realmente hermoso, una luna llena inmensa y Blanca, un cielo despegado completado por estrellas, frente mío unos metros de césped antes de llegar a un lago tan cristalino que reflejaba fielmente aquel cielo estrellado.

Me acerco al lago lentamente aún con el miedo de ase un momento, solo para ver a la otra orilla una gardevoir de vestido negro, un Typhlosion, un lucario con las pintas de sus pies y orejas Rojas, un greninja envuelto en una especie de agua, un Pidgeot con las pintas de sus plumas celestes ý un eevee de color blanco, mirándome como si esperaran algo de mi o que hiciera algo, pero yo solo podía ver esos pokemones, quería hablar, queria preguntar acerca de mis pokemones pero la voz no me salía, traté de momerve pero algo me lo impedía, la respiración se me comenzó a dificultad, mi corazón latía más rápido que nunca, no sabía que pasaba, cuando de la nada veo a mi lado derecho saliendo de aquella penumbra que me perseguía, a uno de los pokemones más conocidos era Arceus, el que me adelanta unos cuantos pasos y me mira como queriendo decir algo pero yo seguía sin reaccionar, hasta que al final pude hacer algo

Yo : QUIERO A MIS POKEMONES DE VUELTA, por favor, los extraño por favor