Call me Baby

3. ¿ENAMORADO?

Jimin dejó que Tae le vistiese, y a la hora de desayunar, el pequeño desayunó lo más rápido que pudo, ya que quería ir a clase para ver a YoonGi. Tae sonreía a su niño, y fue al baño a peinarse. Jimin fue a su cuarto, y de la mesita, cogió un papel doblado, donde ponía "YoonGi" en letras moradas. Lo apretó contra su pecho y fue al salón para guardarlo en su chaqueta . Tae volvió ,y miró la mochila del pelirrojo.

- No te lleves al oso, te van a pillar.- Vale - Jimin saco el oso, y lo puso sobre el cojín del sofá, para así taparlo con la manta -. Adiós, Suga.

- ¿Suga? - cuestionó Tae.

- Sí, pooooorque, es blanco como el azúcar, y en inglés es Suga.

- Realmente es sugar.

- También se dice así- dice el niño encogiéndose de hombros y besando la cabeza del oso.

- Vale...

Jimin cogió su mochila, y caminó hasta la puerta. TaeHyung se apoderó de las llaves, y ambos salieron de la casa, y se dirigieron al coche. Tae empezó a conducir, mientras Jimin tenía una pelea en su interior, no estaba seguro de si debía decirle a YoonGi que le gustaba, su parte infantil le decía que lo hiciese, y así siempre tendría un papi, y su parte adulta le decía que era muy precipitado, que debía esperar un poco, pues le acababa de conocer. Cuando Jimin quiso darse cuenta, ya habían llegado, y empezó a ponerse nervioso y se frotó las manos antes de salir del coche. Nada más salir, divisó la cabellera rubia de YoonGi, se fijó en él, y miró a los dos chicos con los que estaba, uno de ellos tenía el cabello negro, y una belleza extrema, y el otro, se había pintado el pelo de morado y sonreía mientras escuchaba algo que el pelinegro contaba. YoonGi alzó la vista y sus ojos se conectaron enseguida con los de Jimin, que avergonzado, abrazó su mochila, y miró al suelo. Al instante sintió unos brazos sobre sus hombros.
- Jimin, me he enterado de una cosa.

- ¿De qué? - preguntó el aludido mirando a Jungkook con ojos grandes.

- HoSeok va a hacer una súper fiesta el finde que viene, y nosotros, amigo, estamos invitados - contó Jungkook feliz.

- ¿Y cómo es eso posible?

- Somos compañeros de equipo, y me ha invitado, y dijo que podías venir si querías.

- Oh, genial.

Jungkook sonrió y soltó a Jimin, el cual lo agradeció enormemente para si mismo. Realmente Jimin no tenía ningunas ganas de ir de fiesta, preferiría pasar el fin de semana en casa con TaeHyung. Los dos comenzaron a caminar hacia la entrada de la escuela, cuando YoonGi se paró ante el pelirrojo.

- Hola, Jimin - saludó el rubio con una enorme sonrisa. "Es preciosa, su sonrisa", pensó el pequeño.

- Hola, YoonGi - respondió Jimin un poco nervioso.

- Estos son SeokJin- señaló al moreno -. Y NamJoon - esta vez señalo al pelimorado.

- Un placer - dijo Jimin haciendo una leve reverencia -. Él es Jungkook.

- Hola - dijo el castaño sonriendo -. Es un placer.

Los mayores sonrieron. YoonGi iba decirle algo a Jimin cuando tocó la campana, entonces todos caminaron a sus respectivas clases y se despidieron.

YoonGi entró en su clase suspirando, quería proponerle a Jimin que fuesen a merendar por la tarde, pues le apetecía pasar la tarde con él, ya que el día anterior pasaron un buen rato juntos, y el chico le agradaba bastante. Le parecía un chico interesante, a pesar de estar metido en el ageplay, guapo y divertido. Quizá le estaba empezando a gustar, pero todo era muy rápido, y no quería crearse falsas ilusiones, pues su último novio, le había roto el corazón. Y no se había permitido volver a enamorarse. De eso hacia ya 3 años. Todos se sientan en sus pupitres. Jin se fija en su amigo, tiene la mirada perdida en el infinito. Instantáneamente sabe que es por Jimin, ya que conoce a YoonGi como la palma de su mano. Son amigos desde los 4 años, y eso hace que les sea más fácil saber que le pasa al otro. - Habla después con él - propuso el moreno -. Yo distraeré a NamJoon y a su amigo.

- Gracias, Jin- agradeció el rubio.

- Saldrá todo bien. Se nota a leguas que a él le gustas, hasta se puso nervioso al tenerte cerca - animó Jin -. Solo invítale a salir.

- ¿Y si me dice que no? - susurró YoonGi agachando la cabeza.

- No lo hará, ya lo verás - Jin sonrió a su amigo.

- ¿Y tú que tal lo llevas con NamJoon? ¿Es todo tan perfecto como nos hacéis pensar? - cuestionó YoonGi alzando las cejas de forma divertida.

- Él es realmente genial, este fin de semana hicimos un mes, y me preparó una cena romántica - contó Jin -. Me llevó al cine, y luego paseamos por la playa, cogidos de la mano - dijo suspirando, un suspiro que dejaba claro lo enamorado que estaba -. Es el hombre de mi vida.
- Me alegro, enserio, eres un tío con suerte - respondió sonriendo.

El profesor entró al aula, y todos se pusieron de pie e hicieron una reverencia a modo de saludo. El hombre de mediana edad se paró delante de la clase y se inclinó respondiendo a sus alumnos, para luego ir a su mesa.

- Bien, jóvenes, saquen el libro y vayan a la página 57 - dijo el hombre.

23.02.19