★Mi Príncipe Del Mar/ YoonMin★

supermom

YoonGi ahora se encontraba en posición fetal en la cama de SeokJin, viendo un punto fijo a la nada, digamos que sus pensamientos lo traicionaron. Después de aquel pequeño incidente en su pervertida cabeza, le dijo a JiMin que se sentía mal y quería regresar a casa, no quería hablar del tema y tampoco ver a JiMin tan malditamente apetecible hablando de la manera carnal.

Ahora hablemos de Park JiMin, el ceviche parlanchin, un alma pura que conmueve al ser más despiadado de la galaxia en alguien con sentimientos y posible cariño por gatitos felpudos, comprendiendo la supuesta situación en la que estaba YoonGi, sin ninguna pizca de malicia y con muchos chorros de bondad en su ser, detestaba ver mal a las personas, en el camino de regreso a casa le intentaba preguntar a YoonGi que es lo que tenía, pero el susodicho le evadía a total costa lo que hacía que el rubio se preocupara mas por el estado de YoonGi, lo peor, es que JiMin en el regreso de camino a casa notó algo en YoonGi, si, notó que había algo extraño entre sus piernas, por cuestiones de seguridad solo le devolvió la joya que hacía que YoonGi pudiera respirar en el agua, ahora no corría peligro de que su padre, o alguno de los guardias lo atrapase, pues ya se sabía lo que era YoonGi. En sí, JiMin se había asustado mucho porque pensó que a YoonGi se le estaban saliendo las tripas por el culo y eso era lo que sobresalía de su entrepierna.

Al momento de llegar a la casa con un enorme alboroto por parte del rubio, JiMin hizo que YoonGi se acueste con cautela sobre la cama de Jin, pues si desangraba no quería que manche su cama, ¿Inteligente no?, de inmediato fue en busca de ayuda con su familia, primero fue en busca de SeokJin, el podría comprender lo que le sucedía a YoonGi, pero no lo encontró por ningún lado de la casa al igual que a NamJoon, su segunda opción fue su mamá, ella se encontraba en la biblioteca leyendo sobre algunos libros de suspenso.

Obviamente JiMin le contó con lujo de detalle lo que pensaba que le sucedía a YoonGi, su madre intentaba oprimir su risa ante la inocencia de su único hijo y deseo que nadie le quitara esa virtud tan linda de JiMin.

Al momento de llegar a la habitación señalada, JiMin de la forma mas cuidadosa se asomó por la puerta, con total pena se acercó nadando al borde de la cama y se sentó, con una de sus manos acarició la espalda de YoonGi y este al sentir el tacto se tensó.

- ¿Cómo te sientes Hyung?

La mente de YoonGi estaba debatiendo si contestarle o no, de igual manera JiMin no sabía lo que sucedía y dejarlo de hablar sería una opción desagradable y más preocupante para el pequeño.

- Me voy a morir

Quizá la mejor opción era haberse quedado callado, pues ante esas palabras lo que logró fue que JiMin lo deje de acariciar y en su lugar pequeños hipidos comenzaran a escucharse, si, JiMin estaba llorando.

- No digas eso Hyung - JiMin se sentía pésimo, tenía sentimientos encontrados justo ahora, no quería que YoonGi se muera, no ahora, era tan joven, tenía mucho por vivir - Sé que mamá encontrará algo para volver a meter tú tripa en su lugar - hipó

YoonGi no supo si transmitir el sentimiento de ternura o de protección que tenía en ese momento, pues JiMin se veía tan lindo e indefenso justo ahora que le provocaba una sensación de ternura aunque suene cruel.

- Si JiMin, mi tiempo aquí ya terminó - dramatizó

JiMin tenía una angustia grande, sin importarle lastimar a YoonGi, se abalanzó en él aferrándose como pudo, no quería soltarlo, aún tenía lagrimas que descendían de sus ojos.

La madre de JiMin no tardó en llegar con algo en una bolsa, al ver la escena se conmovió, estaba en una guerra mental debatiendo si decirle lo que YoonGi tenía no era nada grave si no más bien normal en los humanos o simplemente que JiMin viva en la ignorancia de aquel tema, pero si lo hacía, cada vez que a YoonGi le pase, JiMin entraría en pánico y muy posiblemente le de alguna de sus crisis, pero si lo hacía podría interesarse en el tema y ahí perdería su encanto inocente que le daba el toque a su personalidad encantadora. Quizá podría explicarle de una manera que deje su inocencia intacta pero a la vez que sepa un poco del tema y causas, pero para eso tendría que esperar a que SeokJin regrese, él era el indicado para éste tipo de temas.

- Llegue para curarte - Nevada alzó la bolsa que traía entre manos indicando que eso era la salvación de YoonGi, por otra parte JiMin había dejado de abrazar al peligris e intentaba retener sus lagrimas para que su madre no lo vea llorar aunque eso era casi difícil de esconder pues tenía los ojos rojos.

- Mami, YoonGi se va a morir - La expresión confusa de la mujer se hizo presencia, tenía el ceño fruncido, ¿Por qué rayos JiMin decía esas cosas?, iba a preguntarle a YoonGi pero al ver que él susodicho tenía una sonrisa apenada que le estaba proporcionando como un signo de arrepentimiento por mentirle a JiMin, comprendió de que YoonGi le había metido esas ideas tan nefastas a su pequeño hijo. Así que decidió seguir con él juego para intentar darle una lección a YoonGi y que aprenda que con JiMin no se juega así.

- Mami tiene la solución - Nevada abrazó a JiMin haciendo que el chico hunda su nariz en el cuello de la mujer mientras ella le besaba sus cabellos de oro, con una sonrisa sarcástica, miró a YoonGi y éste sólo tragó grueso, de ahí no iba a salir con sus partes intimas, quizá serían comida para pirañas. Ahora la madre de JiMin estaba más segura que necesitaría mas de una bolsa.

Después de diez minutos los tres se fueron a la planta baja, para ser mas específicos en una de las habitaciones con baños, era raro pero muy útil cuando tenían visitas, como YoonGi ahora que lo necesitaba mucho.

Habían agarrado una de las tinas de aquel baño y metieron a YoonGi adentro, estaba nervioso porque lo habían dejado cinco minutos solito, JiMin había acompañado a su madre a traer mas de esas bolsas negras y raras, no sabía para qué, simplemente le dijeron que no se mueva, y YoonGi como es tan bien portado, hizo caso a lo que la señora Park le dijo.

Después de una dolorosa espera, Nevada y JiMin volvieron pero ahora no con una bolsita como la de hace rato, si no más bien con dos sacos negros cada uno, en total eran cuatro.

- No pienses en nada que te ponga duro YoonGi, relájate - claro, para la señora Park era fácil decirlo porque no tenía a semejante bombom rubio veinticuatro siete en sus pensamientos, pero intentó hacer el esfuerzo de no pensar en nada sexual, quizá si se ponía a recordar lo que pasó ese día.. cuando casi pierde a JiMin.., Se acomodó en la tina y cerró los ojos.

Si.. eso le estaba ayudan...

- ¡AHH, MIERDA! - Eso no lo vio venir, maldita sea, ahora tenía casi seis kilos de puro hielo en su cosita, y no crean que se lo hicieron de la manera mas delicada posible, no. Literalmente le tiraron los cubos de hielo en esa dirección delicada como flor.

- Esto volverá a meter tu tripa en tú ano - No joda señora Park, hasta parecía burla, realmente YoonGi deseó no haberle dicho a JiMin que se iba a morir. Ahora sabía que realmente con JiMin no iba a volver a jugar de esta manera, la señora Park daba miedo en cierto aspecto.

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Espero les haya gustado ^^

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Les vengo a hacer spam de mi nueva historia, es kookv y ya está disponible en mi muro, paras las que les guste este shipp y les interese la trama pueden ir a leerlo, por el momento sólo esta el "prólogo" y el capitulo #1 lo publicaré un poco más tarde, serán bienvenidXs.

Gracias, Los amo💜