Capítulo 2 "La vida no da descansos"

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Mest y Nora no establecieron contacto desde ya una semana, sin embargo era Nora quien parecía evitarlo. Todo indicaba que al ver el lado bueno de Mest provocó dudas en ella, aunque seguramente no era la única razón.

Desde lo sucedido, Mest pudo comer normalmente y su madre no tuvo que pegarle o prohibirle comida, por lo que su vida en ese momento era casi normal. Aún así, las costumbres no cambiaban.
A la hora del almuerzo siempre se sentaba bajo del mismo árbol para dibujar a Nora, en algunos ella miraba hacia un cielo oscuro lleno de estrellas sentada sobre una silla, en otros se la veía de perfil, comiendo, hablando y a veces gritando. Al parecer Nora era una verdadera musa, pero Mest nunca calificó eso como una obsesión, la única razón para hacerlo era que el rostro de la fémina fue el que más recordaba, por la simple razón de que ella era su bully.

Nora no había tenido tanta suerte como el pequeño Mest.
Jared, le había dado cita cerca de un restaurante, no le pareció raro ya que de vez en cuando salían para que Jared pudiera presumir de ella, pero no como novia si no como trofeo, obviamente ella estaba al tanto de eso y aun así iba.
Sin embargo al llegar entendió que algo malo pasaría, se podría decir que fue gracias a su instinto de haber estado en tantos problemas o quizás a su sexto sentido de mujer, sin embargo aunque sentía aquel peligro, simplemente no podía huir de Jared el cual se acerco a ella para tomar su muñeca para nuevamente usar su asquerosa voz.
"Hoy te daré tu castigo por la bofetada de ayer, espero que lo disfrutes. Bueno al menos no ño harás tanto como yo, cariño"

No fue complicado de entender para Nora, tampoco era la primera vez que abusaria de ella sexualmente, pero al ser la primera vez en un callejón en una hora pico, se sintio peor que las otras veces. Sus manos estaban contra una pared, mantuvo sus piernas cerradas por el miedo pero luego de un golpe recibido en la espalda por parte de Jared las abrio. Cerró sus ojos y mordió con fuerza su labio inferior con la esperanza de que acabará rápido y de que no fuera tan doloroso. Jared quien obviamente era consciente de que Nora no se mojaria en una situación así, se puso un preservativo lubricado y saco una cámara para empezar a filmar.
"Dile hola a la cámara, cariño"

Nora al escuchar la orden de su violador, se quedó callada por un momento, pero al no ser la primera vez pudo aguantar las lágrimas y obedeció.
Mientras sentía aquel sentimiento de asco mezclado con dolor salir y entrar de ella, recordaba como había llegado a ese momento.

Todo había empezado justo antes de empezar las clases, Nora como siempre estaba en las calles junto a unas amigas, todo iba bien hasta que un grupo de chicos en el cual Jared hacia parte empezaron a hablarles.
Todo concluyó en que las féminas fueron a la casa de uno de los hombres, ninguno tenía malas intenciones, obviamente Jared era la excepción.
Cuando Nora se canso y quiso irse, Jared la siguió, la oscuridad de la noche hizo que ella no lo escuchará y con la diferencia de talla y fuerza, fue tarea fácil para Jared tomarla por sorpresa, derribarla y llevarla a su propia casa en la cual fue violada por primera vez.
Gracias a la fuerza de corazón de Nora, solo su cuerpo resultó herido, su alma como su corazón quedaron casi intactos, aún así Jared no la dejaría ir así de fácil.
"Desde hoy serás mi novia, eso le dirás a todos y si te niegas, me desobedeces o me denuncias. Publicaré el video de tu primera experiencia sexual"

Nora no tuvo otra opción que aceptar, su orgullo no le permitiría que más gente la viera así.

Mientras pensaba en eso escucho la respiración de Jared acelerarse, lo cual indicaba que pronto acabaría, obviamente le dolía y quería que eso ya hubiera acabado hace ya un momento, por lo que en un último esfuerzo reunió fuerzas para soportar las últimas embestidas, dicha fuerza la reunió maldiciendo todos los hombres del planeta. Jared el primero, su padre el segundo, los que veían a las mujeres como algo inferior, los acosadores y violadores.
Así, poco a poco convenciendose de que todos los humores aguanto, aunque por desgracia o suerte en el último momento recordó a un chico que jamás sería capaz de hacerle daño o pensar mal de ella, y eso aunque Nora lo tratará de manera ruda e injusta. Si, pensaba en Mest y justo cuando el rostro del menor apareció en su mente todo acabo, tanto las embestidas de Jared como su valentía. Cayó al suelo de rodillas y vistió nuevamente su jean.
"Espero que lo hayas disfrutado."

Comento Jared en el momento en que se subió su pantalón. No cabía duda que quería destruir el corazón de Nora y empezaba por su cuerpo, pero al ver que no lo conseguiría de esa manera solo emitió un chasquido con la lengua y se fue del lugar sin antes tumbar completamente a Nora con su pie.
Después de unos minutos de estar en el piso, cerró los ojos, empezó a imaginar un mundo en donde ella, simplemente no era ella. Por primera vez empezó a odiar en lo que se había convertido, se había convertido en las personas que más odiaba y el resultado fue que Mest se había desmayado, todo por su culpa o al menos eso es lo que pensaba en ese momento.

En el otro lado de la ciudad en la que Mest disfrutaba de un helado, recordó que su vida no podría ser tan pacífica. Eso lo recordó al ver como compañeros de clase se acercaron a él para repetir los mismos insultos y burlas, ya en ese momento Mest ya ni siquiera prestaba atención a lo que decían, el único problema fue el tiempo que tomó, después de todo su madre era muy estricta con la hora de regreso y al mirar la hora se dio cuenta de que ya estaba en retraso. Por lo cual ya en desesperación empujó a dichos chicos y fue corriendo a casa, obviamente estos lo persiguieron pero al verlo entrar a casa lo dejaron tranquilo. Sin embargo el destino que lo aguardaba en casa era sin dudas peor que el de afuera, nuevamente esa noche tuvo nuevas heridas y moretones en la espalda, además de que esta vez su madre en un impulso de querer probar algo nuevo también golpeó las piernas de Mest.
La noche fue dolorsa como para Nora como para Mest.
Su mala suerte no termino ahí ya que justo el día siguiente era lunes y ambos claramente no tenían ánimos para ir, pero al no hacerlo las consecuencias serían peores.

Lo Único Que Puedo Hacer Por TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora