Tres magos, una bruja

Actitudes

Bill entró con un vaso de agua seguido de Fleur, quien llevaba un trapo húmedo. Bill le dio el agua, mientras que su ex-esposa le ponía el trapo a su prometida. Al darse cuenta de estos juegos de palabras, se sorprendió de cuanto había cambiado su vida en cuestión de minutos. No se quejaba de quien le había tocado, él conocía a la bruja, sabía como tratarla. Era hermosa a su manera, no era extravagante ni era posible de comparar con Fleur, su ex lo tenía por su herencia vella, en cambio la bruja castaña, era un ratón de biblioteca y no sólo era la bruja más sabia de la época, era la chica del trío de oro, que sin ella, no habrían podido matar a Voldemort. 

Mientras Hermione despertaba, Bill agradecía a Merlín por ser emparejado con quien desde hacía muchos años había ganado su corazón, no por su apariencia, si no por la increíble mujer que era.

Los pensamientos de Harry eran del mismo camino, lo que había dicho Ron le había hecho reflexionar, su amigo estaba en lo cierto, cualquier otra bruja al haberse enterado, lo habría buscado por mar y tierra, para al encontrarlo, besarlo sin importar quien estuviera presente. Pero Hermione era ella, su mejor amiga, la chica que siempre estuvo a su lado y confió en él, quien por haberla salvado una vez, ella se lo devolvió en siete años. Todos pensaban que era el salvador del mundo, pero nunca lo habría logrado sin ella. Nunca habría descubierto la trampilla, nunca habría hecho todas las cosas que hizo a lo largo de los años porque habría muerto en su primer partido de quidditch.

La bruja empezó a moverse inquieta, al abrir los ojos se dio cuenta de que unos ojos azules y verdes la miraban fijamente, esperando ver como reaccionaba. Ambos la ayudaron a sentarse y tomaron sus manos. Lo primero que dijo fue- Me alegro de que no sean mortífagos-

Ron estalló de risa, él sabía perfectamente, que las cosas entre ellos no funcionarían y que si la amaba, pero como a una amiga, una hermana y todo lo que había pasado, había sido por la guerra y confusión.

-¿Están molestos?- preguntó Hermione, justo después de que todos se fueran dejándolos solos, en cuanto, vio los ojos de Bill, se dio cuenta de que eran dorados, y temía por la expresión en su rostro lo que fuera a decir.

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Hola chicos

Espero que les guste, perdón que sea tan corto, pero no he dormido en toda la semana y tengo mucha tarea, pero no quería dejar de actualizar.

Gracias por todo, con cariño

Ana4BillWeasley