Malcon se encontraba jugando a ponerle la pistola en la frente al Soldado en el suelo, mientras que ponía y quitaba el seguro del arma a cada momento; eso hacía que se estuviera aterrando cada vez que lo hacía.
En lo que hacía todo ello, siempre tenía una sonrisa sádica que ya lo caracterizaba al momento de verlo en esa situación, y a Selena ya no se le hacía tan raro sus gestos. Pero al mismo tiempo, ella pensaba en qué hacer para poder responder a la pregunta que Malcon le hizo...
- ¿Qué hacemos con él?
Lanzando esa pregunta al aire, Selena se encontraba pensando sobre lo que haría a continuación, pero Malcon ya tenía una respuesta preparada para esa pregunta, diciendo...
- ¿Qué más va a ser? Vamos a matarlo.
Él lo decía de forma tan despreocupada, que parecía que fuera cosas que hacia todos los días, y por ello Selena se vio un poco sorprendida por ello. No es que Selena estuviera dudando sobre acabar con los tipos que hasta hace poco la estuviera acechando, sino que ella no era el tipo de persona que mataba por diversión.
Por ese comentario, le pareció que Malcon disfrutaba al hacer sufrir a otros, más la forma en que lo decía, con esa sonrisa un tanto psicópata; eran puntos muy fuerte para hacerlo parecer alguien sin escrúpulos a la hora de acabar con alguien... justo como son los Soldados de La Legión.
Por eso es que ella se veía un poco incomoda al momento de darle la mirada a Malcon, porque él se veía tan normal a la hora de responder, además de que lo seguía haciendo con esa sonrisa alegre.
Si nos ponemos a pensar en Selena, ella es una chica que bien valora la vida humana, pero hasta cierto punto. Por supuesto que estaba pensando en acabar con ese sujeto en el suelo, pero una cosa era hacerlo fácil y rápido como era sacar la pistola y meterle una bala en la cabeza.
Pero otra muy diferente, era lo que posiblemente estaba pensando Malcon en ese momento, como si se le estuvieran ocurriendo mil y un ideas sobre cómo acabar con él de la forma más dolorosa y lenta posible.
Allí eran donde chocaban los pensamientos de Selena. Ella no podía pensar que la persona que la acababa de salvar fuera alguien sin ninguna consideración, que si iba por el camino que iba, podría terminar por arremeter contra ella en un futuro, y ella podría no tener oportunidad para defenderse; viéndose en situaciones de la peor forma posible.
Por eso tomo un gran suspiro, pero fue un suspiro de esos que te dejan dejar atrás todo lo que te molesta, que aunque el mundo se esté cayendo a pedazos a tu alrededor, ese suspiro te dará la calma que necesitas para poder pensar con claridad y tomar una buena decisión; justamente lo que necesitaba ahora.
Con cabeza calma, miro seriamente a Malcon que se estaba levantando de jugar con el Soldado, y le dijo...
- Pienso que lo mejor es dejarlo aquí para que los Trastornados acaben con él, no tenemos tiempo para esto.
- ¿Eh?...
- Lo que importa ahora es encontrar una salida, y ya después será salir de esta ciudad lo más rápido posible; no queremos que se haga de noche mientras estamos aquí.
- Pero tú... -ella no dejo que hablara; se encontraba muy concentrada en sus propias ideas.
- ¡Si nos apresuramos todavía podremos salir por la entrada, lo único que tenemos que hacer es abrir una puerta por donde salir! –ella en serio que se encontraba absorta en su idea de salir, tanto así que no se dio cuenta de la expresión de Malcon -. ¡Podremos hacer algún plan mientras nos vamos, pero por ahora nos tenemos que mover lo más rápido posible!
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En Un Mundo Muerto
Science FictionEn un mundo donde las personas tienen que conseguir las cosas por su propia fuerza, la vida se ha visto limitada a solamente esconder la cabeza cuando se escucha la palabra Trastornado, pero aparte de ese problema común de todos los días, una person...