Renesmee Cullen tiene una corta edad cuyo número nadie creería al compararlo con su apariencia de estudiante de instituto y sus inteligentes y maduras palabras.
Y es que ciertamente, si Nessie no se ve como se debería de ver a su edad ella tampoco s...
mi reflejo frente al espejo se veía irreal. Portaba un vestido que como cualquiera pensé que pasaría muchos años antes de llevar encima, sin embargo, hoy una pulcra tela blanca llena de delicados encajes adornaban cada una de mis extremidades. Detrás de mi, Louisa revoloteaba de un lado a otro asegurándose de que ninguna imperfección adornaba la pieza de arte que había hecho para mi, calificada de tal modo por mi, las improntas, mis tías, abuela e incluso mi madre había ovacionado el precioso vestido que ahora yo portaba. Quise llorar frente a mi reflejo.
– ¡Dios! – exclamo Charlie al cruzar la puerta y verme vestida de blanco frente al espejo de cuerpo completo, se dispuso a caminar hacia mi.
– ¡Charlie! – chillo tía Alice de tal modo que nos sorprendió a todos. – ten mucho cuidado con poner tus pies encima del velo. – le advirtió.
– si. – comento Louisa. – dudo que pueda arreglar una huella manchando la tela blanca. – dijo, apresurándose a sacar el velo del camino de mi abuelo, el cual las ignoro para continuar su recorrido hasta mi.
– creí que pasaría mas de una década antes de ver a otra Swam en el altar. – dijo con una media sonrisa, sus ojos se veían cristalinos como si fuera a llorar en cualquier momento.
– solo no llores. – le dije con una sonrisa. – o terminare llorando contigo. – lo mire conectar sus ojos conmigo, dedicándome su sonrisa de felicidad. – ¡¿Rene esta acá?! – pregunte, al escuchar a mis padres subir las escaleras junto a otra mujer que hablaba con energía.
– como lo pediste. – me dijo mi abuelo, mi mirada recorrió cada espacio de la habitación en la que se hallaban las mujeres que habían trabajado incansablemente para que este día fuera perfecto, mi corazón se acelero y mi abuela Esme, se acerco junto a Emily que cargaba al pequeño Liam entre sus brazos.
– no estés nerviosa. – aviso mi abuela.
– todo va a estar bien, te lo aseguro. – dijo Emily cuando justo mis padres atravesaban la puerta acompañados por Rene, mi abuela materna, la cual no tenia idea de mi existencia y la cual había logrado traer al día de mi boda bajo una mentira, una mentira que se mantendría por el resto de su vida.
Rene me miro sin mucha familiaridad, pues lo único que sabia de mi era lo que le habíamos hecho creer, que Esme era mi tía y llevaba un tiempo viviendo en la mansión Cullen, había conocido a Jacob, nos habíamos enamorado y ahora, ella había sido invitada a dicha boda, simple, sencillo... ella no tenia idea alguna de que era mi abuela y por su bien nunca se enteraria de ello.
- oh que hermosa, ¿eres...
- Renesmee. - respondí, sabia que ella me conocía como Nessie; Rene frunció el ceño pero un par de segundos tardo en regresar en si.
- lindo nombre. - dijo dedicándome una sonrisa, una sonrisa maternal que me invadió calidamente. - me recuerdas a mi Bella el día de su boda. - dijo, sus ojos se cristalizaron y miro a mi madre, le extendió su mano la cual fue alcanzada por mi madre, tomo la mía también creando una cadena entre nosotras, me habría encantado llamarla abuela en ese instante.
- mamá. - dijo mi madre, note que se había puesto sensible también. - debemos llegar al bosque, sera mejor que vayamos ahora. - dijo, Rene asentio en su dirección y se giro para mirarme con su genuina sonrisa, sin previo aviso rodeo mis hombros con sus brazos, Rene me abrazo y luego salio de la habitación preguntándole a mi madre quien rayos celebraba una boda en medio del bosque. sonreí mientras la veía irse.
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