"Alejandro" no saca el nombre de su cabeza, "Alejandro y Alexandra en el COAR casi como en los viejos tiempos". Aparte de las bromas que se pueden crear por la extraña coincidencia entre sus nombres, se le hace nostálgica la relación entre ambos. Toma su celular, no sabe si es la mejor idea, peor, no sabe las consecuencias de sus actos.
-Hola
Parpadea aturdido "¿es real?" estadísticamente es imposible haber recibido ese mensaje. Una posibilidad casi nula. "¿Qué se supone que debo hacer? ¿Responderle?". Su mente está sumida en caos, ese último mensaje desata conjeturas y teorías que debate mentalmente. Miles de posibilidades. Analiza lo que va a hacer, no va a responderle en ese momento. 'Eliminar chat'.
Pasan dos minutos, tres, diez. Nada. "¿Es en serio? ¿No me va a responder? Qué cretino ". Está molesta, ve la hora, siete de la mañana y un poco más. "Ya debería haber despertado, ¿no ve que es una tregua?" piensa. "No, debemos hablar, quedar en paz, somos del mismo colegio y debemos representarlo bien". Piensa, mientras que en el fondo, aumentan sus ganas de hablarle, tanto como sus ganas de golpearle.
Lapsus
-Paradero, ¿Nadie baja?-
-Yo-
Sale de la combi, camina los escasos metros hacia la piscina, compra la entrada e ingresa.
El calor propia del agua termal acaricia su piel. Siente la adrenalina fluir en su cuerpo y comienza su rutina de ejercicio. El ir y venir relaja cada fibra de su cuerpo, un vaivén que le da armonía. En cada brazada deja ir sus pensamientos; en cada patada, sus sentimientos. Su mente queda en blanco y su cuerpo agotado después de unos quinientos metros de estilo crol. "Con esta tranquilidad uno puede pensar bien".
-¿Sabes?, has mejorado mucho desde que dejaste mi academia-
Una voz conocida lo despierta.
-Profesor Julio, siempre es un gusto-
-Por supuesto hijo, has crecido mucho y has mejorado tu técnica-
-Tengo mucho que mejorar-
-Escucha, cuando haces cualquier estilo, lo importante es centrarse en el momento, en cómo lo haces y no en otra cosa-
-Entonces, ¿qué me recomienda?-
-Deja de atormentarte con lo que sea que pasa en tu cabeza... Y estira más el brazo, tienes que atacar de frente al agua-
-Como todo en la vida profesor-
-Eso depende de ti hijo-
Reliqua
Se detiene un momento, respira hondo y suavemente, se seca el sudor que perla su frente. "Estúpidas zapatillas" el empeine le molesta un poco debido al calzado nuevo. Mira su reloj "Tres kilómetros en veinte, regular", continua su recorrido. Llega a la plaza principal de Los Balnearios, un distrito cercano en donde se encuentran las piscinas. "Él debe estar por ahí, siempre entrena", al ver el complejo de la piscina municipal, recuerda sus largas pláticas acerca de los entrenamientos respectivos, ella y el atletismo, él y la natación.
"¿Y si lo encuentro? ¿Le hablo? No, yo ya le mandé un mensaje". El orgullo no es su estilo, suele arreglar las cosas de una manera directa, pero él la saca de los cabales. Respira hondo, se acerca a un puesto y compra agua. "No quiero una confrontación por hoy".
Repasso
Ambos llegan a su casa
La vio al salir de la piscina, parada, con su mirada fija en él. "Tal como la recuerdo", se reprende por ese pensamiento "obvio que no ha cambiado, no han pasado ni dos meses. Sigue con la misma expresión y el mismo rostro". Doble reprenda, ella lo debilitó, coge el celular.
Lo vio, saliendo de la piscina. Sus implementos chorreaban, su cabello enmarañado y negro, y una inusual expresión cansada. "Típico de él, se quedó despierto hasta tarde y se sobreexige en las mañanas". Inmediatamente se da cuenta de su error, a nostalgia la invade.
-Alejo, por favor contéstame... No te enojes conmigo
Enviado, los recuerdos le han ganado la batalla.

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Ale
Random¿Qué pasa cuando conocemos a una personita que nos mueve el piso? ¿Qué pasa si esta personita siente que no puede vivir sin nosotros? El resultado siempre es un pequeño desastre o "una amistad con tropiezos de la que no se puede escapar.