Cap. 64

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Lena despertó el día siguiente con una enorme sonrisa en su rostro, observó cómo la ojiazul estaba acostada boca abajo con la espalda desnuda y recordó lo que había pasado la noche anterior, colocó un mechón de su cabello detrás de su oreja y contempló el cuerpo de su novia, aún pensaba que todo era sueño, el haberle pedido estar con ella y el haber visto nuevamente a sus padres, se sentó al borde de la cama mientras su sábana cubría su cuerpo, miró por unos instantes su sencillo anillo y sonrió mientras pasaba lentamente un dedo sobre el, un suspiro salió de sus labios, había logrado rehacer su vida y dentro de ella sabía que Kara era la persona correcta.

Giró unos segundos y observó a la ojiazul aún dormida y optó por levantarse, dejó caer la sábana al suelo y se dirigió hacia la ducha, en cualquier momento podían llegar sus padres con su pequeña, aún había muchas cosas que tratar, dudas que guardaba dentro pero por un momento sólo quería disfrutar de la sensación, observó su rostro en el espejo y desconoció a esa mujer frente a él, con una enorme sonrisa y un brillo único en sus ojos, las lágrimas de infelicidad habían terminado para ella, la sensación de tristeza de saber que no podía darle algo decente a su pequeña, pronto sintió cómo sus ojos se humedecían de felicidad y negó con la cabeza.

Todo estaba bien por el momento.

Comenzó a ducharse mientras su rostro reflejaba un regocijo cómo nunca antes, estaba feliz, tenía mucha felicidad dentro de su pecho.

Cuándo terminó de ducharse tomó una pequeña toalla blanca y se enredó, entró a su habitación y encontró a la ojiazul todavía dormida, comenzó a cambiarse y pronto se acercó a ella..

-Kara...-la llamó suavemente, la ojiazul se removió entre las sábanas y enterró su rostro nuevamente en la almohada..-Kara... despierta, mis padres y Nia vienen en camino...-la ojiazul no dijo nada, simplemente se quejó mientras tomaba las sábanas con la intención de dormir, pero Lena continuó-Kara...-la ojiazul gruñó.

-ya escuché Lena...-su voz sonó más grave de lo normal, giró para mirar a Lena y la mirada de la castaña fueron a los pechos de la ojiazul, Kara sonrió por ello y estiró su mano mientras la miraba.

-que pasa?-preguntó la castaña con confusión mientras tomaba la mano de la ojiazul con una pequeña sonrisa, Kara suspiró y frotó su dedo anular dónde tenía el pequeño anillo, Lena miró el semblante de la ojiazul, una sonrisa cruzaba por su rostro y seguidamente soltó un sonoro suspiro.

-aceptaste-dijo con una pequeña sonrisa, la castaña le regresó la sonrisa mientras se inclinaba un poco para besar la frente de la ojiazul.

-tú sabes porque.-dijo en voz baja mientras comenzaba a pasar sus manos por la mandíbula de la ojiazul, ella sonrió y pronto sintió los labios de Lena junto a los suyos, le regresó el beso con ternura y finalmente se separaron.-ahora a levantarse..-dijo mientras de separaba de la ojiazul, Kara asintió con la cabeza y se dirigió hacia la ducha mientras la castaña se dirigía a la cocina..

Se encargó de preparar un poco de café y tomó de la pequeña nevera unos huevos con tocino mientras su rostro contenía una pequeña sonrisa, comenzó a cocinar mientras miraba por el rabillo del ojo observó a la ojiazul secando su cabello con una pequeña toalla, se miraron unos segundos y sonrieron al mismo tiempo.

-te hubiera ayudado..-dijo la ojiazul mientras besaba su mejilla, Lena sólo sonrió y negó con la cabeza.

-esta bien Kara, que tal si te encargas de colocar los platos en la mesa?-la ojiazul asintió con la cabeza y pronto estaban desayunando en silencio, hasta que la ojiazul levantó la mirada y habló.

-Lena, tengo que preguntar qué es lo que harás.-Lena levantó la mirada confundida, la ojiazul explicó-tú familia, ellos quieren tenerte en su vida y lo sabes.-dijo en voz baja, la castaña dejó su tasa de café en la mesa y observó su sencillo desayuno..

El Benefactor (Adaptación) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora