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—Me gustaria que me hables de aquel chico con el que estuviste bailando toda la noche—sonrió con picardia.

—Ya te dije, se llama Louis y es lo único que se—respondió Harry mientras buscaba las llaves de su departamento.

—Es lindo, ¿Por qué no le pediste su número?

—Niall, ¿Te olvidas que tengo novio?, y ahora debe estar durmiendo asi que, si vas a quedarte en nuestra casa es mejor que no hagas ruido, y menos que hables de otro chico. Sabes como se pone— suspiró.

—Lo se, y por eso necesito que salgas con otra persona Harry, no me gusta que te cele tanto.

Harry abrió las puertas de su departamento y notó que todas las luces estaban apagadas.

—No quiero discutir de nuevo sobre eso, Niall, nos amamos y es lo unico que importa—susurró para no despertar a Ian—Vas a dormir en el sillón, ahora te traigo unas mantas para que te tapes.

Mientras Harry se dirigia a su habitación, Niall fue en busca de un vaso de agua.

No queria despertar a Ian, asi que simplemente entró despacio a su habitación sin siquiera encender las luces. Estaba por agarrar las mantas para su mejor amigo pero escuchó un ruido extraño proveniente de su cama. Quizas Ian estaba teniendo pesadillas, pensó.

Encendió las luces y lo que vió a continuación era lo último que esperaba ver. Estaba Ian acostado junto a  un joven morocho quien se estaba poniendo su ropa interior. Harry no supo como reaccionar. Ian solo lo miró con los ojos bien abiertos y ninguno dijo nada.

Harry practicamente corrió de su habitación hacia donde se encontraba, ya acostado en el sillon, Niall.

—¿Y donde estan mis mantas Harry? Encima de que me haces dormir en el sillon—se quejó mientras observaba a su amigo. Pronto notó que este estaba con lagrimas en el rostro y sin expresión alguna—¿Qué sucede?—se levantó rápidamente para acercarse a su amigo, quien no se movía del lugar.

—Harry, debes entenderme. Te dije que no vayas a esa fiesta, te lo advertí— entró gritando Ian al salón— No me quisiste escuchar, me hiciste enojar Harry.

—Vete de mi casa—soltó Harry sin siquiera mirarlo. Niall no entendía nada de lo que estaba ocurriendo.

—No me iré Harry, debes hablar conmigo. Debes perdonarme.

—Nos vamos Niall— miró a su amigo a los ojos, quien rápidamente se colocó sus zapatillas y se encaminaron a la puerta. Dejando los gritos de Ian atrás

—No puedes irte Harry, no puedes dejarme—gritó— Si me dejas me mato Harry, es toda tu culpa.

—No lo escuches—susurró Niall mientras agarraba a su amigo del brazo.

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—Supongo que estarás contento—gritó Harry al entrar a la habitación de Niall.

—¿De qué hablas?

—Es tu culpa, tu querías que termináramos—lloró mientras se tiraba a la cama.

Niall solo suspiró, conocía a su mejor amigo, no lo decia a propósito. Es su manera de lidiar con los problemas que lo superan. Pero antes de si quiera querer contestarle algo, este se levantó rápidamente de la cama y lo abrazó.

—Lo siento, lo siento—lloró en su hombro—soy un idiota. No es tu culpa.

Ambos se acostaron en la cama de dos plazas, Harry solo lloraba, sin decir ninguna palabra. Mientras que Niall lo abrazaba y acariciaba sus rizos para calmarlo, pero obviamente no funcionaba.

SENSE (Larry S)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora