El Benefactor (Adaptación) TERMINADA

Cap.3

La primera noche en ese vecindario no había sido el mejor,el departamento estaba en malas condiciones y su pequeña se había mostrado triste,Lena temía que en cualquier momento algo sucediera,a altas horas de la noche las voces de mujeres ofreciéndose se escuchaban,a través de su ventana,haciendo que Lena cantara una pequeña melodía y así poder hacer dormir a su pequeña.

Pero sabía que tenía que soportarlo, lastimosamente no tenía otro lugar al cuál ir ni tampoco tenía el apoyo de su familia,lo único que le quedaba era poder soportar, no había podido dormir correctamente,tenía los nervios de punta al imaginar que en cualquier momento alguien podía meterse dentro de su pequeño departamento.

Cerca de las siete de la mañana la puerta principal era golpeada con fuerza,la primera reacción de Lena fue sobresaltarse, inmediatamente el miedo se apoderó de su cuerpo,su pequeña quién dormía con ella había comenzado a despertar,lo que hizo a Lena susurrar lo siguiente..

-shh...duerme cariño..-los golpes en la puerta seguían y Lena decidió levantarse,normalmente despertaba temprano para cumplir con su labor en el viejo restaurante pero hoy era su día de descanso,su cuerpo le había cobrado factura y la noche anterior había sido todo un lío,se dirigió hacia dónde tenía una pequeña bata y se la ató a su cintura, agradecida por cubrirle lo suficiente,tomó una pequeña liga negra y tomó su cabello en un pequeño moño mal hecho, comenzó a caminar con prisa hacia la puerta,lo que menos quería era seguir escuchando los fuertes e insistentes golpes en la puerta.

-buenos...-Lena abrió la puerta con una sonrisa,saludando como siempre lo hacía pero su sonrisa se borró al ver aquella joven de nombre Kara frente a ella con la misma expresión seria, aclarando su garganta continuó-buenos días.-saludó con evidentes nervios,no de los buenos,a pesar de parecer mucho mas joven que la propia Lena,esa chica tenía una potente aura posesiva,sus ojos azules eran tan potentes que Lena se sintió intimidada,observó por unos segundos a esa joven,era delgada y del lado izquierdo de su cara tenía una enorme cicatriz que adornaba su mejilla entera desapareciendo hasta el comienzo de su oreja,por un momento se preguntó que era lo que le había sucedido en esa enorme y fea cicatriz,pero prefirió regresar a su mirada,lo menos que quería era dar explicaciones innecesarias.

Observó la mirada de kara, dándose cuenta que ella la observaba con clara irritación en su mirada,en su mano traía una pequeña hoja blanca la cuál le extendió a Lena,a quien ignoró por completo el saludo.

-mi padre dijo que este es el precio que debe pagar, acabamos de arreglar las tuberías de agua-dijo sin siquiera mirarla,Lena tomó la hoja entre sus manos con el ceño levemente arrugado, observó la factura y levantó la mirada confundida.

-pero yo no he usado nada todavía,no podré pagar.-habló mirandola-es demasiado elevado.-dijo mirando a la joven que la miraba detenidamente,para su sorpresa la chica simplemente mencionó algo entre dientes para después dedicarle una fría mirada.

-no me importa las necesidades que tenga!-dijo ala defensiva mientras se separaba de la puerta,estuvo a punto de decir algo pero en esos momentos la voz de una pequeña pelinegra se escuchó.

-mami.-Lena giró para encontrarse con su pequeña,sus cabellos negros totalmente desaliñados y con una camisa negra gigante quedandole como un vestido,venía tallando uno de sus ojos mientras miraba a su madre platicando con esa mujer de vestimenta oscura.

-Nia,amor enseguida vuelvo contigo-la pequeña asintió con la cabeza mientras giraba nuevamente para caminar fuera de esas dos adultas, Lena al ver que la pequeña se había marchado giró para encontrarse con un par de ojos azules mirando a su pequeña.-no puedo pagar toda esa cantidad.
-trató de razonar nuevamente con la hija del dueño del edificio,sin embargo no obtuvo la respuesta que quería.

-le dije que no me importa,sólo cumplo con lo que mi padre dijo.-dicho esto comenzó a caminar rumbo a las escaleras,Lena dio un suspiro mirando la cantidad, tenía que buscar otro empleo para tener un poco más de dinero,no lograría alcanzarle,caminó rumbo ala cocina donde su pequeña estaba sentada mirando a la nada con una mano sosteniendo su cabeza, Lena al observar a su pequeña no pudo evitar sentirse triste, besó su cabeza y caminó rumbo al pequeño refrigerador..

