2. ALARMA DE INCENDIOS

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Una vez en la escuela cada uno fue a su aula. Jimin se sentó delante como siempre, junto con su amigo Jungkook, el cual le sonrió. Entró la profesora y saludó a todos.

La primera hora pasó lenta y aburrida para todos, nadie estaba atento a esas alturas del trimestre, ya que pronto serían las vacaciones. Jimin en su cabecita, pensaba en si había sido un niño bueno, y en que le pediría a Papá Noel. Cuando se quiso dar cuenta sonó la campana que anunciaba el fin de la clase, la profesora se despidió y salió del aula. Dando paso a un murmullo de voces. Todos hablaban de lo que habían hecho el fin de semana, de con quien se habían acostado, de la súper fiesta a la que habían asistido, y esas cosas. Jimin negó para apartar sus pensamientos y así poder ser un niño grande.

- Y tú, ¿qué has hecho este finde, Jiminie? - cuestionó Jungkook.

- Oh, ya sabes, estudiar mucho - respondió el pelirrojo. "Realmente he sido un bebé todo el fin de semana, y hoy aún lo soy", pensó -. Sino no hay forma de aprobar - añadió.

Jungkook asintió. Se levantó para estirar las piernas sin apartar la vista de su amigo, que estaba más callado de lo habitual. Jimin le sonrió, y entró el profesor de álgebra, el cual les sonrió, y caminó a su mesa. Entonces la alarma de incendios comenzó a sonar, y todos se pusieron alerta, el profesor les indicó que fuesen a la puerta de forma ordenada. Jimin rápidamente agarró su mochila y fue a la puerta con los demás. En el pasillo olía a humo, y todos fueron rápidos a la salida de incendios. El pelirrojo sin darse cuenta perdió a sus amigos de vista, y empezó a ponerse nervioso, hasta el punto de empezar a mojar su pañal sin poder parar. Jimin chocó con alguien, y asustado empezó a hacerse popó encima. Sintió unas manos en sus brazos, y alzó la vista, encontrándose con YoonGi, uno de los chicos mayores, el cual enseguida se dio cuenta de que algo no iba bien con el pequeño, y le llegó el olor del popó a sus fosas nasales. Bajó su vista y vio su entrepierna abultada, sabiendo que llevaba un pañal.

- ¿Estás bien? - cuestionó el rubio. Jimin negó con lágrimas a punto de salir de sus ojos -. No, no llores, bebito, todo está bien.

Jimin le miró a los ojos, e instintivamente empezó a chuparse el dedo. YoonGi con delicadeza apartó el dedo de su boca y le abrazó, para tratar de calmarle. Jimin por su parte se acurrucó en su pecho, relajándose casi al instante. El rubio guió al menor hasta una zona por la que nunca pasaba nadie, y se sentó con él, poniéndole entre sus piernas, para poder acunarle.
- Bebé, ¿llevas algún pañal en tu mochila, para poder cambiarte? - Jimin asintió, y abrió su mochila en busca de un pañal y toallitas. YoonGi, lo cogió y recostó al niño sobre su chaqueta, para que no pasase frío por el asfalto, y con cuidado y rapidez, cambió al menor -. Ya está, pequeño- anunció mientras le subía el pantalón.

Jimin agradecido le abrazó, y se acurrucó en su pecho. YoonGi sonrió y devolvió el abrazo al chico de cabello rojo. Miro la papelera, y tiró el pañal sucio, encestando.

[...]

Las horas pasaron, y Tae estaba nervioso porque no encontraba a su amigo por ningún lado. Estaba a punto de llamar a la policía, cuando vio a un chico rubio caminar con Jimin en brazos. Rápidamente se acercó a él, y el pelirrojo le sonrió de forma adorable.

- Dios mío, Jimin, me tenías muy preocupado - dijo Tae.

- YoonGi cuidó de mi, papá - dijo el menor sin soltar su agarre del rubio.

- Muchas gracias, YoonGi - agradeció Tae.

- No las des, ha sido un placer - respondió el aludido con una sonrisa -. Estoy encantado con él.

Tae sonrió y acarició a su pequeño que miraba atento al rubio. YoonGi dejó a Jimin en el suelo, y le acarició el cabello.

- Mañana nos vemos, bebito - se despidió -. Se bueno, ¿vale?

- Vale - dijo el menor -. Hata mañana.

YoonGi le sonrió, y se alejó lentamente, sin dejar de pensar en el pequeño, que le observaba marcharse. Tae cogió la mano de Jimin y juntos fueron a casa. Por el camino el pelirrojo le habló a su papá de YoonGi, de como le había cuidado. Tae, por su parte, sonreía a su niño.

- Papi, YoonGi me agrada mucho - dijo Jimin-. Me gusta mucho.

22.02.19

Call me Baby Donde viven las historias. Descúbrelo ahora