*queda un día para que vengan*
Estoy algo nerviosa, mañana vienen y no sé muy bien que tengo que hacer. Aun así, hoy he quedado con Elian para ir esta noche a una discoteca.
A mi no me hace mucha gracia pero él, que es un aficionado a las discotecas, dice que es lo más y que me encantará.
No he podido resistirme a su sonrisa y me he visto obligada a decir que si.
A las 10 estoy preparada en el portal de mi casa esperando a que venga.
Le veo llegar desde la otra calle. Al verme me hace un guiño y yo me sonrojo y le sonrió.
que tal princesa?
Princesa? He pasado de ser Abigail a ser Abi y ahora a ser Princesa?
Esta noche eres una princesa -dice mirándome y sonriendo-
Ah si? Y tu que eres? El príncipe azul?
No, yo soy el bufón que solo quiere hacer reír a su princesa aunque la ame en secreto.
Me río, y empezamos a caminar hasta la discoteca.
Llegamos, y después de enseñar nuestro carnet de identidad y nuestra invitación, entramos.
Una vez allí, el ritmo empieza a correr por mis venas y empiezo a bailar. Elian se une a mi y nos pasamos la noche bailando juntos.
Después de 3 horas sin parar, salimos y nos encaminamos hacia casa.
ha estado bien, a que si?
Si! me lo he pasado genial, tenemos que volver pronto. -respondo divertida-
cuando quieras Princesa
*empiezo a frotarme los brazos*
tienes frío?
Si -contesto medio helada-
en la tele avisaron de que bajarían las temperaturas esta noche, pero no creía que lo harían tanto. Quieres mi chaqueta Princesa?
Antes de darme tiempo a responder me la pone en las espaldas, me pasa las mano por la espalda hasta ponerla en mi hombro y me aprieta contra él en un intento fallido de darme mas calor. Aunque su gesto es inútil, no le digo nada. Me encanta.
A medio camino empieza a llover. Nos miramos y nos reímos.
Empezamos a correr hasta que nos cansamos.
lo que faltaba, ahora llueve -me quejo-
Así es mas divertido -se ríe-
y romántico -pienso en voz alta-
si -susurra. Y le oigo mas cerca de mi oreja que nunca-
me giro para mirarle pero no me deja tiempo a reaccionar, cuando una nube tierna y azucarada cae sobre mis labios en forma de beso apasionado.
Cierro los ojos mientras nuestros labios se funden y dejo que fluya la adrenalina por mis venas, hasta tal punto que hace rebosar, de mi corazón, el amor que le profeso.
Cuando nuestros labios se separan por fin; él me sonríe y yo, medio atontada, le sonrió también.
Nos pasamos el resto del camino sin hablar y dejando que la lluvia nos acaricie sin intentar evitarlo. Pensando el uno en el otro.
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¿Y si el universo fuese un error?
Mystery / ThrillerDescribir esta historia? Lo podría hacer de muchas maneras, pero creo que es mas apetecible leerla y así vivir y sentir lo que le pasó a Abigail.