𝑬𝒔𝒕𝒂𝒓 𝑪𝒐𝒏𝒕𝒊𝒈𝒐; 𝒔𝒕𝒐𝒏𝒚 𝒂𝒖

Capítulo 5. Hablar con el rubio idiota

5.

Hoy era un día de festejar, ya que si, hoy era el cumpleaños del rubio. Para el era uno de los días más emocionantes porque al fin hablará con Tony, aclarará los puntos con el y si el pide que deje a Sharon, el la dejará sin ningún problema (bueno eso cree).

Él tenía planeado con su madre una comida para ellos dos, un pastel y cuando aclararan las cosas un par de cervezas no estarían mal. Pero como siempre sus planes se fueron por un tubo.

Ya que su linda "noviecita" llego a su casa con un par de compañeros del Instituto, Música en la bocina a todo lo que daba y cajas de cervezas.

—¡Sharon porque trajiste a estas personas a mi CASA! —Steve ya estaba más que molesto, ardía en cólera.

—¡Ay Steve por favor!, hoy cumples 19 amorcito tenemos que festejar y también que ya dejaste de hablarle al fastidioso de Stark. —dijo la rubia con sisaña.

—¿Cómo te atreves a decir eso?, Tony es mi mejor amigo de la infancia y aunque no lo creas es la persona que más quiero en este mundo a parte de mi madre, él me conoce mejor que tú. —la miro con enfado. — y sabes algo, lárgate de aquí Sharon con tus amiguitos.

—¿Te vas a enojar por un tonto comentario amor?, solamente por ese niñito idiota. No lo puedo creer, pero sabes que... no, no nos vamos; nos quedamos siguiendo la fiesta.

Steve iba a responder pero Sharon lo arrastro para “disfrutar”, aunque en realidad el ojiazul lo único que le importa era hablar con su mejor amigo.

[...]

Stephen estaba demasiado feliz, había podido conseguir una cita con el chico que más le había llamado la atención del Instituto, así que se dirigía a la casa de Tony para contarle.

Pero se apagó de poco a poco esa felicidad.

Encontró a un Tony llorando en la habitación en posición fetal; se acercó para poder abrazarlo y darle consuelo.

—Tony, ¿Qué pasa? —dijo limpiandole las lágrimas.

—Steve hizo una fiesta para festejar su cumpleaños, con todos, menos conmigo. —agachó la mirada, realmente se sentía muy mal, él quería aclarar las cosas también, hablar bien, llevar a Steve al cine. Pero no.

—Tony te voy hacer una pregunta y me la contestas con toda sinceridad. —después de ver al moreno asentir continúa. —¿Te gusta Steve verdad?

El moreno abrió bastante los ojos en modo de sorpresa, Se me nota tanto pensó.

Dio un largo suspiro para después dar su respuesta

—Sí, me gusta demasiado. Créeme que nadie me habría llegado a gustar como ese hombre, no se como llego a cambiar esa amistad por amor.

Ya lo suponía pensó Stephen.

—se te miraba a leguas que te gusta, así que tú no te preocupes, voy hacer algo por ti, mientras vamos a por un helado para que se te quiten esos ánimos tristes. Ven vamos.

Lo jalo para sacarlo de casa y así el poder planear lo que iba a hacer.

[...]

Al día siguiente, al medio día se encontraba Stephen caminando directamente a la casa de Steve, tenía que aclarar un par de cosas con Rogers.

Después de varios golpes, la señora Rogers le abrió la puerta con una sonrisa, la señora muy amable lo dejo entrar para que esperará a Steve regresar de sus clases.