Nunca pensaste que eras muy buena para nadie, pero eso está muy lejos de la verdad.
Sé que hay dolor en tu corazón y estás llena de cicatrices, ojalá pudieras ver lo que hago.
Todo sucede por una razón, todo es una bendición disfrazada, solía pregun...
Corrí por toda la casa detrás de mi hermana menor, esa pequeña es tremenda, extrañaba a Lena, hoy se cumplirían dos días sin ella.
-¡Pequeña demonio ven aquí!-. Le grité a mi hermana mientras saltaba encima de un sillón.
-¡No!-. Gritó mientras hacía pucheros corriendo de nuevo.
Me deje caer en el sillón mirando a mi pequeña hermana Nicole, era genial ver cómo disfrutaba correr.
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Mis madres no estaban, al parecer Diana hizo que Mera la acompañara a su reunión.
Esperaba que cerraran sus negocios, mi madre quería abrir un salón de restauración aquí, había muchas que hacer.
Aunque la que es más metida en todo eso es Lena, sabe más de ese negocio que yo, a mi me gustaba más trabajar en una buena librería o estar restaurando todo tipo de auto.
-Nicole no tires los jarrones de mamá-. Le dije brincando hacia adelante sosteniendo el jarrón.
La pequeña se reía y yo acomode el jarrón, después la tome entre mis brazos y la alce en el aire.
Nicole pataleaba y apretaba sus puños mientras soltaba unas risitas, jugué por un buen tiempo con ella.
Hasta terminar acostada en el suelo mientras que Nicole estaba aún lado mío jugando con unos bloques de Lego.
Mi celular comenzó a sonar y rápidamente lo saqué de mi pantalón, sonreí al ver la foto de pantalla, era mi hermosa Wanda.
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-Hola linda-. Dije llevándome a la oreja el celular.
-Hola pelirroja ¿Qué estás haciendo?-. Dijo y yo sonreí mirando a Nicole.
-Estoy cuidando de mi hermana, me alegro escuchar tu voz ¿Qué haces tú?-. Le dije mientras me levantaba y tomaba en brazos a Nicole.
-Estábamos comiendo helado, mi hermano se quedó conmigo en casa-. Dijo Wanda y yo rei dejando a Nicole en su cuarto.
-Bueno espero verte hoy, ayer me ganaste en la consola pero necesito una revancha, lo que hiciste es trampa-. Dije escuchando su risa.
Nicole se quedó jugando con sus peluches en la cama, así que rápidamente fue a la última habitación, sacando aquella caja que dijo mi madre que tirará.
