Call me Baby

Prólogo: El inicio

Tae y Jimin llevaban un año viviendo solos, les había costado mucho que sus padres les permitiesen irse de casa, pues solo tenían 16 años. Después de muchas insistencias, y súplicas, los padres se pusieron de acuerdo para coger un pequeño piso para los dos chicos, y así estuviesen más cerca del instituto, el cual quedaba a casi una hora de la casa de sus padres. 

Los chicos se las arreglaban bastante bien solos, aunque de vez en cuando recibían la visita de los adultos para ver como estaban, o si necesitaban algo.

Todo iba perfecto para ellos. Las clases eran agradables, los compañeros siempre estaban ahí para ayudar. Y hasta se puede decir que Jimin se pilló por un chico mayor, aunque solo le veía de lejos. Jimin sabía que un chico como él jamás se fijaría en alguien menor. Era bastante normal comparado con el resto, y él estaba dispuesto a llamar su atención, por lo que se tiñó el pelo de color rojo. Llamando así la atención de todos, menos de él. Tanto chicas como chicos se derretían por Jimin, pero eso a él le daba igual. Jimin quería al chico de cabellos rubios, y le obtendría como se llamaba Park Jimin. Aunque sonase caprichoso por su parte, la verdad es que nunca había deseado nada con tanta ansia. 

Durante las siguientes semanas observó al chico de sus sueños, estuvo recolectando información, y fue así como descubrió su nombre. YoonGi, Min YoonGi. Sabía que sería difícil, pero estaba dispuesto a dar muchas cosas por llegar al corazón del frío YoonGi. Aunque tuvo que aplazar su conquista, pues empezaban los exámenes, y con él, el estrés de Jimin. El pelirrojo empezó a comer poco, y las veces que lo hacía es porque Tae estaba ahí para que comiese. Dormía apenas 5 horas, si es que llegaba, pues quería aprovechar al máximo el tiempo para estudiar. Y por si fuese poco había empezado a mojar la cama, cosa de la que TaeHyung no sabía nada. 

Todo empezó una noche en la que Jimin se había quedado hasta tarde estudiando. Estaba tan absorto en su lectura que no se dio cuenta de cuando empezó a chupar su dedo pulgar. Tae no podía dormir por lo que decidió ir al salón y leer alguna historia por Internet. Jimin miró la hora en su teléfono y vio que era la 01:30 de la madrugada, y decidió ir a dormir, pues era viernes, y tendría todo el sábado para estudiar. Nada más se acostó cayó en un profundo sueño tras tomar ese té que le ayudaba a dormir desde hacía un mes. Fue por la mañana cuando al despertar se sintió un niño pequeño sin saber porqué. Tenía el pulgar en la boca, y ganas de ir al baño, así que se levantó, y caminó al servicio adormilado, y torpe, chocando con la puerta del aseo. Se bajó el pantalón del pijama, y los calzoncillos, y se sentó en la taza del váter.

18.02.19