-mami tengo hambre.-dijo haciendo un pequeño puchero,Lena sonrió mientras se acercaba a ella con una sonrisa,la pequeña Nia era su mayor tesoro,había batallado mucho para tenerla y sobretodo sabiendo la condición extra con la que había nacido.3

-te haré el desayuno y después iremos con la tía Iris de acuerdo?-la pequeña asintió rápidamente mientras sonreía enormemente.

-iremos al parque como siempre?-preguntó una pequeña esperanzada, Lena asintió con la cabeza y su pequeña empezó a aplaudir con emoción.-genial,llevaré mi viejo balón-dijo mientras intentaba levantarse, Lena al ver las intenciones de su pequeña habló..

-pero primero a desayunar.-la pequeña asintió con la cabeza, mientras Lena preparaba unos huevos con tocino,la pequeña estaba observando la fotografía de su madre,como cada mañana, Lena había acostumbrado de esa manera a Nia para así,poder recordar a su otra madre.-ven a lavar tus manos amor-la suave voz de Lena se escuchó en esos momentos,la pequeña la miró sobre su hombro y asintió con la cabeza, minutos después ambas se encontraban desayunando, mientras la pequeña le comentaba sobre un nuevo juguete que había salido al mercado,con la esperanza de que porfin su madre pudiese comprarlo.

-y trae todo incluido mami!-su pequeña hablaba con cierta emoción-además tiene unos guantes bonitos-Lena sonrió al observar la ilusión de su pequeña, sabiendo perfectamente la obsesión que tenía con el boxeo.

-ya veremos cariño....termina tu desayuno-la pequeña sonrió y asintió con la cabeza,sin embargo continuaba hablando.

-le puedo decir al señor George que me enseñe a golpear mejor y..-Lena negó con la cabeza mientras miraba a su hija.

-amor...-la pequeña la miró atenta–te he enseñado muchas veces que no debes hablar con la boca llena..-la pequeña hizo una mueca.

-pero...me lo vas comprar?-preguntó mirando a su madre, Lena suspiró sin saber que decirle realmente,su pequeña la miraba con mucha esperanza y si bien,estos no eran buenos tiempos para Lena, afortunadamente en esos momentos el sonido de su teléfono llamó su atención,bajo la atenta mirada marrón de su pequeña,se levantó para tomar su viejo teléfono y contestó.

-buen dia Iris-habló una Lena mirando como su pequeña jugaba con la comida.

-porfin respondes mujer-bromeó su mejor amiga-quería saber si vamos a encontrarnos en el lugar de siempre-mencionó-además te tengo una sorpresa.

-claro, sólo tengo que cambiar a Nia y nos vemos dentro de un rato-habló la castaña mirando a su pequeña quién es llevaba su plato al fregadero.

-de acuerdo,nos vemos dentro de una hora.-dicho esto la mujer colgó,Lena suspiró mirando a su pequeña,caminó hasta una de las ventanas del departamento para poder abrirla,al momento de hacerlo respiró profundamente el aire y observó hacia abajo,sin ser consciente de sus actos se dió cuenta que observaba a Kara,la hija del dueño del edificio quién en esos momentos hablaba con semblante serio con un tipo de color el cuál tenía edad avanzada, observó que traía la misma chaqueta oscura y como si aquella mujer hubiera sentido su mirada,levantó la vista hacia el departamento de Lena encontrándose de lleno con los ojos verdes de la pelinegra, Lena asustada cerró nuevamente la ventana por miedo y suspiró hondo,no sabía quién era esa joven sin embargo parecía una típica delicuente.

-mami estoy lista!-la voz de la pequeña Nia llamó su atención,giró para encontrarse a su pequeña con un pequeño shorts deportivos color negros con dos franjas blancas,una camiseta con el número uno del Real Madrid y unos tacos de fútbol,Lena sonrió al ver a su pequeña,no podía negarle nada,no cuando sabía que probablemente era la única que tendría en su vida.

-de acuerdo,sólo iré por una botella de agua para que no te deshidrates.-la pequeña Nia asintió con la cabeza mientras tenía su viejo balón cerca de su cuerpo.

-que sea rápido por favor-dijo haciendo un pequeño puchero, Lena fingió enojo sin embargo una pequeña sonrisa adornó su rostro.

otros dos y ya,no se olviden de dejar su estrellita