Capitulo 1. Conociendo a Elisa

118 15 6
                                    

Elisa

15 de Abril de 2016, Lucca, Italia.

8:30 a.m.

Ya voy muy apresurada y apenas voy cruzando la calle Via Mammini para llegar a la parada del bus en la esquina y dirigirme al Palacio de Recreación de Arte Barnini. Tengo que caminar mucho para llegar hasta mi trabajo y resulta molesto ir a las prisas, aunque admito que es muy placentero caminar cuando hay un atardecer hermoso y recorrer la Piazza dell' Anfiteatro o ir a la Torre Guinigi, ir a tomar un café en frente de la Piazza San Michele a La Tana del Boia, también tienen un excelente vino tinto. Pero por ahora lo único que se me apetece es un café cargado, ayer me la pase toda la noche escogiendo los mejores bocetos que hice y ni siquiera me dio tiempo de arreglarme el cabello. Mi madre decía que no necesitaba arreglarlo, que mi cabello largo y sedoso se acomoda de una forma natural despampanante. Pero lamentablemente hace mucho viento el día de hoy y solo lo cepillé. Las mañanas en Lucca son un poco estresantes, las personas van a trabajar, a la escuela o a una cita al médico, por las tardes son tranquilas y por las noches son pura diversión. Me encanta el humor de los italianos, son muy humildes y siempre se les ve felices.

─ Buongirno Fedderico ─ le digo al guardia de la entrada sonriendo.

─ ¡Buongirno Bello! ─ dice gritando con alegría, para que lo escuche mientras subo apresurada por las escaleras enormes de piedra blanca que hay en medio del Palacio.

Antes de entrar me veo en el espejo enorme que está cubriendo un muro con flores a los costados y se encuentra antes de llegar a la sala de juntas, miro que no tenga alguna mancha en mi blusa de seda color crema, acomodo mi saco verde. Mi cabello es un desastre, no me gusta tener mi cabello suelto ya que tiene mucho volumen y justamente hoy no traje alguna peineta para amarrarlo. Mientras hago eso vuelvo a repasar mi discurso que diré a los directores de éste proyecto, pero me interrumpe mis pensamientos una voz aguda.

─ ¡Llegaste! Te ves hermosa con el cabello suelto ─ dice Violeta con tono aliviada, mi secretaria, es muy bonita tiene el cabello corto de color negro y es delgada, es más joven que yo.

─ Hola, si lo sé, me quedé toda la noche armando los bocetos y eligiendo los mejores. ─ digo apenada mientras nos dirigimos a paso veloz a la sala.

─ Bueno ya están todos aquí, solo faltas tú ¿Quieres que te preparé un café? ─ pregunta con amabilidad mientras me abre la puerta de la sala.

─ ¡Si, por favor! No sabes cuanto lo necesito ─ le suplico.

Entró en la sala y ya todos se encuentran sentados, en la mesa de cristal hay muchas botellas de agua para cada uno, hay un plato lleno de galletas acomodadas en forma de flor y estoy segura que Violeta tuvo algo que ver con esto. Los directores cambian de expresión en cuanto me ven, parecen estar aliviados de mi presencia.

─ Hola buenos días, me disculpo por la demora, me presento, soy Elisa Allen y seré la diseñadora del logo y todas las plantillas del proyecto "Bambini Protteto".

Al terminar la junta, Violeta me felicita por mi discurso y mi Jefe Marchello De la Fuente.

─ Buen trabajo señorita Allen, esto merece ir a festejar al restaurante de la Orte, sirven un suculento vino tinto y un sin fin de carnes que me gustaría que pudiera probar ¿Qué dice? ─ Me sonríe.

Marchello es una persona alta, de tez clara y una sonrisa brillante que conquistaría a cualquiera, sabe vestir muy elegante y su acento es muy pronunciado pero es suave, su papá es Italiano y su mamá es Canadiense, su papá creó esta enorme empresa y es arquitecto. Hace ejercicio, se nota que hace lo necesario para mantener su cuerpo en buena condición, sus ojos son de color miel, su cabello es castaño claro y tiene un sentido del humor divertido, siempre me saca una sonrisa del rostro. Es muy atractivo y ha intentado varias veces salir conmigo, pero aun no me siento lista para salir con alguien.

El Mensajero | Actualizaciones Lentas |Where stories live. Discover now