No no era posible, Jimin había buscado la forma de estar lejos de aquel parasito que sólo se alimentaba de su miseria y de su dolor, sabía bien lo que significaba tenerlo cerca, era un peligro enorme y sobre todo un riesgo que no quería correr nuevamente. Desvió su vista a la mano que colgaba por sus hombros, no era un sueño, aquellos anillos le recordaban tanto un oscuro pasado. Un enorme nudo comenzó a formarse en su garganta, pareciera que las paredes de cerraban a él, cerró los ojos y todo pasó por su mente como una cinta de película, mordió su labio y dejó de oír todo a su al rededor.
Abrió los ojos pesadamente, una luz extremadamente blanca estaba a punto de cegarlo, apretó los ojos y volvió a abrirlos lentamente.
—Oh querido, has despertado ya... ¡Estuvo a punto de darme un infarto, Park!—Jin se encontraba sentado a su lado con una mirada llena de preocupación.
—¿Qué pasó?
—Te has desvanecido, quiero suponer que fue por no desayunar... Debes comer cada que despiertes, es la comida más importante del día, ahora ve lo que te pasó por no hacerlo—gruñó molesto el mayor.
—Sí mamá—dijo Jimin girando los ojos, la mirada de Jin se relajó mientras negaba con la cabeza.
—Me encargaré personalmente de que comas bien, ahora formas parte de mi familia, Park... Es mi deber como mayor cuidarte—Jimin sonrió enternecido.
—Tuve un sueño extraño... Donde aparecía...—Jin lo cortó.
—¡Oh sí! Tu amigo, ese chico es guapísimo, murió casi de preocupación al verte desmayarte en sus brazos—la cara del peliplateado parecía que no tuviese colores ahora—Dios estás pálido, llamaré a la enfermera—dijo levantándose pero fue detenido por Jimin.
—Hyung, por nada en este mundo dejes que ese tipo de acerque a mi...—Jin lo miró curioso, ¿Qué clase de petición era esa? Aquel chico tan lindo se había preocupado demasiado por Jimin, ¿Por qué no lo quería cerca?
—Jiminnie, él se a portado de lo más fenomenal contigo, en verdad estuvo a punto de llamar a la fuerza armada para llevarte a urgencias.
—¡Hyung! Realmente te lo pido...
Aquella petición era algo que pensarse pero por otro lado, la mente de Seok Jin le gritaba que le hiciera caso y que vigilara muy de cerca a aquel chico misterioso.
Más tarde ambos salieron justo en el almuerzo dondeJin compró demasiada comida para Jimin, abrió los palillos y comenzó a darle avioncitos, era claro que de ahí no se movería hasta comer bien.
—Oh no aquí vamos con mamá Jin nuevamente, eso mismo hizo con Yoongi y conmigo cuando nos negabamos a comer algo aquí—dijo Jackson sonriendo.
Yoongi chasqueó la lengua y asintió mientras miraba divertido la escena pero por otro lado estaba preocupado por el menor, no entendía la razón de su desmayo ni por qué su reacción cuando aquel joven se acercó.
—¡Jimin! La enfermera me a buscado para preguntarme si ya me encontraba bien de mi desmayo, ¿Estás bien? No te lo has topado nuevamente ¿Cierto?—claro, olvidaba que tenía un clon de él mismo y que no toda la escuela estaba enterada.
Justo cuando Taemin llegó las miradas de la cafetería se posaron en ellos, las sonrisas coquetas por parte de las chicas se hicieron presentes, y ni se diga de esas miradas sucias de ciertos chicos, en especial de uno...Taehyung.
Taemin logro divisarlo sentado a unas cuántas mesas de ellos, quería correr y asesinarlo por tener el valor de aparecerse en la universidad teniendo en cuenta los sentimientos de Jimin.
—Fue por qué no desayuné, Minie—habló Jimin mintiendo con un gran bocado de arroz, Jin sonrió al verlo tan lindo y adorable con los cachetes llenos de comida, pero Taemin no es estúpido ya que vio todo, aparentemente su gemelo olvidó que estaban juntos esa mañana.
—Mmm ya veo..
Un chico castaño se acercó corriendo a ellos a toda velocidad, tenía cara tierna pero con las facciones muy bien definidas, y ni se diga de esa adorable sonrisa de conejito que cargaba, Jimin se sonrojó al ver semejante belleza y Jackson bueno... Lo mismo de siempre.
—¿Qué es lo que ven mis ojos? Una belleza divina frente a mi, benditos sean los dioses por crear semejante arte—Jackson estaba casi casi adorando al chico conejo.
—Hyung, no lo encontraba por ningún lado—habló el castaño a Taemin, este lo miro y sonrió.
—Nada de formalidades Kookie... Oh él es Jungkook, mi nuevo amigo—dijo el pelirosa señalando al chico quien de inmediato hizo una reverencia.
—Hola a todos—habló con una sonrisa robando suspiros por parte del rubio y Jin.
—¡Qué adorable!—habló el mayor mientras metía otro pedazo de carne a la boca de Jimin.
—¡Oh! ¡Dos Taemin's!—dijo el niño conejo mirando a Jimin con asombro.
—Él es mi hermano del que te hablé, Kook.
—Fak Chimin—dijo el peliplateado con la boca llena.
—Vaya, será difícil no confundirme de hyung—murmuró el castaño.
Jackson rió mientras Yoongi le gruñía por ser tan escandaloso—Tienen el color de cabello diferente—susurró el pálido mientras cerraba los ojos otra vez.
—Nah, uno es gay y el otro no, al que veas ligando con un chico es Jimin, y al otro pues ya sabes—dijo Jackson recibiendo un golpe por parte de Jin.
Yoongi alzó la cabeza curioso.
—¡Demonios! ¿Dónde dejé mis modales? Me presento cariño, yo soy Jin, mundialmente guapo, este imbécil es Jackson, al parecer el peróxido le a dejado seco el cerebro, y ese gato durmiente es Yoongi—dijo mirando al pálido llevándose la sorpresa de que este no estaba durmiendo cómo era una costumbre—Y hoy va a llover o quizá tiemble, no está durmiendo después de todo—.
—¿Yoongi no está durmiendo? Tal vez está interesado en la charla acerca de lo gay que es Jimin, probablemente ya le echó el ojo—dijo Jackson provocando que Jimin se sonrojara y Yoongi lo viese mal.
El pálido estuvo a punto de decirle algo cuando nuevamente fueron interrumpidos—Me temo que tú amigo no podrá interesarse en mi chico—Taemin se giró furioso al lugar de origen de la voz mientras Yoongi cerraba los puños dejando sus nudillos blancos.
ESTÁS LEYENDO
Twins ((Yoonmin))
FanfictionJimin y Taemin son gemelos, cada uno con su propia historia, cada uno con sus propios secretos. Pasaron de ser unidos a dos completos desconocidos. <El timbre de la puerta sonó por doceava vez haciendo que el rubio frunciera los labios, abrió si...