"cuestión del destino." (Finn Wolfhard y tú) *en edición*

Capítulo 15.

- ¡FINN!-.

*gritaba la chica de cabello rubio y corto mientras tocaba la puerta de la habitación de su novio con fuerza, este estaba totalmente dormido, escuchó a su novia después que grito con todas sus fuerzas su nombre*.

- ¿Millie?-.

- ¡AY, POR DIOS FINN!, ¡¿POR QUÉ MIERDA TIENES LA PUERTA CERRADA CON LLAVE?!-.

- no quería que nadie me despertara, pero al parecer no funcionó-.

*al abrir la puerta la pelirubia salto a abrazarlo, corrió su rostro a un lado para depositar un tierno bueso en sus labios y abrazo nuevamente el torso desnudo del rizado, este tenía una culpa tan grande que se quería pegar a si mismo*.

- Finn, lo siento, lo que hiciste estuvo mal pero dejarte solo fue peor el que sigue enojado contigo es Noah, pero yo no me imaginó sin ti-.

*el pecoso estaba indignado por lo que acababa de decir y la aparto de él*.

- ¿pero que mierda dices?, Millie, tienes un corazón tan grande que ni siquiera te das cuenta de las estupideces que dices o que haces para que alguien se sienta bien, lo que hice fue pésimo, Sadie es tu mejor amiga, ¿acaso no te das cuenta?, no seas idiota, estar lejos de mí es lo mejor que puedes hacer-.

-... ¿y todo esto a que viene?-.

- ¿como?-.

- me estás alejando de ti-.

- no Millie, es que... sí, te estoy alejando de mí porque es lo mejor para ti, te alejas de las personas que realmente te hacen bien para ir a una relación tóxica, vamos Millie, no de nuevo-.

- Finn, tu eres lo único bueno que tengo-.

*la menor tomaba el brazo del pecoso con fuerza para que no la aparte de él*.

- Millie, no seas ciega, está relación no camina y no quiero eso para ti, te mereces algo mejor-

- Finn-..

- por favor Millie, no lo hagas más difícil-.

*el rizado la tomó de los hombros y la acompañó hasta la salida, está se dio vuelta y le pegó una bofetada, con las lágrimas que tanto estaba deprimiendo salieron paseando por sus mejillas*.

- eres una mierda-.

*la castaña bajo los pocos escalones y entró en su automóvil yéndose lo más rápido posible de ahí, Finn miraba como se iba con una mano en su mejilla y una lágrima que caía sobre está*.